Harry Styles es ciego desde los diez años, cuando un fatal accidente lo dejó huérfano y sin visión.
Criado junto a su abuelos y tras rechazar en dos ocasiones los implantes oculares, este luchará por superarse y conseguir sus ansiados sueños.
A sus...
Louis se sentía muy mal por haberle hablado duramente a Harry pero ¿cómo podía explicarle su amarga situación?, ¿Cómo podía confesarle que sentía algo por él pero que nunca podrían tener nada?.
...—¿Qué te ocurre amigo?, ¿Todavía estás preocupado por lo de ayer?—preguntó preocupado Niall luego de notarlo tan callado y ausente.
Este suspiró
—Debe estar odiéndome...maldita sea.
Su amigo lo miró con confusión.
—¿De quién hablas?
—De Harry, por supuesto—contestó con algo de molestia.
—Todavía estás con eso, evítalo y ya está.
El moreno ojiazul lo miró con fastidio.
—¿Cómo voy a hacer eso?, ¿Te das cuenta que soy su compañero y además su guía?.
—Pues ve a dirección y diles que no puedes hacerlo, que le designen a otro voluntario.
Louis chasqueó la lengua y luego negó.
—No, no puedo hacer eso...me comprometí y debo cumplirlo, ¿Qué clase de asistente social seré, si al primer contratiempo abandono?, además, él me importa.
El rubio frunció el ceño.
—¿Él te importa tanto cómo para complicarte más la vida?.
El estudiante de Asistencia social suspiró nuevamente.
—No lo sé...en realidad no sé lo que siento, es confuso.
—Puede que sólo te sientas comprometido con él por tu cometido... quizás solamente te dé pena por su situación...apenas lo conoces hace dos días.
Este volvió a negar.
—Lo sé...sé que no lo conozco totalmente pero él me hace sentir cosas que hacía mucho tiempo que no sentía... me atrae, él tiene algo que me hace querer protegerlo más allá del programa.
(...)
A la hora de la comida, Harry volvió a aventurarse hacia el comedor común pues estaba bastante enfadado por la actitud de su guía y ya no quería obedecerle.
El ojiverde estaba seguro de poder hacerlo solo pues durante años, había superado obstáculo a obstáculo y con un poco de práctica, lograría solventar también los que se toparía en adelante.
Caminó por el largo pasillo con la ayuda de su bastón y cuando llegó a las escaleras, una a una las bajó sin problema pero justo cuando iba a girarse hacia la derecha en dirección al comedor, alguien tropezó con el y lo tiró al suelo.
—Auch, oye, ¿Acaso no me has visto?—preguntó este adolorido.
—Si, si te he visto —le habló una voz bastante alterada.
Harry extendió la mano, esperando que la perdona lo ayudase a levantarse pero no fue así.
—Por favor ¿puedes al menos darme tu mano?.
—¿Por qué?, hazlo tú solo...yo no soy tu amigo.
El ojiverde suspiró con pesar y a continuación se incorporó.
—Gracias por nada.
Este escuchó risas burlonas del polémico muchacho y acto seguido oyó otra voz, la cual le resultó conocida.
...—¿Estabas aquí?, Te he buscado por todas partes...eres muy travieso Shawn.
—Ah hola Liam—Sonrió este como si nada.
El mayor lo agarró y acto seguido miró a Harry.
—Hey oye ¿tú eres el chico de la habitación veintiocho verdad?, ¿Que haces aquí solo?, ¿Dónde está tu guía?
—Si, soy yo...emm, supongo que Louis, tendría algún contratiempo—Contestó este sacudiendo su pantalón.
El mayor miró a su protegido y luego negó.
—¿No le habrás hecho nada verdad?
Shawn negó con la cabeza.
—Lo siento, si te ha molestado, mi compañero sufre esquizofrenia...él es otro de los estudiantes beneficiarios de la beca especial...siento si te ha molestado, su enfermedad le hace actuar de forma compulsiva sin diferenciar el bien del mal.
El ojiverde asintió con pesar.
—Oh vaya, pobrecillo.
—¿Vamos ya Liam, tengo hambre?—Habló el más bajo, tirándole del brazo.
—Si, por supuesto pero acompañaremos a Harry también,¿Ok?
Tras comenzar a caminar unos pasos con los dos chicos del programa, sujetos con ambos manos, el mayor se detuvo de repente.
—Sueltalo...él es mi responsabilidad—dijo el ojiazul molesto.
—¿Dónde estabas?...No puedes dejarlo solo...cómo tú bien has dicho, es tu responsabilidad.
El guía resopló.
—Tuve algo que hacer en mi última clase y no he podido venir antes pero Harry tenía que esperarme, no sé que hace aquí—habló este mirando a su protegido.
Liam asintió con algo de molestia también.
—Está bien, por esta vez pero que no se vuelva a repetir o daré parte a la dirección del programa.
—Tranquilo no ocurrirá—habló el ojiazul mirándolo fijamente.
—Por tú bien, eso espero.
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