Segunda Oportunidad

Capítulo 14

Seguimos hablando hasta que Sofía nos aviso que mi habitación estaba lista. Alma me prestó ropa para dormir, aunque me queda algo ajustada en especial la parte de mi trasero.

-Estúpido trasero grande, -me miro al espejo y hago una mueca, salgo del baño y miro la habitación.

Es parecida a la de Marcelo, solo que esta no tiene muebles, es una habitación blanca y fría. Es horrible estar aquí, necesito estar en mi casa con Eva. Maldición, me olvide de avisarle que me quedarme a dormir.

23:37 hs

Hola Eva, voy a quedarme a dormir, la madre de Marcelo no me deja volver por la hora.

23:38hs

¿Y ahora me avisas? Pensé que te había pasado algo estúpida.

23:38hs

Perdón, me olvide. Pero mañana temprano voy a ir.

23:39hs

Eso espero.
Contame cómo te fue ¿cómo es la señora?

23:39hs

Ella es muy amable, hasta me ama y eso que recién me conoce jajaja

23:50hs

Eso es bueno, aunque creo que estas exagerando.

23:50hs

Nada que ver, quien me conoce me ama.

23:50hs

Tampoco para tanto. Ahora contame más.

23:51hs

No fui la única invitada, también está Esteban.

23:52hs

Y qué hace él ahí?

23:52hs

Es novio de la hermana de Marcelo. Me sorprendí verlos a los dos, porque Marcelo me dijo que era hijo único.

23:53hs

No se llevan bien, clásico de hermanos cuando tienen problemas.
23:54hs

No, ellos toda la vida se llevaron mal o al menos eso dicen.

23:57hs

Bueno Ann, me voy a dormir. Mañana hablamos bien y me sigues contando. Cuídate.

23:58hs

Esta bien, hasta mañana Eva.

Me acuesto y miro el techo. No me siento cómoda, quiero irme de aquí, es incomodo estar en esta casa.

~~~

Doy vueltas y vueltas en la cama y no puedo dormir. Suspiro molesta y me levanto, no puedo seguir en esta casa, no lo aguanto más. Me pongo mi vestido y los zapatos los llevo en la mano, seguro voy a parecer una loca por caminar sola en la madrugada, pero no me importa. Salgo de la habitación sin hacer ruido, y bajo las escaleras con lentitud para no hacer ruido, cuando paso por la cocina veo una sombra y me asusto.

-¿A dónde vas a esta hora Ann? -los zapatos casi se me caen y puteo internamente.

-Maldición Esteban, casi me matas del susto. -Susurro.

-Jodete, ahora responde.

-Estoy por irme a casa, no me siento cómoda aquí.

-¿Por qué? ¿Por Marcelo, por Dylan?
-Por ambos, todo es... Sólo quiero irme de aquí.