Mago [Jinsu]

26.

—Hoy también me quedaré en tu casa Jinnie.— dijo jugando con su cabello.

—¿Con qué permiso?

—Disculpen— interrumpió Yoongi la discusión —Creo que mejor me bajaré del taxi.

—¿Qué estás diciendo?, ¡estás enfermo!— retó Seokjin.

—¿Eh?— Jisoo volteó a ver con preocupación a Yoongi.

—Así que por favor bájate— continuó Seokjin —Vuelve con tu novio, yo iré a dejar a Yoongi a su casa.

—¡No lo haré!

—¡Eres muy egoísta, eonni!

—¿Eonni?— reaccionó Yoongi.

—Por desgracia me tocó un hermano que no me entiende, lamento que tengas que trabajar con un tipo como él— continuó Jisoo. —A propósito, ¿vives solo?

—Ah... Sí.— contestó.

—¡Ya!— aplaudió —Entonces Jinnie podría quedarse en tu casa para cuidarte.

—¿Qué?— dijeron los dos al mismo tiempo.

Al final no pudieron contra ella, quien terminó quedándose en la casa de Seokjin.

—Lo siento mucho— fue lo primero que dijo Seokjin al entrar en la casa de Yoongi.

—No te preocupes.

—¿Estás resfriado?— pregunto Seokjin acercándose al verlo estornudar varias veces.

Yoongi no paraba de estornudar y Seokjin preocupado se acercó para tomar su temperatura.

—Estás que hierves, deberías meterte en la cama... ¿Dónde tienes un termómetro?

—Oh, yo no tengo.

—Creo que en mi bolso tengo uno— continuó Seokjin.

Yoongi dio media vuelta para dirigirse a su cama pero chocó con Seokjin, este en un intento de evitar que caiga se enreda con sus propios pies cayendo los dos sobre la cama.

Tenía ambas manos al lado de la su cabeza, sentía que en cualquier momento estás iban a ceder debido a su respiración entrecortada.

"¿En qué diablos estoy pensando?, no debería emocionarme, debo cuidar bien a Yoongi"

—Yo... iré por el termómetro, si...

Yoongi asiente aun sin comprender nada, su cabeza solo da vueltas y cuando se da cuenta ya ha amanecido, está sobre su cama.

Da una vista periférica al lugar y parece estar pulcramente ordenado. Se sienta, rasca su cabeza y encuentra a Seokjin sentado en una silla frente a su cama.

—Buenos días— dice Seokjin sonriendo —¿despertaste mejor?

—Buenos días— contesta —si, me siento mejor.

—Genial, quédate en cama, tomaré prestada tu cocina.— dice levantándose.

Lo observa quitar su saco y colgarlo al lado de donde está el suyo, entonces ligeros recuerdos llegaron a su memoria.

Recuerda a Seokjin ayudándolo a cambiar su traje por ropa de dormir, también cambiando un pañuelo húmedo en su frente constantemente para regular su temperatura y por último a un Seokjin durmiendo de rodillas al lado de la cama con solo su cabeza reposando sobre esta para poder estar pendiente de cada movimiento.

Yoongi quería llorar, incluso ahora estaba preparando el desayuno por él.

—Muchas gracias.— dice en voz alta.

—¿Qué me agradeces?

—Estoy mejor porque me cuidaste.

—Oh no, tranquilo, no fue gran cosa. Hice gachas de avena, ¿te gustan?

—Sí— respondió Yoongi asintiendo y dirigiéndose a la mesa, aunque no sabía a qué se refería con gachas, sólo sabía que le gustaba la avena. —Se ve delicioso— dijo cuando tuvo los platos servidos frente a él.

—Hoy me voy a mi casa— dijo Seokjin tomando un plato para enfriar su contenido.

—Por eso no te preocupes, puedes quedarte el tiempo que quieras.

—¿A qué te refieres?— preguntó Seokjin.

—Quiero decir, parece que tu hermana sigue en problemas... entonces supongo...

—Oh... — dice Seokjin comprendiendo —Entonces puedo quedarme qui por un tiempo— acepta. —Ya está tibio, toma— extiende el plato y la cuchara.

Yoongi toma la cuchara y casi deja caer el plato al escuchar "domingo veintiocho de octubre, día en que Yoongi y yo empezamos a vivir juntos"

—Espera un momento, se derramó un poco— dice Seokjin sin soltarlo aún, tomando un pañuelo y limpiando los bordes.

"¿A partir de hoy tendremos lo que llaman una vida dulce?" junto con ese pensamiento vinieron también imágenes de los dos cocinando juntos, ordenando, jugando, trabajando, todo juntos hasta que Seokjin finalmente retiró su mano.

Yoongi sentía que se iba a volver loco. Entonces solo evitó mirarlo y comió lo más rápido que pudo.