Russell

Capitulo 18 Déjà vu

(Russell)
La semana de exámenes habían terminado y yo estaba agotado. Desde aquella vez que vi a la chica no había podido dormir bien. Después de llegar a casa revise los viejos diarios y no encontré nada que nos ayudara resolver esta situación.

Al abrir el casillero y un papel blanco cayó a mis pies y al levantarla y abrirla había una nota escrita que decía: "Te veo en Brook café a las 4" firmada por Beak.

Arrugue entre mis manos la nota y la aventé dentro del casillero. Guarde mis pertenencias en la mochila y me dispuse a salir del edificio. Hoy el sol había salido después de varios días iluminando las calles húmedas de un brillo intenso. La vista era hermosa. La contemplé un par de minutos más deseando que nunca se me fuera a a olvidar y continué mi camino hasta la tienda de mi abuela. Una vez ahí no me sorprendió ver a Lana en el mostrador jugueteando con su teléfono celular.

- ¿Y la abuela?

- En el baño. Asentí.

- Iré a preparar la comida. Avise.

Subí las escaleras hacia el departamento y me quite la chaqueta para dejarla en el perchero al igual que mis llaves en la mesita de la entrada. Fui a mi habitación y un espectáculo de luces me recibió. Los rayos de sol se colaban por entre las cortinas de la ventana dando directamente en la pequeña figura de cristal que estaba sobre el escritorio junto a la ventana. Desde la ultima vez la había conservado y no sabía que hacer con ella. Lo más conveniente era regresarla a su lugar pero algo dentro de mi se negaba. Ni siquiera sabía porque en primer lugar la había tomado.

Deje mi mochila sobre la cama y me dirigí al baño del departamento para lavarme las manos y preparar mi especialidad. Pasta a la boloñesa.

La cual había quedado deliciosa. Como siempre. Los platos vacíos yacían en el fregadero listos para ser fregados y colocados en su lugar nuevamente. Lana y la abuela habían regresado a la tienda y yo me dispuse a levantar la cocina. Encendí la radio de la abuela y en ese momento dijeron la hora. "3:15". Recordé la nota que me había dejado Beak. Tenía tiempo de sobra. ¿Para que quiere hablar conmigo? ¿A caso Brenda/Joan habría recordado algo? ¿Me habría recordado?Seque mis manos y me fui a mi habitación para ordenar un poco. La semana de exámenes había surtido efecto, estuve tan concentrado en estudiar y en no pensar en Brenda/Joan-Joan/Brenda que había descuidado ese aspecto. Sonreí al recordar aquel día que la volví a ver. Había entregado mi examen casi en blanco. Me sabía las respuestas pero no había podido terminar de contestarlo por estar pensando en ella. Vaya mierda. Salí de la habitación y tomé mi chaqueta. Brook cafe solo estaba a dos calles de casa.

- Vuelvo en un rato. Avise.

Al llegar, un rostro familiar llamo mi atención y me dirigí hacia la mesa en donde se encontraba con una taza de lo que parecía ser té entre sus manos. Tome asiento.

- Pensé que no vendrías. Dio un trago a su bebida.

- Pues pensaste bien. ¿Que quieres?

- Que directo. Me agrada. Rodé los ojos.

- ¿Que vamos a hacer? Arrugue el entrecejo

- ¿Como que que vamos a hacer?

- Si, sobre Joan y Brenda. Reí sin poder creerlo.

- ¿Que te hace pensar que yo quiero ser partícipe de esto?

- Bueno. Confirmamos la teoría, ellas han cambiado de cuerpo. Y tú eres el que ve fantasmas.

No daba crédito a lo que estaba escuchando. Di una respiración profunda y lenta para controlar mi impulso de largarme de aquí.

Vete. No necesitas seguir escuchando a semejante idiota.