REMEMBRANZA (COMPLETA)

Cap 5

F: Nadie la va a tocar Artemio, esto es la guerra.
A: Pero y que puedes hacer? Le pondrás custodia en su casa?
F: No, vivirá aquí..conmigo
A: No te entiendo

F: Nadie se atreverá a tocar a la mujer de Rivero ...

A: ¿Qué?
F: Voy a casarme con María
A: Espera Federico, ¿estás bromeando?
F: No Artemio para nada...es la única manera de que no la molesten
A: ¿Te vas a casar con ella sólo para protegerla? Vamos Federico! Jamás estuviste tan desesperado por una mujer como te vi hoy... Sólo aquella vez cuando se fue Cristina
F: Si, me acuerdo de esa noche

Flashback

F: Busquenla y me la traen aquí o los echo a patadas a todos!
A: Federico! Ya basta, ¿que haces con esa escopeta?
F: Fue ese, ese se la llevo, seguro ella no quería irse pero la obligó o la convenció. Quien sabe que le habrá prometido ese muerto de hambre!( Mientras la cargaba)
A: ¡Estás ciego!
F: Se avecina una tormenta... ( Escucha que se largo a llover) ¡Maldición!
Con lluvia será más difícil localizarla. ¿Dónde debe estar escondida la pobre? ese idiota la debe tener amenazada ..( sale afuera)
A: Basta ya Federico!!
F: Vamos Artemio, quizás está cerca.
A: ¡Dejala por Dios! ¡Razona Federico!
F: Carga tu escopeta

Artemio lo tomo de las mejillas
A: Hijo, basta!! Escucha!!!
(Mirándolo a los ojos) ¿No te das cuenta que se quiso ir con él?, lo quiere a él!!
F: (Lo empuja) No es cierto
A: Entiende ... No te quiere Federico dejala en paz... No puedes forzar a alguien a quererte.
Federico cayó abatido arrodillado en el suelo... con la cabeza gacha.
Así quedó unos segundos pensando y entrando en razón.
A: Ya hijo, si de verdad la quieres déjala que sea feliz.
Vámonos... Tranquilo.

Fin del flashback

F: Hubiese dado mi vida porque se quedara...en definitiva, ya pasó, llegó María y me devolvió las ganas de vivir.
A: ¿Quieres a esa mujer lo suficiente para casarte?
F: Si, pero debo controlar lo que siento por ella. No quiero que después se largue con otro, que juegue conmigo porque me vea enamorado.
Ese Luciano no es de fiar.
A: ¿Controlar? A estas alturas no estás en condiciones de controlar nada ( rió)
¿Hablarás con ella?
F: Si, en la mañana.

Esa noche Federico durmió en la habitación de huéspedes. Hubiese querido hacerlo a su lado y abrazarla, decirle que no tuviera miedo, que la cuidaría. Que ahí estaba él para protegerla, sin embargo se contuvo.

Un nuevo día llegó y ya estaba nervioso. Se ducho y se dirigió hacia su habitación donde María aún dormía. Unos momentos se quedó en silencio contemplándola.. se veía perfecta.

¿Cómo no enamorarse de ella? Pero no podía serle fiel a sus sentimientos. Si algo caracterizaba a Federico Rivero era el ser muy desconfiado.
Se sentó a su lado, le tocó suevemente el cabello y fue en ese instante que despertó.

F: Lo siento, no quería despertarte. Buenos días.
M: Buenos dias...(aún confundida)
F: ¿Como te sientes?
M: Mejor...( Le sonrió)

Verla sonreír lo desarmaba por completo..
será difícil pensó y siguió observandola.

M: ¿Que sucede ?
F: María, estuve pensando. Yo, ( le tomó las manos) no soy un hombre romántico ni mucho menos. Y soy algo bruto para hablar.
Sólo pienso en lo mejor para ti por tu seguridad ...
M: Explícate
F: Sabes, yo te quiero, por lo tanto pedirte que hagas esto para mi no es un sacrificio. Así que lo mejor es que vivas aquí ...
M: ¿Quieres que me mude a la hacienda?
F: Si y no ... Sí, te mudaras pero no como una amiga o conocida ...

Maria se acomodaba sentándose mejor en la cama. La conversación la estaba poniendo un tanto nerviosa.

F: Maria, quiero que te cases conmigo ...