CAPITULO 10

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“EL LEÓN Y LA OVEJA”. NARRA VIOLET:

Luego del desayuno volví a casa, Ben no me pudo acompañar porque debía ir a trabajar… aunque, no creo que sea por eso.

-¡CHICA!-oigo una voz masculina.

-¿Qué?-pregunto dándome la vuelta. En ese momento me doy cuenta, eran los hombres que nos atacaron con Ben. ¿Qué rayos querían ahora?

-No está tu noviecito contigo…-ríen.

-No, tuvo que volver al trabajo.

-¿Trabajo?-rien.-¿Benjamín Brook? ¿Trabajar? Es lo más cómico que escuché en mi vida.

Uno de los hombres me sorprende por detrás, estaba acorralada. Otro de ellos me empuja contra la pared.

-Suéltenme.-grito.-¡SUELTENME O LLAMO A LA POLICIA!

-Nadie te escuchará querida.-contesta el más grande.

-¡Qué lástima que no esté tu principito al rescate!-comenta con sarcasmo otro de ellos. -Ya no van a poder vivir su feliz historia de amor juntos…¡LÁSTIMA!-me golpea. -¡AUXILIO!-grito, me golpean.

-Vuelves a gritar y tendrás menos minutos de vida.-me gritan. Me sentía acorralada, no sabía que hacer, me largué a llorar.

-Pobrecita, cree que le vamos a tener lástima.-comentan.

-Suéltenme por favor-ruego llorando.

-No.

-¿Por qué se meten conmigo?-pregunto.

-Porque dañando el tesoro de Benjamín lo dañaremos a él.-responden ¿Su tesoro?...¿Soy su tesoro? -Aunque estas buena, muy buena.-comenta  el mayor de ellos, que no debe pasar los 30. -Aprovechemos tenerla. De repente veo la luz de un auto alumbrándonos…¡ERA EL AUTO DE LOS CHICOS!

-¡Suéltenla!-grita Ben bajando del auto.

-¿Brook? Oh, chicos corran, que nos puede hacer daño.-comentan burlándose. Ben golpea al mayor, luego dos de ellos lo agarraron y lo tiraron al piso, tres de ellos intentaron llevarme, Ben empujó a unos de ellos y a los otros dos golpeó. Después, entre los seis lo agarraron, Ben se desquitó con cinco dejándolos en el piso, me agarró del brazo y me subió al auto. El mayor de ellos nos siguió cuatro cuadras.

-¿Estas bien?

-Sí.-contesto llorando.

-Descuida princesa, todo es culpa mía, sabía que no debía dejarte sola.

-Ben.

-¡si? -¿Quiénes eran?-pregunto-¿Qué querían?

-Son personas que sólo disfrutan lastimando a otros.

-Ben.-hago una pausa.-la verdad, por favor.

-Está bien.-suspira-al jefe de esos hombres le debíamos dinero… ya se lo pagamos, por eso, no sé por qué te atacaron.

-¿Dinero de que?-pregunto.

-él una vez nos los prestó para solucionar unos problemas, en esa época aún no trabajábamos, por eso lo necesitábamos.

-¿Cómo me encontraste?

-él nos prometió no hacerles daño, pero yo no estaba tan seguro, así que decidí ir a buscarte, escuché los gritos y me imaginé que eras tú.

-Ben.

-¿Si?

-Te amo.

-Yo también.-me besa. **********************************************************  

Al llegar a casa Ben va por el botiquín de primeros auxilios. Es un caballero.

-Perdón.-dice.

-¿Por qué?-pregunto.

-Por enamorarme de vos.El león se enamoró de la oveja.-comenta.-El morboso y masoquista león.

-Y la estúpida oveja del león.-sonrío. Ben se acerca y casi tocando mis labios pronuncia esas palabras que para mí no tenían ningún significando, hasta que la oí salir de su boca.

-Te amo, y juro que este amor es para siempre.

-Para siempre no existe.

-En mi mundo sí.

-¿Cuál es tu mundo?

-Tú.-responde y me besa.

-¿Con todas eres así?

-No, tuve varias novias y nunca sentí nada similar a lo que siento por ti.

-No te vas a poner a hablarme de tus ex, ¿cierto?

-Sólo si tú no me hablas de los tuyos.

-Me parece bien.-sonrío.

-¿Me puedo quedar a dormir contigo?-hace una pausa-digo,  para asegurarme de que estés a salvo

-Descuida, lo estaré.

-¿Segura?

-Sí.-sonrío.

Una Apuesta de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora