Capitulo 10

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Antes de que continuen leyendo, les deje una fotito de como yo me imagino al doctor Beak. El actor se llama Park Hae Jin, vi esa foto y me parecio perfecto (solo de referencia).

(Joan)

El día de hoy no me sentía de lo mejor, había despertado mas temprano de lo normal directo al baño, el dolor de cólicos me había despertado. Fui a la cocina y puse agua para poder esterilizar mi copa menstrual. La había conseguido hace un par de meses y la verdad que a pesar de ser muy sencilla de utilizar y económica, me ayudaría a ahorrar un poco en productos que utilizaba durante el periodo. Siempre la esterilizaba después del periodo pero me gustaba hacerlo también el primer día del ciclo antes de usarla.

Después de cinco minutos, me fui directo al baño para colocarla y tomar una ducha.

Ahora me encontraba en el centro de computo de la escuela, era hora del almuerzo y yo había aprovechado para buscar trabajos de medio tiempo. No me agradaba la idea de dejar toda la responsabilidad a mamá. Antes de conocer a papá, mi madre estaba estudiando enfermería, sin embargo, quedó embarazada de mi hermano y tuvo que abandonar la escuela.

Ambos estaban felices por la llegada de mi hermano pero también sabían que a su edad sería muy difícil mantener un pequeño recién nacido así que tendrían que trabajar mucho para brindarle un buen futuro.
La noche anterior, mi madre había considerado buscar un trabajo de cuidadora. El dinero no alcanzaba en casa y estaba desesperada. No me agradaba la idea que mi madre trabajara tiempo extra, sabía lo demandante que podía ser su trabajo en el hotel y sumándole la carga de trabajo como cuidadora, podría llegar a afectar su salud.

Así que había tomado la decisión de buscar empleos para estudiantes o de medio tiempo que me permitiera llevar algo de dinero a casa. La mayoría de los chicos de mi edad buscaban trabajos en cafeterías, restaurantes o incluso de niñeras. A mi el contacto con la gente no se me daba, me incomodaba y me ponía nerviosa el atender o hablar con un cliente. Sabía que era mucha responsabilidad y yo siendo ese tipo de empleado, sería la cara de la empresa y eso me ponía aún más nerviosa. Sabía que tenía que enfrentar la situación si lo que quería era ayudar a mamá y estaba dispuesta a ello.

Afortunadamente había encontrado varias opciones, tome mi teléfono y tome foto a la dirección y el numero de teléfono para poder ir y dejar solicitud.

El timbre sonó así que guarde mis pertenencias y cerré sesión para salir del aula directo al salón de clases.

Después de una hora, había terminado el ejercicio que había puesto el profesor así que saque mi libreta y comencé a dibujar en ella. Mire la hora y me di cuenta que era tiempo de ir al baño para cambiarme la copa. Los cólicos habían regresado y el dolor se estaba haciendo insoportable. Esta mañana me había percatado que las pastillas para el dolor se habían terminado y no había podido calmar el dolor del todo, ahora apenas si me dejaba concentrarme. El timbre sonó provocando que todos mis compañeros salieran disparados del salón de clases conmigo detrás de ellos, tome mi mochila y fui directo al baño antes de que comenzara la siguiente clase. Una vez dentro del cubículo, colgué la mochila del perchero y saque la pequeña botella de agua que cargaba siempre para esta situación. Cuando estaba a punto de jalar la cadena del excusado, un par de voces se hicieron presentes, una de ellas la conocía bien, se trataba de Cyntia Cooper.

-¿Cómo piensas acercarte al Dr. Beak? Hablo la segunda voz, seguramente de una chica de su séquito.

-Querida, como si no me conocieras. Cuando quiera puedo fingir algún malestar e ir directo a enfermería. El estará solo y como cualquier hombre, no podrá negarse a mis encantos. Y entonces, lo podre tener cuando quiera.

-¿Y si el te rechaza? Por ahí escuche que sale con Joan

Mierda. Porque creían que yo salia con el ¿Solo porque me atendió en la enfermería? ¿Por qué fue al salón a aclarar lo del justificante frente a toda la clase?

RussellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora