- Narra Vanesa - .
Esta vez el reloj fue bueno y pasó bastante rápido, entre las charlas con mi familia y los juegos con los perros no me di cuenta y ya estaba en la estación esperando a Mónica,
Llegaría en el tren de las 12:30, en casa dejé lista la comida y me traje a Luna, sabía que la había echado mucho de menos.
_ Martín, ya llegué. Voy a la fila de los taxis te aviso cuando esté en camino.
- Me dijo en un mensaje -
_ ¡Al fiiiiin! Aquí te espero
- ¿De verdad creía que no la vendría a buscar? Estaba estacionada justo frente a los taxis -
Llamada.
V: Hola, guapa.
M: Hola, Vane. Tengo un montón de personas por delante
V: Lo sé.
M: ¿Cómo que lo sabes?
V: Sabiéndolo y esa camiseta me encanta, creo que te la voy a robar. - Empezó a mirar hacia todos lados con una sonrisa enorme -
M: ¿Viniste por mí? ¿Dónde estás?
V: ¿Tu qué crees? Búscame.
- Vi cómo se salía de la fila y seguía buscando, estaba en el coche de mi hermano así que le sería un poco más difícil, abrí la ventanilla y luna empezó a ladrar cuando la asomé para que la viera, lo que hizo que nos encontrará muy fácilmente, miró rápidamente a los lados y corrió hasta el coche.
_ Mis chicas favoritas - Gritó al subirse, luego de darle atención a Luna que estaba como loca se acercó abrazarme -
_ Gracias por venir, que alegría verlas.
_ Admítelo estás más feliz de ver a la perra que a mí.
_ Evidentemente, vine solo por ella ¿Lo recuerdas?
- Salimos del parking y en el primer semáforo se acercó y me dio un beso que me dejó atontada, hasta que no escuché la bocina del coche de atrás no reaccioné.
_ Quería dejar muy en claro que solo vine por mi Luni.
- Sonreí como tonta y negué con la cabeza -
_ Que tal el fin de semana y el viaje.
_ El finde tranquilo, nada fuera de lo ordinario, el sábado al llegar empecé la maleta y anoche la acabé, en cuanto colgamos la llamada me dormí así que descansé lo suficiente. En el viaje aproveché para responder unos correos que tenía pendientes sobre el libro.
_ ¿Cómo vas con eso?
_ Ya tengo título - Dijo mientras se tapaba la cara - y el mismo me llevó a la organización de los microcuentos, eso me estaba volviendo loca. Ya mi editora lo aprobó así que en cualquier momento me empiezan a enseñar ideas para la portada.
_ ¡Qué maravilla escritora! ¿Ya te he dicho que estoy muy orgullosa de ti?
_ No, y mejor que no empieces ahorita porque con lo sensible que estoy me voy a largar a llorar.
- La mire y vi que realmente estaba emocionada, verifiqué que no venían coches muy cerca y detuve la marcha un momento.
_ ¿Qué tienes? ¿Por qué estás tan sensible?
_ Nada, nada tranquila, sólo estoy en un momento especial tanto profesional como personal y eso me emociona un montón, de verdad no me pasa nada. - Se acercó y me dio un beso - Vamos.
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Entre acordes
FanfictionNuestra manera de soñar, desear e imaginar Vanica... 😍😍 "Puerto y luz"