30 días otp (Richard x George - Piggy)

Día 24

-No se que haré -murmuró Richard siendo abrazado por Zuzy.

-Lo peor es que sabía que esto pasaría -hablo la chica.

-Todo esto paso por que no se lo dije antes, debi decirlo antes, ahora me odia.

-Aún podemos arreglarlo, solo necesitamos hablar con el, aunque no va a querer hablar con ninguno de nosotros dos...

...

Los golpes en la puerta se hicieron más fuertes, el chico bufo y la abrió, observando a Zee parada afuera.

-Escuché lo que pasó, y sólo quería decirte que deberías hablar con Richard y-

La puerta se cerró de golpe en su cara.

-Bien, plan B -murmuró Zuzy, que estaba Escondida con Richard detrás de un auto.

...

-¡Zee Maldita sea vete o juro que te meteré un cuchillo en el- -se detuvo al ver a Edmond en la puerta, quien lo miraba un poco asustado por el grito- ah, eres tu.

-Que linda bienvenida -sonrio el chico nervioso- venía a ver a Richard, hoy faltó al trabajo.

-No está aquí, seguro está en la casa de Zuzy -murmuró apuntó de cerrar la puerta, pero Edmond la sostuvo.

-¿Por qué estária en la casa de Zuzy? ¿Que paso?

George le quedó viendo unos momentos, hasta que abrió la puerta y se hizo a un lado dejándolo entrar.

El chico entró a la casa y tomó asiento, viendo como el pelirosa cerraba la puerta y se sentaba a su lado.

Y de un momento a otro se rompió.

Edmond lo abrazo rápidamente mientras escuchaba los sollozos de su amigo, muy pocas veces lo había visto así, y sólo era cuando algo realmente le dolía.

-¿Que sucedió?

-Richard me engañaba, eso es lo que pasa -murmuró entre lágrimas escondiendo su rostro en el pecho de su amigo.

-¿Que?

-El me engañaba con Zuzy, siempre se quedaba con ella hasta tarde, y ayer le mando un mensaje diciendo que me contará.

-Que hijo de puta -hablo acariciando el cabello de George- Deberías haberlo golpeado.

Escucho casi en un susurro la risa de su compañero y sonrio.

-¿Quieres que salgamos para que te puedas comer una copa de helado de chocolate? Dices que el chocolate alivia tus penas.

-No me siento bien para salir...

-Pasaremos a Happyland.

-... Esta bien -murmuró con una pequeña sonrisa.

...

Miró alrededor mientras George lentamente comía su helado, estaba bastante nervioso, pero sabía disimularlo bien.

-Este lugar está casi vacío -hablo volviendo la vista hacia George.

-Supongo que es por que es día de semana -murmuró el chico sin levantar la mirada.

El celular de Edmond vibró, George no pudo evitar mirarlo cuando lo sacó.

-¿Que pasa?

-No es nada -sonrio levantándose de la mesa- iré al baño un momento, disculpa.

El chico asintió volviendo la vista a su helado, pero una voz llamó su atención.

-George.

Volteo y vio a Richard parado a un lado de la mesa, quiso volver a romper en llanto, pero el chico rápidamente se arrodilló frente a la mesa y sacó una caja de su bolsillo.

La cual en un mal movimiento cayó de sus manos.

-¡Maldita sea! -exclamó recogiendo rápidamente la caja.

Esto causó que una pequeña risa se le escapara a George, la cual hizo que el albino se sonroja y sonreirá avergonzado, tosiendo un poco y abriendo la caja.

-Yo... Uh... Soy un gran imbecil -murmuró avergonzado- Yo te hice llorar, hice llorar a la persona más hermosa que pude conocer, le quite ese brillo tan especial a esos ojos que iluminaban mi vida, y yo... Lo hice todo por mi cobardía.

George lo miraba sonrojado, pero permanecía en silencio ante las palabras del chico.

-Debí haber echo esto hace mucho tiempo, pero por miedo no lo hice, y cause que te crearás muchas ideas erróneas, lo lamento, hice que la persona que tiene todo mi corazón dudará de mi amor por el, algo que me prometí nunca hacer, por que desde el día que te vi, me jure que protegería tu sonrisa, y que seria la causa de ella, y hoy, quiero sellar esa promesa, para siempre.

La situación ya había atraído a bastante gente curiosa, y eso hacía que el chico tuviera más miedo de lo que tenía antes, pero suspiro y sacó el pequeño anillo de la caja, tomando la mano de George y mirándolo con una sonrisa nerviosa.

-George, ¿te casarías conmigo?

El silencio inundó la sala, toda la gente que estaba ahí reunida estaba en completo silencio esperando la respuesta del chico.

Pero lo que se escucho fueron ligeros sollozos.

Richard miró preocupado a George, levantándose rápidamente y tomando su rostro entre sus manos.

-Perdón, perdón, ¿dije algo mal? ¿Es mucha presión? Lo siento tanto -hablo nervioso mirando al chico.

Pero George le dio una pequeña sonrisa y lo abrazo con fuerza.

-Si quiero si quiero, quiero quedarme contigo el resto de mi vida.

La gente comenzó a aplaudir y a gritar de la emoción, dándole palabras de aliento a la pareja y algunos hasta grabando el momento.

Pero a Richard ya no le importaba, lo único que le importaba era el chico que ahora tenía entre sus brazos.

...

Haciendo las pases: ✔️