50.

343 63 5
                                    

No tardaron mucho en llegar a una feria, Yoongi ni siquiera sabía que había una en la ciudad.

Caminaron viendo los distintos juegos que habían sido montados, luego aceptó subirse a las tacitas giratorias por insistencia de Seokjin.

—¿No sientes que desentonamos un poco?— Yoongi miraba las demás tazas siendo ocupadas por parejas jóvenes y otras por familias con sus hijos. —¿Lo estás haciendo de nuevo verdad?— dijo viendo cómo Seokjin fingía no seguir tomandole fotos.

—¿Haciendo qué?, No estoy haciendo nada.— contestó riéndose mientras tomaba más fotos. —Mira esta, sales muy bien.— dijo mostrando su teléfono.

Yoongi sintió su rostro caliente al verse a si mismo haciendo un puchero. —Borra eso.

—Lo pondré de fondo de pantalla.

—No, no lo harás.

La mañana iba bien, probaron más juegos, le gustó mucho uno de disparar al blanco con pistolas de agua, mientras que se sintió muy infantil al querer subirse al carrusel y que Seokjin le estuviese grabando.

Después se acercaron a un puesto de frappé para comer algo, no habían desayunado aún.

—¿Lograste distraerte?— preguntó Seokjin al terminar el suyo.

—Sí... muchas gracias por esto, Seokjin.

—No tienes que agradecer, yo también me divertí en la práctica para nuestra cita.

Yoongi río. —¿Cómo es que esto no es una cita ya?

—No, es solo una práctica. Quiero que nuestra primer cita sea muy especial.

—Si tú lo dices.— le sonrió mientras terminaba su frappé. —¡Oh!, ¿Ese es el barco pirata? siempre quise subir en ese.

—Entonces vamos.

Fueron hasta la boletería y Yoongi estaba impaciente por subir. Una vez puesta la seguridad el juego arrancó. La vista desde arriba era hermosa, escuchar a las demás personas gritar emocionadas era divertido también. Pero de pronto sintió que el juego iba demasiado rápido, sentía que su cabeza daba vueltas y el ruido dejó de ingresar por sus oídos.

Se había desmayado.

—Ten, bebe un poco de agua.— ofreció Seokjin cuando estuvieron en una zona más apartada.

—Perdón, no creí que me afectaría tanto.— Yoongi tomó del agua y se recostó sobre la mesa. 

—No te preocupes.

Yoongi volteó su rostro viendo a Seokjin, por alguna razón se veía diferente y sintió que había empeorado la situación por culpa suya.

Volvió a beber del agua, no quería pensar eso. Tal vez Seokjin estaba igual de cansado que él.

—Oye Seokjin, ¿Te sientes cansado?

—No, estoy muy bien.— respondió lo más natural posible, pero esa sensación de que se veía diferente seguía presente.

Definitivamente había arruinado el ambiente. ¿Acaso él estaba enojado?, ¿Cómo se supone que podría saberlo?

Vio la botella que sostenía por unos segundos, luego vio sus manos y pensó que en momentos como este era bueno el usar su habilidad. Bebió lo último que quedaba de la botella y, al desocupar sus manos, se acercó solo un poco más a Seokjin tratando de tocar parte de su torso sin que se diera cuenta.

"Se supone que quería animarlo, ¿Cómo fue que terminamos así?, Ahhh, yo debí haberme dado cuenta que se sentía mal, ¿Cómo no lo noté? Me gusta que él se esfuerce y trabaje duro, pero quiero que mientras esté conmigo sonría mucho y se feliz..."

—Seokjin...

—¿Pasa algo?

Yoongi descubrió que el semblante de Seokjin no lucía enojado, solo estaba preocupado y él era el motivo de esa preocupación.

—Gracias por todo esto, por preocuparte y cuidar de mi.

Seokjin sonrió. —No tienes que agradecer, de verdad.

Yoongi aprovechó la cercanía y besó su mejilla por unos segundos. —Un premio.— después de eso se alejó cuidando de no tocar ninguna parte de su cuerpo.

Lo único que escuchó durante el breve contacto fue un "Qué carajos" que le sorprendió, nunca pensó que esa palabra estaba en el vocabulario de Seokjin. Este tenía la cara algo cálida y lucía nervioso.

Y aunque Yoongi quería saber con lujos y detalles lo que pasaba por la cabeza de Seokjin, decidió que esta vez no.





50 caps para un beso
en la mejilla?, Sí.

Mago [Jinsu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora