"Secuestrada"

Recuerdos

POV. Jimin

- Gordo - decía aquel niño que me molestaba.

- Monstruo - eran sus frases favoritas.

- Feo - nunca las deje de escuchar.

- Asesino - pero no era el único que hablaba.

- Loco - repetían las voces de mi cabeza.

- Loco - una.

- Mátalos - y otra.

- Matate - y otra.

- Hazlo - y otra.

- Cobarde - y otra ves.

- ¡Ya déjenme! - grite a las voces de mi cabeza que no me dejan. Que me atormentan. Ya tengo suficiente con aquellos niños que me molestan.- Ya porfavor - supliqué. Ya no quiero escucharlas ni a ellas ni a ellos. Ya no.

-¿Por qué? Si eres nuestra mascota - contestó el niño.

- ¡Yo no soy mascota de nadie! - hablaba con ellos y con las voces. Jamás había permitido que supieran lo que tengo. Pero ya me vez. Ya sabes lo que padezco y ya no puedo ocultaro más. Ni mis recuerdos ni mi padecimiento. Eres afortunado de saber que escucho y pienso y recuerdo, el cuál solo lo conocían los doctores.

-Crees que un pobre como tú podría ser algo más. - volvió a decir el niño.

-Solo mírate, das asco.-dijo otro.

- ¡No es cierto! - ya no quiero escucharlos más. Ya no.

-Jimin no te mientas. ¿Qué nunca te has visto en un espejo?- volvió a decir.

-Espera si eres pobre no conoces que es un espejo.- dijo otro.

-Tú dame el espejo que tienes.- dijo otro arrebatando el espejo de la niña que estaba con ellos.

-¡Ten!- dijo.

-Mira estúpido este es un espejo - volvió a decir.

- ¡¿Y eso qué?! - grite tratando de defenderme.

-Mirate, ve realmente lo que eres- tomó mi cabeza con fuerza para que pudiera verme en el espejo.

- ¡Déjame! - grite.

-Solo quiero ayudarte a ver que realmente eres.- dijo.

- ¡Yo no pedí tu ayuda! -

- Rin rin
Hora de entrar a clases. - se escucho y en ese momento desperté, otra vez esos malditos recuerdos.
La maldita preparatoria lo peor de mi vida. Malditos estupidos, se la pasaban molestandome toda la maldita escuela. Viví esa etapa entre burlas,críticas y más críticas y burlas. Pero si los vuelvo a ver los mataré lo juro. Ya no tengo miedo. Pero eso no importa ahora solo
mirenme soy hermoso, guapo, rico, amado y con la mujer más bella de este universo. Algo que dijeron que sería imposible.
Los odio. Maldita sea ¿por qué no puedo olvidarlo? ¿Por qué me sigue doliendo? ¿Por qué caen las lágrimas? ¡¿Por qué?!

- Pero nunca volverán, nunca más. No volverán hacerme daño. Nunca. - me repetía a mismo.
Ahora soy feliz con el amor de mi vida. La que siempre me ayudó y ha estado siempre para mí. Nunca la dejaré ir. Sin ella no soy nada. Solo soy la misma porquería de persona que en la preparatoria. Alguien que no vale nada. Una porquería que solo la utilizan cuando quieren. A la que pueden humillar, pisar, tratar como una basura sin sentido. Todo eso quedó en el pasado. T.N me mostró que es todo diferente, que no soy lo que decían. Que soy valioso. Diferente, alguien que merece ser amado. La amo tanto, tanto. Es la persona que más quiero en este mundo. Si ella me deja me mata, yo se que me ama, bueno no ha mostrado que me ama hasta el momento pero se que lo esconde muy bien. Pero nadie podrá evitar que nos amemos con locura. Nadie lo evitará, nadie. Matare a todos los que se opongan a nuestra felicidad. Lo juro.