¿Será que sí? ¿Será que no? [Uzui x Zenitsu]

✨🍵 Rivalidad 🍵✨

GreenTeaBubble 🍵✨

El tiempo había pasado casi tan lento como las manecillas del reloj que al girar hacían eco en todos los pasillos de aquel departamento, y aún con la soledad, privacidad y tranquilidad a su favor le fue imposible lograr su cometido para abrir la puerta que lo separaba de lo único que había llamado su atención en aquel lugar.

Desolado, cansado y algo desanimado se recostó nuevamente en la puerta hasta que se deslizó para caer al suelo con algo de brusquedad, miró su "herramienta" que en realidad era un cuchillo, y observó nuevamente aquella habitación que tanto despertaba su curiosidad, rendido y algo insatisfecho lanzó el cuchillo varios metros lejos hasta que el eco del arma rebotando contra algo le hizo mantenerse alerta.

Con ojos bien abiertos y aún estando de cuclillas se acercó al epicentro del sonido solo para descubrir un cajón en la cocina que despertó nuevamente sus instintos, observó nuevamente aquel cuchillo y retirándolo de su camino se dispuso a abrirl solo para contemplar algo que instintivamente le hizo sonreír.

- ¡Chocolates! _exclamó con felicidad absoluta a la vez que separaba sus piernas y colocaba la bolsa justo en medio de ellas

Cualquiera que le mirara pensaría que se trataba de un niño encaprichado con las golosinas, sin embargo, esto poco le importaba si podía tener la mayor cantidad de dulces dentro de su boca.

Lamentablemente su felicidad no duró lo suficiente, pues era claro que al haber pasado 20 minutos de ingerir todo lo del paquete, le invadió la culpabilidad y aún encontrándose en el suelo eructó con una fuerza impropia de él a la vez que se levantaba con sorpresa; miró nuevamente el paquete completamente vacío y observó atentamente los envoltorios en el suelo que claramente eran las pruebas de su inocente crimen.

Con una mezcla aterradora de preocupación, pena y gula, se apresuró a ocultar todo lo que podía ser un indicador de su acto, ocultando los envoltorios vacíos bajo el colchón de su cama y procurando no dejar nada fuera de orden para que el albino no lo notara.

Una vez terminado se sintió satisfecho, pues, ¿quién podría descubrirle si no habían testigos? además de eso, no creía que notara el faltante de una bolsa cuando claramente dentro del cajón habían muchas más.

Sus pensamientos acerca de su propia inteligencia suprema le hicieron relajarse hasta que decidió marcharse a su habitación y tomar una siesta, no sin darse cuenta de que la presencia estratégica de cámaras que el albino instaló antes de dejarle en el departamento habían grabado y procesado todo su acto vandálico.

Por su parte, Tengen río con ternura y algo de pánico al observar el monitor de su computadora y darse cuenta de los inocentes actos que el chico realizaba en su ausencia, y aunque le pareciera sumamente tierno, no podía evitar sentir un escalofrío al observar cómo intentó fuertemente ingresar a aquel lugar tan privado para él.

Tragó grueso mientras cerraba sus ojos con fuerza al recordar lo que había sucedido en la noche anterior, y aún con las mejillas encendidas y el rostro acalorado trató de tranquilizarse hasta que fuera su turno de recibir a otro paciente que buscaba tener la nariz perfecta, aunque siendo sinceros, poco le importaba la revisión de su paciente si cada vez que le observaba recordaba lo perfecto que era su chico.

El paciente ingresó proporcionándole los datos correspondientes a la consulta, y al momento de proceder solo podía pensar en el rubio.

- "Quiero mi nariz respingada"

- Claro (la de Zenistu es respingada, pequeña y muy estética) _pensó

- "Quiero que sea perfecta"