22.

1.2K 220 10
                                    

Seokjin caminaba detrás del presidente, junto a dos colegas, una vez terminaron la junta administrativa con otros inversionistas y posibles nuevos patrocinadores oficiales a la marca.

—Bien, Seokjin, puedes ocuparte del proyecto ahora— Jaesung giró sonriendo feliz de que todo saliera bien ahí dentro.

—Claro, señor presidente, es un gusto para mi— hizo una ligera reverencia.

—Muy bien, entonces cuento con ustedes— dijo antes de entrar al ascensor.

—Nos encargaremos— dijeron los tres a coro viéndolo hasta que la puerta se cerró.

—Oh por Dios, creí que moriríamos— dijo Bangchan.

—¿Verdad que sí?— Suho suspiró pasando una mano por su frente.

—¿Cómo Min se habrá dado cuenta de qué el presidente quería Mont blanc? de no ser por él hubiésemos muerto...

—Concuerdo.

Seokjin los vio caminar de regreso al salón de juntas y él solo retrocedió corriendo hasta las oficinas, ya era hora del almuerzo pero quería contar con la suerte de encontrarlo todavía ahí dentro.

—Yoongi...— él estaba sacando copias —El presidente Jaesung se fue muy feliz...

—Ya veo.— contestó sonriendo.

—Dijo que puede relajarse ahora que ha tenido un Mont blanc, ¿sabes por qué?

—Parece que tiene una especie de superstición.

—¿Superstición?

—Sí, durante la época del ex presidente— comenzó a explicar —Él comió Mont blanc y su nuevo producto se convirtió en un éxito y fue el que lo catapultó hasta su actual puesto, por eso desde entonces siempre debe tener un Mont blanc antes de las reuniones.

—No estaba al tanto de eso en absoluto— contestó sorprendido —Yoongi, ¿tú cómo lo supiste?

—¿Eh? Ah- bueno, el presidente me lo dijo antes— tartamudeó —lo recordé cuando le llevé el té...

—Ya veo. Pero aún así, me salvaste.— sonrió.

—No fue nada.

—Déjame ser yo quien te invite algo la próxima vez.

—Oh, no no tienes que-

—Gracias.— fue lo contestó interrumpiendo su negación, hizo un gesto con su mano y regresó a su puesto.

Yoongi sólo pensaba en como el "Gracias" se sintió tan bien por primera vez en sus oídos. Quería gritar de felicidad pero habían más presentes, así que ocultó su rostro dentro de la copiadora aparentando sus puños y sonriendo como un loco.

—Yoongi la copiadora-

—Ya terminé— se enderezó de inmediato al escuchar a Seulgi detrás suyo, tratando de no verla caminó hasta su puesto.

Ahí subió sus pies en la silla giratoria donde está sentado y dio muchas vueltas, aún no podía creer que había sido de ayuda para Seokjin, pero eso lo ponía demasiado feliz.

Ahí subió sus pies en la silla giratoria donde está sentado y dio muchas vueltas, aún no podía creer que había sido de ayuda para Seokjin, pero eso lo ponía demasiado feliz

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mago [Jinsu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora