16. Negro de misterio

283 77 2
                                    

— ¡Ya te dije que no sé dónde están! Si lo supiera se los diría y con eso esto acabaría y podría pedir mi pago por este trabajo—resopla Taehyung y Jungkook da un quejido frustrado—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¡Ya te dije que no sé dónde están! Si lo supiera se los diría y con eso esto acabaría y podría pedir mi pago por este trabajo—resopla Taehyung y Jungkook da un quejido frustrado—. Lo siento, de verdad. Sabes que tampoco soy tan importante. Tan solo soy el niño de los recados de turno para los ángeles. Hago lo que puedo con lo que tengo.

— ¿Qué es un niño de recados? —pregunta con expresión confundida y Taehyung se lleva una mano a la acara. A veces es sencillo olvidar que están en una luna muy, muy lejana de este planeta y no saben nada con respecto a expresiones.

—El punto de todo esto: Estoy investigando donde pueden estar esas plumas. Dudo que anden sueltas por una simple razón y es que ya deberían haber aparecido—Jungkook ladea la cabeza—. Suelen tener cierto magnetismo entre sí mismas. Cuando hay demasiadas juntas, se acercan. Sea viento, agua, tierra o incluso en fuego. Son extrañas.

—Y no han venido, eso quiere decir que alguien las tiene guardadas. —quejumbra Jungkook angustiado. Tannie da saltos intentando atrapar una mariposa que vuela por encima del pasto.

—Espero que no sea otro demonio. Que te corten los cuernos no debe ser una experiencia bonita. Por no decir que seguramente pidan otra cosa que no sea eso. Tuviste suerte de que Jackson solo quisiera tu cuerno y un ala o de verdad se empeñara en Yoongi—dice Taehyung metiendo las manos en sus bolsillos—. Ese demonio ha estado por aquí desde hace quinientos años o más y nunca lo han podido matar. no me lo explico.

—Umm... No lo sé, se siente distinto a otros.

— ¿En qué sentido?

—Más... importante.

—Tal vez sea uno de los regentes del infierno o por el contrario, el hijo de alguno. Los demonios se reproducen tanto que es imposible saber nada al respecto—Exhala agotado—. Como sea, estoy buscando. No me han dado órdenes así que considera esto un pequeño descanso de estarte rompiendo la cabeza y rompiendo la cabeza de otras personas.

— ¡Necesito eso! Me estoy muriendo de hambre. —dice ahogado y con notoria desesperación. Taehyung ríe por la nariz. Pensó que le generaba molestia estar salvando a Yoongi. La realidad es que lo ve como su hora de almuerzo.

—Vale, vale, puedo enviarte la dirección de alguien que sí podrías comer, pero por favor, no dejes nada. Que no haya nada-de-nada. —Jungkook asiente eufórico. Taehyung toma a Tannie del piso, se despide y marcha en su auto.

Jungkook camina de regreso a la casa de Yoongi. Se alejó apenas a la esquina para que Yoongi no viera a Taehyung o preguntara por qué está hablando con él, como se conocen, etc. Preguntas razonables estando en el lugar de Yoongi. Jungkook carga al perro que salta por la ventana abierta para recibirlo. Dando a parecer que no lo ha visto por cinco años y lo extraño mucho.

Encuentra a Yoongi tocando el piano. Curioso en consideración lo temprano que es. Deja al perro en el suelo, con los demás casi derribándolo en busca de atención y los gatos tratando de treparse como si fuera una torre para clavar las uñas.

Jungkook ladea la cabeza. La melodía se le hace familiar, por lo que se queda mirando fijamente con la boca entreabierta. Yoongi mantiene los ojos cerrados, tocando la melodía que se reproduce en su mente sin un motivo. Notas que surgen entre la bruma de su memoria. Un espejismo, un recuerdo enterrado queriendo salir de la niebla en la que se encuentra.

Suelta un prolongado respiro. Es una tonada bonita, da la sensación de que se la dedicaba a alguien. Frunce las cejas, tocando un poco más corrido sin detenerse por recordar algo qué, en teoría, no está ahí.

Uhm-Uhm-Uhm...—Se detiene un momento y Jungkook abre los ojos—. Why so serious? Why so serious...? —Arruga la cara. No es una punzada dolorosa, tan solo es algo que lo confunde y por ello genera incomodidad—. Uhm-Uhm-Uhm... I'm so serious, I'm so, I'm so

Da una risita sin querer, acabando por tocar fluido, con la melodía finalmente completa en su mente y en ello, la letra que le pertenece.

— So what? What if you just brush by? —Jungkook tiembla los labios, observando a Yoongi sonreír mientras canta—. So what? What if you get hurt? Sometimes you might get hurt again—Se lleva una mano a la cara, cubriendo su boca y su ojo derecho volviendo azul, con mechones de su cabello rubios—. Sometimes you might shed tears upset...

—Por qué...

— So what? What if you live like that?

Yoongi se sorprende de recibir un abrazo repentino de Jungkook, como puede le palmea un brazo y pone rígido. Está llorando— ¿Por qué lloras? ¿Pasó algo malo? ¿Hey? —. Insiste, sin conseguir respuesta ninguna. El llanto solo se vuelve peor, con esa mezcla tan encantadora de las dos "personalidades" presentes.

La forma en que lo sujetan es tan desesperada. Un temor inmenso a que se desvanezca y no puedan evitarlo. Yoongi llega a sentirse abrumado por este torrente de cariño. La afirmativa de esta criatura a quererlo tanto que sufre terror de perderlo. Sonríe leve, dándole más palmadas, pidiéndole que se calme.

—No me voy a ir, tranquilos. No lloren. —pide en voz baja.

—Si te soltamos lo harás, s-sí... si dejamos de abrazarte te vas a ir de nuevo. No queremos que te vayas. No nos dejes de nuevo, por favor. Te cuidaremos, de verdad lo haremos.

Yoongi suspira, ligeramente cansado ¿Protegerlo de qué? No ha pasado nada. Tampoco entiende nada. con toda honestidad ¿Qué debe pensar que fueron antes? ¿Qué los lleva a tener tanto cariño? Es abrumador, es emocionante. Es muy, muy cálido y aunque lo fastidio carecer de una respuesta, al mismo tiempo lo hace feliz. Porque da una ilusión desinteresada.

Que sencillamente lo quieren y con eso, se siente feliz. Complacido y conforme a pesar de la confusión.

Cheonsa Nabi | YoonMin/YoonKook || BOOK 1#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora