Amor de Hermanos

11. Luna

              3 Años Antes

     —Basta Marie —Dije riéndome, ella corría detrás de mí

—¿Por qué eres tan floja Julieta? —Ella comenzó a reírse y yo le golpeé el brazo.

—ESPEREN —Gritó una voz, reconocí inmediatamente a Luna.

—Lunita, al fin llegas —Le sonreí y ella me devolvió la sonrisa. Ella es mi mejor amiga, la chica más inteligente de la secundaria.

—Casi se iban sin mi, son unas chicas malas —Dijo ella con su voz inocente.

—¿Vamos al bar esta noche? —Preguntó Marie como toda mala influencia.

—Sabes que no me gusta esto Marie, tenemos catorce años, no está bien que vayamos a bares —Le contestó molesta Luna.

—Habla por ti, yo casi tengo diesiseis años —Se río ella, digamos que Marie es bastante presumida. Pero al contrario de hacerla quedar mal, es todo lo contrario. Lo mejor de ella es su manera de presumir.

—No me importa, no me dejaré mal influenciar por ustedes —Y dicho eso, se fue molesta. Luna es una niña bien, es muy difícil hacerla romper reglas.

—¿Tú vienes Juli? —Me preguntó sonriendo, ella sabe que no puedo decirle que no a una buena farra.

—Claro, no se que le diré a mi madre esta ves pero... algo se me ocurrirá —Le devolví la sonrisa, amo estar con ella. Es mi mejor amiga, aparte de Antonella claro.

No sé cómo logré mentirle a mamá y que se la creyera. Tal vez el hecho de que no está acá, ayuda mucho a la hora de meterle. Siempre le miento y nunca lo nota, tengo catorce años y ni siquiera me cuida.

Al final logramos convencer a Luna y todas juntas vamos en un taxi a la fiesta. Tal vez les parezca raro que tres menores de edad, estén saliendo a un baile.

Acá no es algo raro, desde los catorce años te dejan entrar a fiestas. Mi madre no me lo permite, pero yo siempre logró salir de todas maneras. Igual ella está lejos y no le importo tanto, así que no pasa nada.

Estoy feliz de poder estar con amigas, Luna es un poco rígida pero siempre logramos convencerla y Marie es la mayor, siempre nos cuida y se ocupa de que podamos entrar y salir sin problemas.

El lugar al que fuimos a bailar pertenecía al tío de Marie, por eso nos dejaban entrar sin problemas. En realidad pocos lugares aceptan menores, pero en este lugar es bastante común.

Luna estaba absorta en sus pensamientos, metida en su celular. Marie también estaba metida en su celular, sacando fotos y subiéndolas a Instagram, probaba variados filtros e incluso reía a carcajadas.

¿Qué estaba haciendo yo?

Yo estaba mirando a mi alrededor, necesitaba algo conque distraerme. A mi celular se le había agotado la pila y estás dos chicas estaban sumidas en sus vidas personales.

—¿Estas aburrida? —Preguntó Marie mientras guardaba su celular.

—Un poco —Ella se río y yo la imite.

—Perdona, necesitaba renovar mis publicaciones. Creerán que soy una tonta que vive encerrada, tengo que mantener mi reputación —Dijo sonriendo de lado, mientras cruzaba sus piernas luciendo su vestido corto.

Marie es una chica coqueta y muy guapa, una Influencer con más de tres mil seguidores. Siempre hace contendió en diversas apps, pero su favorita siempre fue Instagram.

—Mi amiga la Influencer no puede quedarse quieta —Le sonreí y ella largo una carcajada. Es tan fácil estar con ella, es muy amable.

—Mi amiga la aburrida no puede dormirse temprano —Me contestó, algo gracioso porque salgo con ella siempre.