Capítulo 18.

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—Creo que ya me arrepentí— Harry deja de caminar y se detiene bruscamente, Louis voltea a mirarlo y alza ambas cejas.

—Estamos literalmente frente al lugar— Harry ve la escuela y suelta un pesado suspiro, ambos ya estaban vestidos para la ocasión, se habían comprado unos smokings.

—Pero no sé, somos extranjeros, quizás no sea buena idea— Louis se ubica frente a Harry y pone sus manos sobre los hombros de este, apreta con suavidad para relajarlo y lo mira fijamente a los ojos.

—Tenemos todo el derecho de estar aquí, es un evento que se hace para todos, no sólo para los familiares de los graduados— Harry arruga su nariz ante eso, al parecer no podía hacer cambiar de parecer a Louis.

—Pero el lugar no me da una buena vibra— el ojiazul asiente con suavidad, a él tampoco la verdad, pero tenía ganas de ir, se había entusiasmado desde que Harry le había contado sobre el evento.

—Está bien, podemos volver y ver unas películas— Louis ofrece con suavidad y Harry inmediatamente se siente culpable.

Muerde su labio inferior y sin darles más vueltas, avanza y jala de Louis con suavidad, el castaño lo sigue con pasos torpes debido a la rapidez del menor.

Ambos entran en el lugar y recorren los pasillos de la escuela siguiendo a la gente que parecía saber hacia dónde era la fiesta.

Louis miraba a su alrededor un tanto confundido, su mirada se pone en un pequeño mural de vidrio donde parecían haber fotos de las antiguas generaciones.

A el ojiazul le hubiera gustado poder darle un mejor vistazo a esas fotografías, le daba curiosidad, pero al parecer eso no iba a ser posible ya que Harry lo seguía jalando con suavidad.

Ambos llegan al gimnasio y notan que este estaba repleto, las luces parpadeantes daban una buena iluminación y todos parecían disfrutar del ambiente.

Louis mira de reojo a Harry y antes de que pudiera preguntarle si estaba bien, este vuelve a jalarlo hasta la pista de baile.

Eso sería un problema, porque Louis no sabía bailar.

Bueno, no en serio.

No.

—Harry, no sé bailar, no puedo— el ojiverde sonríe y parece ser una persona nueva, toma las manos de Louis y las pone en su cintura, en cambio el pone sus manos sobre los hombros del ojiazul.

—Sólo mírame— Louis asiente y Harry también lo hace, el rizado comienza a balancearse en su lugar y dicho movimiento hacia mover a el castaño.

El ojiazul no podía apartar la mirada de Harry, aúnque lo intentara.

Se sentía tan embelesado por lo bello que se veía que no necesitaba mirar nada más.

El ojiverde se apega un poco más al cuerpo de Louis y se inclina lo suficiente para dejar un cálido y casto beso sobre los delgados labios del mayor.

Antes de que Louis pudiera decir algo, la música se cambia a una más movida y Harry se separa de su cuerpo.

Louis ríe cuando lo ve moverse tan feliz, a veces elevaba sus brazos y cerraba sus ojos disfrutando el momento.

Era un momento perfecto para poder grabarlo, pero había dejado su celular en dónde se estaban quedando y realmente era mejor guardar ese único momento en su memoria.

Y en su corazón.

Harry se vuelve a pegar a su cuerpo y contagia a Louis con su energía, a el ojiazul deja de importarle si hacia el ridículo o no y comienza a bailar de la misma forma que lo había hecho en el muelle.

La risa de ambos era opacada por la música y era mejor de esa forma porque si no probablemente estarían haciendo un escándalo.

El ojiazul aferra sus manos en la espalda baja de Harry y este se tira para atrás en un especie de cambré a medias.

Cuando el ojiverde vuelve a estar totalmente de pie, sus cabellos rebotan sobre su frente y Louis los aparta con la punta de sus dedos, ambos se mantienen en silencio.

De a poco la sonrisa abandona las facciones de Harry y se queda totalmente concentrado en las pequeñas caricias que el ojiazul le había dado a su frente.

Ambos dejan de escuchar la fuerte música en su alrededor y no se sienten tan agitados y sofocados por el ambiente en dónde estaban.

Louis mira los preciosos ojos verdes de Harry, los cuales estaban llenos de vida, observa sus mejillas rojas y la humedad en sus labios.

Baja su mano al mentón del ojiverde e inclina su rostro para poder besarlo, necesitaba besarlo.

Harry inmediatamente va en busca de los labios de Louis, cuando estos se juntan se siente como una explosión, se siente exactamente igual que la primera vez.

Ambos se sienten tan bien en ese momento y cualquier inseguridad de Harry antes de entrar a ese lugar, desaparece.

Probablemente habían calmado a sus furiosas almas y ni siquiera se habían dado cuenta de eso.

Porque ese Harry y ese Louis, jamás pudieron asistir a la fiesta de graduación ya que se encontraban armando sus maletas en sus respectivos hogares.

Porque ese Harry y ese Louis, jamás se besaron en público, jamás se besaron en el gimnasio de esa escuela con el temor de que alguién le dijera al padre de ese ojiazul.

Lograron cumplir lo que ellos no pudieron.

Y sus almas estaban agradecidas por eso, lograron uno de los tantos deseos de sus antiguos yo.

Harry se separa de Louis estando sin aliento y apoya su frente contra la de este.

El ojiazul se mantiene en silencio y aferra sus brazos alrededor de Harry, necesitaba mantenerlo cerca, necesitaba sentirlo cerca, porque de pronto había sentido que en cualquier momento lo podía perder y no quería hacerlo.

Lost Soul |Larry Stylinson| [4]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora