Venus cargaba a la pequeña bebé en sus brazos mientras Agustín estaba a su lado viendo la imagen, se sentía totalmente enamorado.
—¿entonces, aceptáis ser los padrinos de Alma? —preguntó el barcelonés.
Alma era hija de Vicky y Enrique quiénes habían tomado la decisión de ser padres y hoy ya era más que un hecho, desde que recibieron la noticia sabían que sus amigos tucumanos debían ser los padrinos.
— déjame apreciar a la nena Enrique, ya casi te damos la respuesta —decía Cruz mientras acariciaba la mejilla de la criatura. Algo se removió dentro de él, en su corazón un anhelo nuevo se había desbloqueado.
— está preciosa Vicky, es una niña hermosa. —Venus estaba encantada con su sobrina del corazón. Apenas se enteró que su amiga iba a ser mamá se emocionó muchísimo, era una tía amorosa.
—obviamente que vamos aceptar se los padrinos de Almita. —añadió Agustín— no tiene ojos negros que gritan calle, pero si unos verdes que flecharon mi corazón.
con cuidado tomó a la bebé en sus brazos y la recostó en su pecho mientras la admiraba con total amor y ternura. Mientras la veía se preguntaba que sería ver a un mini Agustín o una mini Venus ¿cómo sería?
¿heredaría el oscuro cabello de Venus? ¿tendría su color de ojos? ¿tendría hoyuelos como su chica? No lo sabía, pero muy en su interior deseaba descubrirlo.
[...]
Venus mordía la uña de su pulgar mientras caminaba de lado a lado, sentía que el corazón chocaba contra su pecho estaba demasiado nerviosa.
la puerta principal de su casa se abrió, estando en su pieza se dio cuenta que Agustín ya había llegado y con Cruz en casa llegaba el momento de la verdad. Esperó a que él llegara a buscarla a la habitación.
—vida, ya llegué —seguido de eso la puerta de la habitación de abrió— hola firulais. —saludó al gato negro que se restregó en sus piernas, Venus río porque siempre le causaba gracia escuchar el nombre del animal que fue idea de su pareja.
cuando el rapero alzó la vista y vio el rostro de su chica pudo notar que algo no andaba bien, los nervios le salían hasta por los poros. Frunció su ceño y dejó al animal para sentarse en la cama y que ella pueda hablar, sabía cómo funcionaba eso.
—¿ha pasado algo? —cuestionó con un tono de preocupación.
Venus llevó sus manos a su rostro y respiró profundo, aclaró su garganta y se dio la vuelta. Tomó las dos cajas que tenía en su tocador y se las extendió.
—¿qué es esto? —decía mientras las abría.
—son dos pruebas de embarazo. —respondió, él alzó su mirada y la miró. Abrió rápidamente las cajas para ver lo que aquellas pruebas indicaban.
ambas pruebas tenían dos rayitas.
—¿positivo? —dijo incrédulo, Venus se limitó asentir. Tenía miedo, ella no esperaba ser mamá pero la idea no le desagradaba Agustín era el amor de su vida y una familia al lado de él le parecía una linda imagen.
pero nunca se habían sentado a conversar el tema, desde que conocieron a Alma las cosas habían cambiado y cada vez que regresaban a casa después de ver a la nena el aire se tornaba extraño. Nunca había hablando sobre la idea de tener una familia.
—¡positivo, mi amor! —gritó emocionado y le dio un fuerte abrazo.— pero a ver ¿vos querés tenerlo? —era importante para él saber eso.
—sí, claro que quiero Agus. La pregunta es si vos querés ser papá, yo estoy muy asustada nunca lo habíamos conversado.—respondió ella con sus ojos llorosos. Él la abrazó.
—¿cómo no voy a querer formar una familia al lado del amor de mi vida? —contestó y dejó un beso en su cabeza— son lo mejor que tengo.
[...]
la morocha abrió poco a poco a sus ojos y notó que el lado derecho de su cama estaba vacío y la cuna que estaba en su habitación también lo estaba, inmediatamente se levantó. Lavó su rostro, fue al living y el corazón se le llenó de ternura y felicidad al ver la imagen que había en el balcón.
Agustín tenía a su criatura en sus brazos de tal forma que pueda quedar frente a él y poder ver su carita. Se movía de lado a lado mientras cantaba alguna canción, la imagen era preciosa y los rayos de sol que apenas empezaban a salir le daba el toque.
se acercó para poder ver qué estaba haciendo Cruz, todo el silencio para que él no note su presencia.
—hoy el sol se escondió, y no quiso salir, te vio despertar y le dio miedo de morir. Abriste tus ojos y el sol guardó su pincel porque tu pintas el paisaje mejor que él —le cantaba mientras la mecía con delicadeza. Ojos color sol, se la cantaba desde que estaba en su vientre.
—que buena elección hicimos tu madre y yo al ponerte ese nombre. Literalmente sos el Sol de nuestras vidas mi amor, sos tan hermosa como estos rayitos de luz que nos están pegando, así de cálida y preciosa sos vos.
—ustedes son el sol de mi vida —habló Venus y Cruz se giró para verla. Sonrió y dejó un beso en su cabeza.
una niña preciosa les había obsequiado la vida, decidieron llamarla Sol porque sentían que era el más adecuado. No se equivocaron, dos semanas tenía la primogénita de los Cruz Moraga y hasta ahora se ha encargado de llenar de luz y felicidad su hogar.
aún era temprano se había despertado por el llanto de su pequeña pero había logrado dormirla nuevamente. Fueron hasta la cuna y la dejaron ahí para que pueda descansar, se quedaron apreciando a su bebé unos minutos, estaban totalmente enamorados.
—es un regalo que mi ángel me envío. —decía Agustín.
—tu ángel cuidará de nuestra estrellita toda la vida, así como ha cuidado de nosotros. —añadió Venus.
estaban completos y felices, no necesitaban nada más porque ver a su hija así de tranquila les daba años de vida.
la verdad es que un extra no estaba en mis planes pero después de que me lo pidieran decidí hacerlo, va dedicado a luzvestiglo
esperonque les haya gustado.🤍
