Capítulo 14.

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—Louis, esto sí que no lo sé hacer, me caeré— Harry mira como Louis termina de pagar por las tablas y le pasa una a el ojiverde, este traga en seco y mira hacia afuera.

Habían muchísimas personas deslizándose por la nieve y haciendo trucos, Harry jamás en su vida lo había hecho.

—Estarás bien— Louis toma bien la tabla entre sus brazos y abre la puerta del lugar para poder salir, sus pies se entierran un poco en la nieve y camina esperando que Harry lo siguiera.

Quizás era un poco extremo lo que estaban a punto de hacer, pero quería que Harry tuviera nuevas experiencas, quería cambiar sus recuerdos pasados por unos nuevos y felices.

Harry se dedicaba a aferrar bien sus manos en la tabla de snowboard, el sonido de la nieve hundiéndose bajo sus pies sonaba con fuerza en su cabeza y alza la mirada hacia la montaña para poder centrarse en otra cosa.

Un vago recuerdo pasa por su mente y se ve a sí mismo deslizándose por el lugar, ve como cae al vacío y se golpea en la cabeza.

Frena en seco y deja caer la tabla, quita uno de sus guantes y lleva una de sus manos a su nuca, tantea el lugar en busca de una cicatriz, pero no había nada.

Frunce su ceño ante eso y sacude su cabeza, era imposible, jamás en su vida había hecho snowboard antes, jamás pudo tener un accidente, vuelve a poner el guante en su lugar y otra vez toma la tabla.

Louis ya había agarrado ventaja caminando, así que intenta correr y se le hizo imposible, otro recuerdo pasa por su mente.

Otra persona había tomado su mano e intentaban correr por la nieve, sus risas resonaban en el lugar porque realmente no avanzaban nada.

El ojiverde vuelve a sacudir su cabeza, no estaba entendiendo nada.

Louis se mantiene paciente esperando a que Harry terminara de subir, en ese tiempo se permitió a mirar a los demás turistas para aprender como moverse sobre la tabla.

—Estoy muriendo— el ojiazul ve como Harry se sienta sobre la tabla para poder tomar un respiro.

—Debemos aprovechar que tu cuerpo entró en calor, vamos— el castaño cierra los seguros en sus pies y acomoda las gafas de ventisca sobre sus ojos.

Harry se levanta como puede e imita al ojiazul, cuando siente el sonido de los seguros, el sonido se repite una y otra vez en su cabeza.

Harry se acomoda las gafas junto a su cubre bocas y antes de que Louis pudiera explicarle como avanzar, el ojiverde pega un salto hacia adelante y desciende como si lo hubiera hecho toda su vida.

Louis se queda quieto en su lugar por un momento, pero luego lo imita, sube su cubre bocas e inclina su cuerpo hacia adelante para intentar alcanzarlo, pierde la respiración cuando ve a Harry hacer un par de acrobacias simples.

¿No se suponía que no sabía absolutamente nada sobre snowboarding?

Harry frenaba de vez en cuando dándole el tiempo suficiente a Louis para alcanzarlo, el ojiazul aprovecha ese momento para acercarse lo suficiente.

El ojiverde voltea un poco su cabeza para verlo y ríe con suavidad, se cambia de vía y el ojiazul lo sigue.

Finalmente se había vuelto una carrera y cuando Louis lo sobrepasa, Harry sin querar golpea la tabla del castaño con la suya.

Ambos se desvían y caen en el bosque.

Louis frena en seco y Harry cae sobre él.

—Oh Dios, lo siento tanto— el ojiverde rápidamente quita sus gafas y baja su cubre bocas, Louis no le cree nada porque su sonrisa lo estaba delatando.

—¿Dónde aprendiste a hacer todo eso? ¿me mentiste?— Harry niega con su cabeza.

—Nunca en mi vida había hecho este deporte, sólo... Lo hice, se sintió como volver a mi lugar correcto, mi cuerpo se  coordinó y mi- —Harry niega con su cabeza, no nombraría a su alma, porque sentía que esta estaba perdida junto a él, él también estaba perdido.

—Tu alma reconoció el lugar— Louis finaliza por él y Harry lo mira confundido, ¿cómo lo sabía?

—¿Cómo?

—Me sentí igual, como si ya hubiera estado antes aquí, pero realmente nunca he venido— Harry suelta un suspiro y asiente con lentitud, todo se había vuelto tan extraño.

Para Louis no le era difícil entender, sabía lo que estaba ocurriendo, en alguna vida pasada había estado en este lugar y su conexión con el entorno fué tan fuerte que por eso se volvió un lugar importante.

Su alma reconocía este lugar.

Harry mira su entorno y lo único que ve es nieve y arboles enterrados por el exceso de esta.

—Cuando estaba subiendo, un recuerdo pasó por mi mente y no lo sé, ví como me golpeé la cabeza al bajar por esa montaña— Louis mira hacia donde Harry estaba apuntando y el nombre de esa gran montaña estaba en la punta de su lengua— Matterhorn.

—Matterhorn... — repite con suavidad el castaño.

—Siento que te conozco desde antes.

Quizás sea así.


Lost Soul |Larry Stylinson| [4]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora