Lost Soul |Larry Stylinson| [4]

Capítulo 20.

—¿Malibú?— Harry levanta sus lentes de sol y los pone sobre sus cabellos rizados, mira a su alrededor con adoración y se permite disfrutar del viento húmedo y fresco.

La brisa marina era sensacional.

—Es genial— Louis termina de bajar su última maleta del maletero del taxi y cierra esta, Harry toma sus maletas y mira el lugar frente a él.

Era una pequeña cabaña bastante rústica, definitivamente le gustaba un montón.

Una amplia sonrisa se forma en los labios del ojiverde y avanza hasta la puerta de madera, intenta mirar a través de ella y Louis ríe al verlo husmear como un niño pequeño.

El ojiazul carraspea fuertemente y le muestra las llaves a Harry, demostrándole de cierta forma el poder que tenía ya que él las tenía.

El rizado rueda sus ojos y se hace a un lado para que el castaño pudiera abrir de una vez por todas la puerta.

Harry ya quería comenzar a ordenar todo para poder ir a la playa de una buena vez.

A Louis no le gustaba mucho la idea de ir a la playa, así que probablemente ese era el motivo por el cual estaba siendo tan lento.

—Vamos Louis, ¿qué esperas?— Harry hace un gesto con su cabeza hacia la puerta y Louis muerde su labio inferior.

Ya sin dudarlo abre esta y Harry alza sus manos hacia al cielo como si estuviera agradeciendo.

Ambos entran al lugar y se dejan invadir por lo fresco que era, dejan sus maletas a un costado y se permiten recorrer el lugar.

Louis ya sabía que luego tendría que ir a la playa.

Le gustara o no.

|🧭🧭🧭|

Harry camina por la playa con Louis a su lado, estaban buscando algún lugar que les acomodara.

Finalmente el ojiverde apunta hacia una zona y ambos asienten estando de acuerdo.

Louis estira la manta que había llevado y se dejan caer sobre ella, el ojiverde mira a su alrededor admirando el lugar y sus ojos se topan con una cabaña.

—¿Esa es una... ?— pregunta en voz alta para el ojiazul y Louis mira hacia donde estaba mirando Harry.

—Sí, es una cabaña de salvavidas.

Harry mantiene su mirada sobre ella, se le hacia tan conocida.

Sacude su cabeza y pone su mirada sobre el mar, frunce su ceño y decide ponerse sus lentes de sol y estirarse por completo sobre la manta.

Cierra sus ojos y se permite disfrutar del cálido sol.

Se ve a sí mismo corriendo por la arena, se ve a sí mismo manejando una moto de agua y también se ve usando bañadores rojos.

¿Sabría manejar una moto de agua?

No podía quedarse con la duda.

Se incorpora otra vez y Louis lo mira confundido.

—¿Por qué estás inquieto?— Harry voltea para mirarlo y suelta un suspiro.

—No lo sé, tengo ganas de hacer muchísimas cosas— confiesa con suavidad y Louis alza una de sus cejas al escucharlo.

—¿Qué tienes ganas de hacer?

—Primero esto— Harry se inclina hacia Louis y este se queda quieto en su lugar, amaba los besos de Harry, no podían culparlo.

El ojiverde junta sus labios con los del ojiazul y ambos ríen con sus lentes de sol chocan entre sí.

—Somos un par de idiotas— susurra Louis cerca de los labios de Harry y este asiente estando de acuerdo, claro que eran un par de idiotas.

—¿Confías en mí?— Louis lame sus labios ante la pregunta y quita sus lentes de sol, era un momento importante.

Harry también lo hace y ambos se miran fijamente a los ojos.

Louis vuelve a reproducir la pregunta en su cabeza, era increíble el hecho de que Harry le preguntara si confiara en él porque siendo sinceros Louis tampoco se había hecho esa pregunta a sí mismo.

No había mucho que pensar, claro aue confiaba en él.

—Sí, lo hago.

Harry muerde su labio inferior ante eso y vuelve a inclinarse otra vez hacia Louis, deja un casto beso sobre sus labios y el ojiazul gruñe con suavidad porque el contacto duró muy poco tiempo.

—Entonces ven, sígueme— Harry se levanta y Louis le sigue, el ojiverde toma la mano del ojiazul y trotan sobre la arena.

Louis estaba demasiado confundido, pero todo comienza a tomar sentido cuando Harry arrienda una moto de agua.

—No me dijiste que sabías manejar una— murmura el castaño yendo hacia la moto que había arrendado el rizado

—Es que no sé hacerlo— Louis deja de moverse y lo mira de forma inquietante— dijiste que confiabas en mí.

—Y lo hago, pero me da terror...— Harry se mantiene en silencio y se sube sobre el vehículo acuático, lo prende sin ningún problema y mira por sobre su hombro a Louis.

—¿Estás seguro que no quieres venir?

Louis se queda callado por unos segundos y luego se encoge de hombros.

Sin decir nada se sube en la parte de atrás de la moto y pasa sus brazos por el abdomen de Harry.

No puede evitar asustarse un poco cuando el rizado comienza a introducirse en el mar.

Para no saber manejar sabía hacerlo bastante bien.

Harry tenía muchas habilidades y eso lo impresionaba de sobremanera.

Sin dudas era toda una caja de pandora.