REMEMBRANZA (COMPLETA)

Cap 24

Cr: Que tengas un buen día ( sonrió)
H: Gracias, igualmente...
Cristina!
Ella giro y volvió hacia él
H: Sólo, dime si volvere verte...
Cr: Heriberto...
H: Dame una oportunidad, hoy te invito a cenar, sólo eso y ya... después no insistiré. Te lo prometo.

Cr: Está bien...
H: ¿Aceptas?
Cr: Si..
H: Bien, paso por ti a las 8..te parece?
Cr: Si, claro...( Le sonrió) adiós

Heriberto se sentía sumamente feliz, sin más tiempo que perder llamo para hacer las reservas en un rastaurante que le había recomendado Ángel Luis.

Ojo de agua

María se encontraba sentada frente al espejo peinando su cabello, recién acababa de bañarse. Federico llegó, se colocó detrás de ella y le quitó suavemente el cepillo.
F: Vamos a la cascada hoy ¿ que te parece? ( Mientras la peinaba)
M: Que linda idea, pero ¿no es peligroso?
F: No te preocupes, llevaremos a dos de los muchachos para que recorran el lugar mientras estamos allí.
M: Tengo miedo por los niños
F: Tranquila mi vida, no pasara nada.

Ese mediodía llevarían a María del Carmen también, quien había ido a pasear de sus tíos en lo que Consuelo y Cristina regresaban de la clínica.

M: ¿A propósito dónde está María del Carmen?
F: Con Candelaria y Nachito en el jardín.
M: Vamos a pedirle a Candelaria que nos prepare unas cestas con el almuerzo.
F: Bien, iré yo ( le beso el cuello)

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En otro lugar ...

R: ¿Cuando lo haremos?
G: Tranquila mi reina, hay que ser muy astutos... Tienen vigilada toda la hacienda.
E: Pasa que nos están buscando por todos lados. Y este escondite es seguro?
G: Pues con quién te crees que estás hablando. Yo tengo contactos! Solo tienen que seguirme. A esta no se la dejamos pasar ...que me las cobro me las cobro. Va a correr sangre

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Co: ¿Qué hablabas con el doctor hija? ( Caminaban saliendo de la clínica)
Cr: Nada mamá
Co: Cristina ...
Cr: Heriberto me invitó a cenar
Co: Que bien...y, me imagino que aceptaste ...
Cr: Si
Co: Cuánto me alegro... a ver si así te sacas a...
Cr: Ya mamá...
Te podrás quedar con María del Carmen esta noche ¿verdad? Trataré de no demorar.
Co: Ve tranquila hija.

Momentos después ...

Ojo de Agua

M.C: Abuela! ( Fue corriendo a saludarla)
Co: Mi vida, ¿cómo te portaste?
M.C: Bien!
M: Es un ángel, y cuida mucho a su primito.
Co: Muy bien!
M.C: Abuela, iremos a la cascada
Co: Oh que lindo!
M: Vamos a ir con Federico y queremos llevarla.
M.C: Le voy a preguntar a mamá

Salio corriendo hasta el auto en donde se encontraba Cristina, quien desde lejos no pudo evitar volver a ver con otros ojos a su cuñado quien estaba junto a María. Se odio por ello, por lo que desvió la mirada a su niña que venía en dirección a ella.

Cr: Mi amor! ( Abrió la puerta y le dio un beso)
M.C: Mami, ¿me dejas quedarme con los tíos? vamos a ir a la cascada...
Cr: Claro, pero ten mucho cuidado y no te apartes de ellos ¿si?
M.C: Si!!
Maria! dijo que siii

Horas más tardes...

Federico, María, Candelaria y los niños se dispusieron sobre un mantel para disfrutar del hermoso dia. María no había entendido por qué Federico insistió en llevar a la mujer. Sólo se excuso en que podría cuidar a Nachito mientras los tres podrían meterse en el agua.
El y la niña se sumergieron mientras María y Candelaria se quedaron con Nachito observandolos.
Luego de unos momentos, entre risas, juegos y chapuzones regresaron a dónde estaban las mujeres. Federico no dejaría sola a la niña por más que estaban en el lugar más playo, eso tenía aquel hombre que parecía rudo, un gran instinto protector.