RETORNO

148 15 7
                                    


♛WINTER♛

Presente.

Despertar en época de exámenes se me hacía insoportable, pocas horas de sueño y miles de tazas de café para nada saludable. Pero al final era mi culpa, yo había elegido la carrera de derecho por encima de mi talento artístico.
Aunque supongo que pensé que no era suficiente para ello. Aunque seguía amando confeccionar mi propia ropa.

Cuando era más pequeña la pasaba confeccionando disfraces con mi amigo, con ayuda de las costureras porque papá no se fiaba al dejarme en la máquina, ser niño se sentía mejor. Tan hambriento por vivir.
Ahora, esperaba a mi amiga Crystal terminar de discutir con su ex novio abusivo porque simplemente no entendía que habían acabado. Aunque pasaran ya casi cinco meses, cada día llegaba con un discurso y un "gesto romántico diferente".

—Por favor Crystal. Cuélgale ya.

Rogué desde la isla de la cocina.

La vi pensar, entonces avance hacía ella y colgué su teléfono.

—Crys, se que puede ser complicado y doloroso pero si sigues contestando sus llamadas cuando se siente sólo, volverá a entrar en tu corazón y sabes lo difícil que ha sido sacarlo de ahí—Le puse el desayuno en la isla y ella limpió una lágrima de su rostro y sonrió.

—¿Terminaste el ensayo?—Me preguntó con ojos de perrito—Creo que necesito tu ayuda para hallar un tema.

—Te puedo ayudar a buscar uno, aunque estoy segura que mi tema apesta.

La universidad había sido difícil pero no de la manera que era la academia, en ella era una guerra por el poder, y en la universidad era una guerra por encajar y buscar una vida en el mundo real.
Muchos creían que por mi familia ya lo tenía todo, estaban equivocados. Al salir del reino no me quedó mucho más de lo que había podido ahorrar. Mis padres no me apoyaron, o mas bien mi madre.

Aunque habían cosas que no cambiaban. Chicos queriendo llevarme a la cama por ser una princesa y tener el lujo de contarlo y chicas intentando ser crueles conmigo sin razón, yo ya tenía bastante entrenamiento en jugar sucio, pero aquí quería algo diferente. Así que no respondí, y luego encontré a Crystal.
Se convirtió en mi mejor amiga rápidamente.

—¿Tengo un dibujado algo obsceno en la frente?—Pregunta Crystal.

—No, te miro porque eres muy bonita, si tan solo no fueras tan desordenada me casaría contigo—Señalé la ropa encima del sofá con expresión molesta.

—Luego, hoy tenemos que pagar facturas y hacer la compra, entonces...¿qué quieres hacer primero?—Preguntó con una voz suave.

Escuchamos alguien llamando a la puerta, mi amiga fue a abrir mientras yo me quedé mirando la lista de compras añadiendo lo que a Crys se le había pasado.

Hubo un silencio largo.

—¡Winter!

Su tono de voz era sombrío, me lleno de escalofríos aún sin saber que algo pasaba, supe que algo estaba mal.

—Es para ti.

Me acerqué y me congelé cuando lo ví, después de tanto tiempo. Estaba aquí.
Henry Visserym.

Hace 10 años.

Estoy en el salón bailando ballet para papá cuando recibe una llamada y sale sin pedir por lo menos perdón.
Como si ya no estuviera lo suficientemente frustrada con Virginia en la academia para que ahora mi padre me ignore.

—¡Winter! Llama a tu hermano y ven a la oficina por favor.

¡Genial! Ahora tengo que buscar al revoltoso por toda la propiedad.
Mi hermano dice que para tener solo dos años mas que él soy una amargada, pero no lo soy. Sólo no tengo tantos amigos como él... o ningún amigo en realidad.
Normalmente tengo muchos deberes y tareas, clases a las que asistir y no puedo llegar a las reuniones de gente de la academia, así que el que no los tenga, es culpa mía.

—¡Dominic!—Lo busco hasta que lo encuentro escalando un árbol—Papá quiere hablar con nosotros.

—¿Te portaste mal hoy hermanita? Porque algunos de nosotros estamos trabajando duro para ser importantes—Se ríe burlándose de mí, a diferencia de mí él es más centrado pero mas curioso.

También heredó los ojos de mi madre, azules. Y la piel porcelana de papá.

Al llegar a la oficina de papá. Él nos sirvió té.

—Chicos, ¿recuerdan la familia Visserym?—Dijo mi padre.—¿Al chico Henry? Su país está teniendo algunos problemas con los rebeldes y su madre esta enfermando. Su papá llamó temprano, para pedir hospedaje para el chico Henry. Quiero su opinión.

—Que se mantenga alejado de mi habitación y estaremos todos bien—Demando Dominic.

Papá se burló. Él era bastante territorial, y aunque aún era pequeño estaba creciendo tan rápido que a veces pensaba al final quién escogería papá para gobernar. Decían que tendría que ser el primogénito pero mamá decía cuando estaba molesta que podían declararme no apta y estaría Dominic.

—Esta bien, al final, hay que darle una mano a cuanta gente podamos, así se gana la simpatía y el respeto de la gente—Dije alzando los hombros restándole importancia.

—Así es Winter. Así pensaría una reina—Dijo mi padre y mi hermano bufó a mi lado.

Por alguna razón ese comentario no me gusto, me asustó y me incomodó.

Días después había llegado Henry, me hice en el marco de su puerta viendo un niño más grande que yo, parecía del tamaño de un árbol aunque apenas tuviera 16 años, solo tres más que yo. Un chico rubio de muy buen humor pegando mapas por todas las paredes de su cuarto, tenía telescopios y algunos planos con estrellas.

No sabía que él iba a ser una de las personas más importantes de nuestras vidas, un confidente y un consejero.
Lo amaba, aunque muy poca gente consideraba amigo, él hacía parte de ellos.

——————-

https://open.spotify.com/playlist/3DhYZQyoMF6VrO6ycmen6H?si=-Bf3klrDRy-YW4JTzZtLxQ

LA ELEGIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora