Set Me Free

Capítulo: Dieciocho

YoonGi temía por el silencio prolongado de JiMin.

El menor estaba procesando todo lo que había escuchado. Estaba impactado, cuando SeokJin le dijo que debía prepararse para cuando YoonGi le contara la verdad sobre su pasado y familia y el por qué era un rescatador de donceles, no supo qué tanto debía prepararse.
Supuso que era algo grave, pero no sabía cuanto. Pero antes de pensar mal de YoonGi, pensó en su papá MinHyun, el dolor de cada golpe, de cada humillación, de cada insulto, de cada uno de los abusos que padeció.

Lloró, porque también recordó a JoHyung, los cortes que veía cada vez que se reunían, su llanto al contarle el infierno en que vivía. Y lo lamentó por el papá de YoonGi.

- JiMin...- YoonGi lo llamó en susurro temeroso, con su mano temblando, tocó el hombro del mencionado, quien se había encogido en su lugar, llorando fuerte y abrazandose así mismo.

JiMin levantó su mirada borrosa y distorsionada por las lagrimas, y abrazó al mayor. No tenía porque sentirse mal, JiMin no le tenía miedo, simplemente era doloroso imaginar ese tipo de escenario. Y pensar que en algun momento él pudo pasar por lo mismo, le dió pavor. Sí el simple hecho de lo que vivió junto a todos los intructores y doctores le dejó resentimiemtos bastante grandes y pesadillas que a veces lo atormentaban, no quería imaginar lo que sería vivir eso junto a la persona que decía amarte en un principio y que terminara volviendose el demonio que acabaría con tu vida. JiMin simplemente estaba asustado de algo que no viviría, pero que muchos sí vivieron.

YoonGi lo envolvió entre sus brazos, tratando de calmarle, el llanto de JiMin era doloroso de escuchar. Luego de unos minutos, JiMin se calmó, solo quedaba su respiración alterada que poco a poco iba regulando. Pero el menor no tenía la intención de moverse, al menos no en ese momento, allí se sentía seguro.

- ¿Estas bien?- la pregunta de JiMin desconcierta un poco a YoonGi, quien esta preocupado por su reacción.

- Creo que yo debería preguntarte eso...- dice sonriendo avergonzado. JiMin le mira de inmediato sin moverse del abrazo. Aun refugiado entre los brazos del mayor.

- Estoy bien... solo pensé de más- mencionó y fijó su vista en el lago- Yo, solo todo me abrumó, imaginar todo lo que vivió tu papá y recordar a mi amigo, y en lo dificiles que fueron los primeros años de mi adolescencia... solo fue todo eso junto, que me hizo sentir abrumado y temeroso...

YoonGi asiente levemente y suspira lleno de alivio. Al menos JiMin no le temía a él, o eso esperaba.

Se quedaron en esa posición, observando la pacifica noche, escuchando los suaves sonidos que los acompañaban, entre ese lugar oculto y lejos de todos a su alrededor.

- Me gustaría cambiar mi apellido a Min...- JiMin murmura. YoonGi se sorprende y aleja al menor de su cuerpo. No esperaba esa respuesta.

- ¿Qué?- YoonGi pregunta, JiMin le sonríe y acaricia las mejillas de YoonGi, acercandose para besar al mayor, despacio y sutil, solo un roce entre sus labios, afirmando que estaban juntos y que sería lindo seguir estandolo.

Que hasta el momento ambos se sentían bien, que estar juntos era lo que ambos anhelaban en silencio por temor a decirlo en voz alta. JiMin suspira ante el contacto que se le corresponde. YoonGi esta sorprendido en un principio, pero cede ante la forma tan bonita que no puede evitar profundizar un poco el roce de labios.

- ¿Estas seguro?- preguntó una vez se separaron y viendolo a los ojos. YoonGi no quería que JiMin se arrepintiera de esa decisión. Claro que trabajaría para que JiMin no se sintiera mal por haberlo elegido.

- Claro...- JiMin le sonrió, apretando las manos del mayor entre las suyas.- Quiero que mis hijos te digan papá a ti también...- ríe ante la expresión de asombro que YoonGi ha puesto.

YoonGi no esperaba esa declaración, era demasiado para él, pero una parte de él, se siente aliviado. JiMin ya no es el chico temeroso y dolido que llegó a la aldea, ahora era un chico que había crecido y era independiente y valiente. Había aprendido a defenderse, pero no dejaba de lado ese ser amable con el que lo conoció.

- Bueno, creo que me gustaría eso...- respondió sonriendo.- Amaría mucho tener una bebita contigo...

JiMin se sonrojó levemente, y asintió riendo.

- Cuando nuestra hija crezca, le contaré lo valiente que su padre es, lo amoroso y bello que fue... le diré nuestra historia, que comenzó como tragedia y terminó como un cuento de hadas, donde el principe guapo se queda con el principe mas lindo y dulce del reino...- YoonGi dijo sonriendo. No podia dejar de sonreír, le emocionaba solo pensarlo.

- YoonGi...- JiMin sintió sus ojos humedecerse, las palabras de YoonGi siempre habían sido las correctas en cada momento. Le habían brindado consuelo y amor, apoyo y afecto.

Min sonrió.

- Antes de todo, te dije que soy el gobernador de Daegu- YoonGi recordó. JiMin asintió.

- ¿Solo gobernador?- JiMin preguntó un poco confundido.

- En estos momentos lo soy, ascenderé al trono una vez me case- YoonGi dijo, fijando su vista en el menor quien atentamente escuchaba todo.- Así que debes saber lo que vendrá una vez te cases conmigo, no quiero que te arrepientas en un futuro cercano o lejano...

- Sí te vuelves rey, ¿eso significaría que en algun momento vería a mis padres de nuevo...?- preguntó con un poco de temor.

- No lo sabemos... por eso insistí de muchas maneras en que aprendieras a defenderte, para que en caso de no poder cuidarte puedas darme tiempo de auxiliarte...- YoonGi dijo pensativo. JiMin suspiró, era algo que no podía evitar, pero aun con ello, no dejaba de ser algo angustiante.

Ambos se levantaron, luego de unos minutos. Habían sido sumergidos en un silencio tranquilo y relajante para ambos. JiMin sabía que para YoonGi era dificil hablar de su pasado, lo vio llorar y temblar, incluso tensarse y querer vomitar. No quería imaginar lo que YoonGi tuvo que hacer para que TaeHyung no lo supiera del todo. Ya que YoonGi al parecer no les ha dicho a todos la realidad. O al menos TaeHyung solo lo sabe a medias, y lo entiende, entiende el deseo de YoonGi de querer proteger a su hermano menor. De cuidarlo de esos recuerdos espantosos...

- Me gustaría, conocer la tumba de tu padre, él hizo de ti un gran hombre, si tengo la oportunidad me gustaría visitarlo...- JiMin dijo en voz bajita.

- ¿En serio?- la emoción no pasó desapercibida para el menor y asintió seguro.- A mi papá le hubieras agradado... y mucho...

JiMin se sonrojó.

- Yo hubiera querido agradarle...- JiMin sonríe ante esa imagen que no será posible. Y su corazón se oprime un poco, mira a YoonGi quien le abraza en medio del camino antes de llegar a su casa. A ese lugar al que llama hogar. Porque JiMin encontró su hogar al huir de esa mansión, porque su lugar estaba al lado de ese hombre que lo único que hizo fue enseñarle a volar y ayudarle a crecer...

- Te amaría mas que a mí...- YoonGi dice.

- Pero yo, te amaría mas a ti, siempre...

Una promesa que JiMin guardaría en su corazón y alma. Un beso que selló las palabras dichas esa noche por ambos. Porque YoonGi se había prometido hacerlo feliz.

Porque una vida libre también significa una vida sin arrepentimientos...