the girl in black; sapphic [COMPLETA]

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El hombre estaba muy estresado ya hacía varios meses, pero hoy parecía completamente desubicado.

—¿Perdiendo dinero? ¿Cómo?— mi padre tenía mucha seguridad en sus finanzas, como para que hubiera fugas.

—Tengo una deuda con alguien importante de la Bratva. Nos queda muy poco para terminar en bancarrota.

—¿Qué? No lo entiendo, revisé la cuenta bancaria el otro día, es imposible.

—Tengo una GRAN deuda. El tipo tiene hackers y si no pago, hackea mi cuenta bancaria y saca parte del dinero que le debo, pero el problema es que puede dejarnos en negativo.

—Bloquea las cuentas, ya nos las arreglaremos después. Habla con Dante para que controle el flujo de dinero y que localice al culpable.

Dante es el hacker de mi padre, tiene 23 años pero para ser tan joven ya ha hecho muy buenos trabajos colándose en el servidor de la policía o limpiando dinero electrónico.

—No puedo no pagar o bloquear las cuentas, tengo que pagar a nuestros proveedores y trabajadores. Además, esto es diferente, amenazan con matarte a ti.

—Dejaste que mataran al amor de tu vida, qué diferencia hay conmigo.

—No dejé que la mataran. La mataron en cuanto les entregué el dinero. No me perdonaría en la vida que a ti te pasara lo mismo.

—¿Matteo y Adriano?— mis dos hermanos me preocupaban, pero en especial Matteo, que era un fugitivo como yo solía escaparse para ir a jugar al billar y al baloncesto con sus compañeros de universidad.

—Están bien, en sus cuartos.

—¿Qué vas a hacer?— pregunté de brazos cruzados sobre la mesa.

—No te recuestes sobre la mesa, Skyler— me regañó— He considerado matar al jefe. No tiene hijos, y mucho menos un heredero. Si ellos caen primero, entonces nos salvamos.

—Es muy peligroso, tú solo no podrás hacerlo. Además, sabes que hay muchos detrás de Alexei esperando para vengarlo.

Alexei Sokolov, un hombre de unos cincuenta y tantos años, de procedencia rusa, jefe de uno de los negocios más grandes del estado, si él caía... Bueno, nos quitábamos un problema muy grande de encima, aunque no del todo. Al no tener opekun por ser estéril, los integrantes de la Bratva harán todo lo posible por quedarse con el puesto del pakhan.

—Hija, quiero que sepas que pase lo que me pase, no dejarás que Matteo suba al mando. Lo dejaré por escrito, pero ya sabes como son el resto de capos, no querrán aceptarte, pero lo harán, gánate su respeto.

—No, papá, no va a pasarte nada.

—Es lo que intentaré.

—¿No puedes pedir dinero prestado?— me miró como si hubiera dicho la peor de las cosas.

—No, no puedo.

Seguimos hablando, y traté de convencerlo, pero siempre en vano.

Entonces decidí preguntarle sobre Cameron.

—Papá, háblame de Cameron.

—¿Qué quieres saber?— preguntó apagando su puro.

—Todo. ¿Por qué la echaron del ejército?

—Es una asesina— tragué saliva, ninguno de mis guardaespaldas anteriores había sido asesino, de hecho ninguno de ellos ha tenido que matar para hacer su trabajo.

—¿A quién mató?

—A un soldado que violó a su novia. Lo mató a golpes.

Había matado a un soldado, UN SOLDADO, a golpes. Definitivamente no debía separarme de ella, ni enfadarla.