Capítulo: Doce

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YoonGi iba furioso. HoSeok le seguía a una distancia prudencial. No era bueno para nadie cuando YoonGi se enojaba, dejaba de lado ese ser racional del cual se caracterizaba.

Maldecía a cada paso que daba, se habían adentrado en la ruta que los conduciría hasta la Aldea.

Dentro del pueblo, del cual procedía JiMin y TaeMin, habían escuchado algo que a HoSeok le heló la sangre y a YoonGi lo enfureció. El supuesto prometido de TaeMin había recibido la herencia del mencionado y el de JiMin, había hecho una convocatoria.

En la plaza central, habló diciendo que posiblemente JiMin había muerto, pero que no debían preocuparse encontrarían a los responsables, los harían pagar, porque los donceles de ese lugar solo le pertenecían a los hombres que pagaban su precio.

Todo ser humano debía ser respetado, sin importar qué.

Respiró hondo y trató de controlarse, caminó un par de pasos mas y se detuvo. Debía relajarse, no podía asustar a nadie en el refugio en que vivían, sería demasiado. No podía arriesgar la vida de todos los donceles.

- No puedes asustar a JiMin de esa manera YoonGi...- le dice HoSeok, colocando su mano sobre el hombro del mencionado. YoonGi le miró y asintió.

- Solo... sentí demasiadas emociones negativas arremolinarse en mi interior- susurró. Recordaba la sonrisa de su papá... su papá, él no hizo nada para protegerlo. HoSeok asintió levemente e ingresaron al lugar que los protegía.

JiMin estaba haciendo una merienda ya que TaeHyung se encontraba con él, y por un momento deseó también llevar un bebé, quizás que fueran de piel pálida y cabellos oscuros, sacudió levemente sus cabellos y suspiró. Tomó el tazón de frutas con miel y se lo sirvió a TaeHyung.

- Me dan ganas de vivir contigo JiMin- le dice con una sonrisa. JiMin sonríe también.

- ¿Por qué?- pregunta divertido y curioso.

- Siempre que vengo estas cocinando...- dice TaeHyung emocionado- YoonGi debe disfrutar mucho el hecho de que estes aquí... no es justo, JiMin, yo también quiero...

- Dile que no te gusta cocinar...- HoSeok aparece seguido de YoonGi, quien tenía la mirada un poco perdida, mostrando vulnerabilidad en sus ojos. TaeHyung hizo un pequeño sonidito frustrado, sin embargo JiMin no despegó su mirada de YoonGi.

Estaba preocupado.

Luego de unos minutos, la pareja Jung se retiró, JiMin en modo silencioso siguió a YoonGi, hasta llegar a la parte trasera de la casa.

- ¿Qué haces, JiMin?- preguntó sin mirar atrás.

- Realmente no lo sé...- murmuró apenado- Solo... que pareces afligido y preocupado...

YoonGi suspiró, se quedó allí parado sin hacer algun movimiento mas allá de presionar sus puños hasta volverlos blanquecinos. JiMin temiendo un poco, ya que nunca había visto ese comportamiento en YoonGi, le abrazó por la espalda.
El mayor estaba sorprendido ante ese gesto, y se desplomó.

Lloró por todo lo que estaba recordando. TaeHyung no sabía nada, protegió a su hermano desde esa noche en que su mente creció y se dio cuenta de lo horrible que era la vida de su papá. Se apartó de JiMin, quien un poco asustado y nervioso, pasó a estar totalmente sorprendido cuando el mayor lo apresó en sus brazos. Y lloró escondiendo el rostro en su cuello.
JiMin se apresuró para abrazarlo y acariciar su espalda, en un intento de consolarlo y hacerle saber que no estaba solo.

YoonGi se separó solo un poco para llevarlo a la habitación, le pidió que no dijera nada solo se acostara en la cama. En menos de un minuto, YoonGi estaba sobre su cuerpo abrazandole de igual forma, JiMin un poco tímido por la posición, le abrazó y movió sus manos sobre la espalda de YoonGi, dejando que el mayor se relajara.

- Recordé cosas de mi pasado...- murmuró el mayor- Todo me ha abrumado, también tengo miedos JiMin...

JiMin asintió. Entendía a YoonGi, el mayor se mostraba fuerte e imponente la mayor parte del tiempo, y ahora se mostraba aturdido y abrumado. JiMin le abrazó, tratando de hacerle sentir comprendido y querido.

- He sido fuerte... pero, me estan consumiendo- murmuró oculto en el cuello del menor.- Quisiera decirlo todo, pero temo que incluso tú salgas huyendo de aquí...

- Quiero quedarme...- JiMin susurró- Quiero estar aquí, contigo, Yoon...

- ¿Sin importar qué?- YoonGi le miró interrogante y con ilusión.

- Sin importar qué...- dijo y siendo besado por el mayor, un beso dulce y tierno, consolador y cálido. JiMin abrazó el cuerpo de YoonGi, acercandolo y anhelando el contacto entre ellos.

YoonGi estaba confirmando que amaba estar dentro de esa sensación cálida que JiMin le proyectaba. Sabía lo que el menor había sufrido, en muchas ocasiones lo había visto llorar, y JiMin le había platicado sobre las veces en que tenía que recibir esas malditas clases, no eran ningun recuerdo bonito ni agradable.

Por eso había hablado con SeokJin para que pudiera darle un apoyo y convertirse en un amigo cercano, que pudiera encontrar en SeokJin el amor paternal que le hizo falta durante viente años.

- Si...- YoonGi dijo al separarse de los labios de JiMin- No hay forma en que no puedas enamorarme Park JiMin...

JiMin se sonrojó notoriamente, apresó la ropa de YoonGi entre sus manos, y dejó que el mayor acariciara su mejilla con cariño. Su mirada se conectó con la de YoonGi, y le sonrió tímido.

El mayor estaba absorto en la belleza de JiMin.
En los lunares que adornaban su rostro, en el brillo que sus ojos relucían, en sus labios rosaceos, en la pequeña nariz. JiMin era una definición de belleza completamente.

Un chico, un doncel al que YoonGi consideraba muy valiente.

- Debo confesarte que desde que te ví... tenía planeado secuestrarte- confiesa, JiMin le mira sorprendido, pero no se aleja del toque de YoonGi.- Aún con eso... ¿qué te parece cambiar tu apellido a Min?

Set Me FreeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora