Lost Soul |Larry Stylinson| [4]

Capítulo 15.

—No le tienes miedo a las alturas ¿cierto?— Harry mira el teleférico frente a él y niega con su cabeza.

Todos esos días habían estado haciendo actividades diferentes y a pesar de que sentía su cuerpo tan cansado, su mente no lo estaba.

Le reconfortaba saber que estaba junto a Louis, el chico se había vuelto tan importante en su vida, lo había sacado de su oscuridad y le había mostrado la luz.

Harry estaba valorando los días soleados, el sonido de los pájaros, disfrutaba cada segundo de su vida y todo eso ocurrió cuando conoció a Louis, su corazón había vuelto a latir o bueno, había encontrado un motivo para seguir latiendo.

El castaño había entrado a su vida y al parecer era para quedarse, ¿lo mejor? Lo hacia porque quería, Louis quiso quedarse.

—No, la verdad estoy emocionado por subir— Louis ríe ante eso y es él el que siente temor luego de un par de minutos.

El teleférico se balanceaba un poco cuando avanzaba, cualquier rastro de miedo desapareció ante la vista que ambos estaban teniendo.

Louis apoya una de sus manos sobre el vidrio, el día estaba precioso y la compañía era maravillosa.

—Ahora que estás aquí, no puedo imaginarme este momento sin tí— confiesa con suavidad el ojiazul y el corazón de Harry late rápido ante eso.

—¿Lo dices en serio?— Louis aparta la mirada de la impresionante vista y voltea a mirar a Harry, asiente con lentitud y una sonrisa se forma en los labios del ojiverde— gracias.

—¿Por qué agradeces?— Harry se encoge de hombros y Louis se preocupa cuando ve como sus ojos se cristalizan— hey...

—Por quedarte, por aceptarme después de todo lo que te conté sobre mi, gracias— el ojiazul suelta un suspiro y se acerca para abrazar a Harry, necesitaba hacerlo, su corazón se apretaba al verlo tan vulnerable.

—Te ofrecería una tasa de té para calmarte, pero lo único que te puedo ofrecer ahora es esta maravillosa vista— Harry posa sus ojos hacia donde apuntaba Louis y a pesar de que el lugar era impresionante, prefería mil veces admirar al chico frente a él.

—Prefiero mirarte a ti— las palabras se escapan de sus labios sin haberlas pensado y Louis suelta un jadeo ante eso.

—¿Qué acabas de decir?— Harry entra en pánico y rápidamente aparta la mirada, miérda.

—Y-yo uhm... — Louis muerde su labio inferior, ocultando su sonrisa, se le hacia adorable cuando Harry tartamudeaba.

El ojiazul pone su mano derecha sobre uno de los hombros de Harry y se acerca a él, invadiendo su espacio personal.

Harry vuelve a mirar a Louis cuando siente su respiración cerca de su cuello, la curiosidad lo había invadido y no se iba a perder la oportunidad de ver de cerca al ojiazul.

—¿Harry?— el ojiverde tararea indicándole a Louis que lo estaba escuchando— ¿puedo besarte?

Louis siente como Harry se tensa y traga en seco ante eso, se separa de él y estaba dispuesto a pedirle una disculpa, pero se ve interrumpido cuando este se acerca a el y toma su rostro entre sus manos.

Lo único que siente son los cálidos labios de Harry sobre los suyos, su estómago se apreta y siente su corazón en la garganta.

Cierra sus ojos y rodea con sus brazos los hombros del ojiverde, entreabre sus labios para corresponder el beso y Harry pone una de sus manos en su espalda baja.

Louis se siente morir cuando Harry lo apega a su cuerpo, la sensación de sentir el corazón acelerado del rizado contra el suyo es indescriptible.

Harry mueve sus labios con lentitud y ternura, Louis se sentía un poco torpe al principio, pero no podían culparlo, estaba ansioso.

El ojiverde finalmente rompe el beso, jalando con suavidad el labio inferior del ojiazul.

Louis pudo confirmar que Harry besaba muy bien.

—No sabes como estuve esperando poder hacer esto— el aliento de Harry golpea contra su boca y Louis siente ganas de besarlo otra vez.

—Miérda, debiste hacerlo antes— el ojiverde ríe ante eso y deja un pequeño beso sobre la comisura de los labios de Louis— creo que debemos parar, pagamos para tener la mejor vista de Zermatt.

—Tengo la mejor vista frente a mí— Harry sonríe orgulloso ante lo que acababa de decir y acaricia con suavidad la espalda de Louis, apoya su frente contra la del ojiazul y cierra sus ojos.

Louis respira el característico perfume de Harry y se queda grabado en su mente.

Amaba ese perfume solamente porque lo usaba Harry y estaba seguro que si lo sentía en otra persona, sólo podría recordar a Harry.

—Eres adorable, jodidamente adorable— Louis asiente inconscientemente, le gustaba esa nueva faceta de Harry.

Le gustaba verlo tan seguro, le gustaba verlo sonreír, le gustaba verlo sin temor y todo eso lo había logrado en tres días.

Harry era una estrella que se había apagado, pero ahora estaba volviendo a recuperar su brillo, su luz.

Y era tan brillante que parecía ser el mismísimo sol.