✨🍵 Uzui Tengen 🍵✨

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✨🍵GreenTeaBubble🍵✨

En la sociedad actual, la civilización como tal se encuentra dividida, eso no era una novedad para nadie, sin embargo, la división de clases sociales no es la única que se encuentra presente en el mundo; existe una jerarquía basada en la fuerza, el aspecto y la pureza de la sangre, siendo así representada en forma de pirámide, en la cúspide se encuentran los alfa; grandes por naturaleza, fuertes y de gran carácter; en el segundo escalón de la pirámide se encuentran los omegas, generalmente son considerados débiles y pequeños (por supuesto que hay excepciones para este estereotipo), por debajo de estos están los betas, estos se encuentran en un punto casi nulo de la sociedad, de hecho, el porcentaje de betas en la actualidad es mucho menor que el de alfas y omegas y en asuntos reproductivos únicamente pueden procrear con otros betas. Los últimos escalones se los llevan los deltas y gammas, representados por menos del 2% de la población.

Existen prejuicios acerca de esta jerarquía, principalmente basados en la relación que deben tener los alfas con los omegas y los betas, de hecho es mal visto que los betas salgan con omegas y que algunos alfas no emparejen con los omegas, este mismo era el caso de Uzui Tengen, un joven de 23 años de edad proveniente de una familia con poder social, esto se debía a que su clase social indudablemente se lo permitía, Tengen trabajaba desde que tenía memoria (en la empresa de su familia) a pesar de no tener la necesidad, siempre se consideró independiente como para llevar las riendas de su vida desde muy temprana edad, con sus esfuerzos pagó su carrera y logró obtener el título de cirujano estético, uno de los mejores de la ciudad, su familia se consideraba memorable: todos habían nacido siendo alfas, esto era el orgullo de su padre quién no tarda en hacerle saber a los demás su satisfacción al respecto, el problema recaía en que a Uzui le atraían únicamente las mujeres betas, su padre era uno de esos tipos extremistas que consideraban que alfas únicamente podrían estar bien con un omega y los betas solo con otro beta, a pesar de que Uzui se independizó a los 18 años yéndose de casa a pagar un departamento considerablemente lejos de la residencia de su familia, su padre no paraba con el tema de contraer matrimonio de manera apresurada...

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- ¿Y bien? ¿¡Qué demonios piensas hacer!? Musitaba un hombre de avanzada edad al otro lado de la línea con un notorio enojo

- ¿Respecto a qué? _Decía sin interés un albino de ojos rojizos que sujetaba el celular chocándolo con su oreja y su hombro mientras con una mano buscaba en cada bolsa de su blanca bata las llaves de su locker, y en su otra mano sujetaba varias carpetas con papeles de sus futuros pacientes.

- ¿¡Cómo que de qué!? Tengen, te hablaré claro, hoy cumples 23 años, ¡VEINTITRÉS! _Esto último lo había dicho despacio y con un tono elevado, como si de explicarle a un niño las tablas de multiplicar se tratara, Tengen ante esta obvia aclaración rodó los ojos mientras soltaba un largo suspiro

- Lo sé, ¿y qué? ¿piensas darme un gran regalo o algo así? _Reprochó con una voz infantil, él sí que tenía claro cómo hacer enojar a su padre.

- ¡No puedo creer que tengas el descaro de decir eso, el que debería pedirte algo soy yo, no tú! Tengen, hijo mío escucha, se te va el tren, tienes 23 años y no estás comprometido, ni siquiera en una relación formal, lo único que este pobre anciano quiere para tí es que dejes dignos herederos, si fuera posible para tí que sean varones es mucho mejor, emparéjate con una omega de clase alta, tengo muchos amigos que tienen hijas bellas y además puedes asegurar unos cuentos millones a nuestra compañía, ¿qué dices? puedes ayudar a tu padre y a tu futuro siendo consciente de tu error, aún no es demasiado tarde.

La última parte del discurso de su padre había salido algo melancólica, de verdad sus palabras ya no eran a modo de regaño, sino a modo de súplica, su padre sabía muy bien cómo manipular a sus hijos, sin embargo, Uzui era ese tipo de persona que aseguraba hacer algo solo porque no le molestaran con el tema y al final resultaba rompiendo su promesa.

- Padre, escucha, no tengo la intención de molestarte con ese tema, pero, viejo... dame un maldito respiro, es mi cumpleaños ¿no?, ya te dije no tengo la más mínima intención de formalizar, sin embargo, sé lo que me conviene así que no te preocupes, no soy un jodido niño al que tienen que arreglarle hasta la ropa que usa. _Ya estaba molesto, su padre había logrado sacarle de sus casillas incluso en un día especial para él.

- De acuerdo, solo no quiero que heches a perder tu vida, mira, yo me casé con tu madre por conveniencia y míranos, nos vemos muy felices y...

- Si ajá, padre, gracias por tu discurso pero sigo en el trabajo por si no te enteras, tengo cosas que hacer, así que o cortas tú o corto yo. _Estaba cansado, quería salir corriendo de ese lugar y llegar a su oficina, llevaba 10 putos minutos hablando/discutiendo con su padre de pie junto a los lockers sin siquiera haber podido guardar las jodidas carpetas que llevaba en la mano.

Después de lo dicho su padre se resignó a colgar el teléfono no sin antes soltar un largo suspiro que denotaba fastidio en su máximo esplendor.
Se dirigió a su oficina después de sonreír triunfal, sacar a su padre de las casillas lo hacía feliz en cierto modo, sin embargo, el tema del que siempre hablaban definitivamente era estresante para él; apenas llegó se sentó en su gran silla y reclinó la cabeza hacia atrás soltando un largo suspiro.

toc toc toc...
- Adelante. _Dijo desganado al escuchar el llamado a la puerta de su oficina.

- Oye guapo, ¿por qué tan triste? _La psicóloga Kocho tenía una forma particular de molestar a sus amigos, sí, sus halagos eran todos en broma, pero sin duda le sacan la risa a cualquiera.

Con esa sonrisa socarrona que siempre llevaba y el cuerpo pequeño pero bien equilibrado que tenía, más su afición por las mariposas la convertían en una de las bellezas del "Hospital Central de las Glicinias", sin duda alguna era una mujer hermosa... con un temible carácter, Uzui la consideraba muy atractiva, sin embargo, existía un problema... la hermosa chica era una alfa, pero eso no quitaba el hecho de que Tengen le coqueteaba en cuanto tenía la oportunidad, para él llevársela a la cama era un premio, sí, él era justo ese tipo de persona.

Rápidamente Tengen se reincorporó aproximándose a la psicóloga y con un rápido movimiento la arrinconó contra la pared de su oficina, quedando esta de espaldas al doctor.

- Hola preciosa, resulta que tuve unos problemitas, pero, ¿qué crees? tengo a una sexy psicóloga para que me dé terapia ahora mismo _Esto último lo dijo recorriendo las caderas de la joven hasta llegar a sus pechos, sin embargo, esta lo apartó rápidamente

- Sigue intentando, precioso, que no se te olvide que soy una alfa también, no puedes someterme como si fuera una omega ni coquetearme como si fuera una beta.

- Pfff, me rindo, me rindo... por ahora, entonces, ¿si no viniste a darme terapia sensorial ni oral, qué querías? _Dijo enarcando una ceja mientras se volvía a sentar algo decepcionado, era la sexta vez en ese mes que intentaba seducir a Kocho sin éxito.

- Sé que es tu cumpleaños, así que... le dije a los demás, todos hemos estado algo ocupados así que no pudimos planear algo extravagante como te gusta, pero aún así te queremos invitar a pasar un buen rato con nosotros, ya sabes, algo de licor y risas en un antro poco conocido de la zona.

- Me interesa, no tengo nada que hacer y además no quiero llegar a mí departamento a hacer absolutamente nada... o talvez deberías acompañarme a mí depa, ¿qué te parece? tú, yo, unos cuantos condones...

- Tengen, ya párale, jajaja, te esperamos todos juntos a las 8:00pm en la salida del hospital. No tardes, tonto. _La psicóloga se retiró no sin antes sacar la lengua al doctor que se hayaba decepcionado, ya iban 7 veces que era rechazado.

✨✨✨

- ¡Oye, Monitsu! vamos a una fiesta.
- ¿Para qué o qué?

Gracias por leer, bai bai. ✨🍵✨

¿Será que sí? ¿Será que no? [Uzui x Zenitsu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora