Capitulo 77

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Capítulo 77

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Capítulo 77

Somos lo incorrecto de este mundo

Vi como parte de nuestra familia se iba, la verdad es que Adrik era totalmente distinto a Argel, sobre todo había una complicidad tanto con los gemelos como con Lila y mi chico, sobre todo con Lila, si no me fuera extraño estos dos parecen marido y mujer, pero es algo ilógico, aunque yo se los pondría a Argel con Adrik si pudiera (puede que ese sea el secreto de Lila ¿Qué alguno de sus hijos sea de este hombre?) dijo mi inconsciente, si puede ser la verdad que alguno de ellos sea hijo y si lo es su secreto estará buen guardado conmigo, no soy Maddie, la verdad es que me muro por saberlo, saber la historia de estos dos. Mi diosa quería saberlo cuanto antes y creo que la cuerda también. Sentí como Aralic me abrazaba, me encanta esto en ese instante dijo:

-Estaba todo delicioso

Si la verdad es que estaba delicioso, pero sobre todo lo que más me ha gustado es pasar un rato más o menos en familia, era lo que necesitaba un rato así, aunque faltara mi hermano, pero era lo que necesitaba y tu otro hermano nos jodiera el momento, en ese instante mi chico me miro y dijo:

-Vamos a la cama princesa

Si creo que es lo mejor, irnos a dormir (enserio vais a dormir) dijo mi inconsciente, sé muy bien que no voy a dormir ni él ni yo, vamos a hacer el amor hasta que estemos molidos de amarnos (eso nunca va a pasar) dijo mi inconsciente, si tienes razón, jamás va a pasar que nos dejemos de amar. Fuimos hacia nuestra habitación el me miro y dijo:

-voy a devorarte preciosa

Sabía muy bien que eso era lo que ibas a hacer y yo también voy a devorarte. Los dos nos besamos apasionadamente, Aralic te quiero dentro de mí ya, en ese instante le miré y dije:

-ven para acá gatito

Dios deseo que me devores, quiero que me hagas tuya de mil maneras distintas hasta que no nos queden fuerzas.

Los dos nos besamos de nuevo, mientras que sentía como me quitaba la ropa. Aralic me dio la vuelta, vaya quieres jugar gatito. sentí como me quitaba el sujetador, mientras besaba mi espada. Agarre su pelo, me encanta sentir tu peso encima de mí, no solo eso sentía su polla, dios Aralic tantas ganas me tienes (no solo el de ti, tú de él también) dijo mi inconsciente, si los dos nos tememos ganas el uno del otro es como si hasta que no nos hemos encontrado estuviéramos en el desierto y el único Oasis que había éramos el uno el del otro. Volvió a darme la vuelta, como siempre su vista fue a mis pechos. Sentí como estrujaba uno de mis pechos y jugaba con mis pezones mientras lamia mi cuello, dios amor me encanta, pero te quiero igual que yo, sin nada encima, quiero ver lo que me pertenece ya, en ese instante le quite la camisa, dios adoro su cuerpo, me tomó de las manos y las llevó a su pecho para que tocara cuanto quisiera, en ese instante dijo:

-adelante...como eres mía, yo seré tuyo......mi cuerpo te pertenece en su cabalidad

-enserio

-nena nunca eres un polvo más, eres más que un polvo, eres toda mía como yo soy tuyo

Noches de Lujuria Libro 1 (1º de la saga Pecados capitales)  ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora