Co-autoria que comparto con @ofiuco, espero la disfruten.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
La señora Astoryas había tenido una vida trágica.
Llena de dolor y rota hasta la médula jamás imagino enamorarse. No es...
Pasaron cuatro días antes que su profesor de pociones la citara de nuevo en su despacho.
Helena estaba a punto de sucumbir en un terrible ataque de pánico... ¿Enseñarla a matarlo? Eso era terrible, el profesor no lo merecía, incluso pese a si horrible acción de días atrás.
Pensando en cumplir con su trato, había pasado dos noches enteras sin dormir y una tercera en la Sección Prohibida de la biblioteca, investigado maneras de acabar con una vida.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Se desconocía, y una parte de ella confiaba que él se retractaría al último momento. Aquello no podía ser.
Alisó su vestido color verde, porque ya casi nadie usaba uniformes en esta época, la Navidad estaba tan cerca que todo olía a pino y muérdago.
Adelante, escuchó en su mente, antes siquiera tocar la puerta de su despacho.
Qué hombre más extraño...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Entró con suavidad cerrando la puerta tras ella, para encontrarlo recostado en su escritorio con una copa de vino entre sus dedos.
Pobre alma la suya, pensó al ver las enormes ojeras que surcaban su pálida piel. Algunos rasguños sobresalían de la tela que cubría su cuello y su expresión era la del agotamiento absoluto.
-Puedo venir después –dijo, instantáneamente tragando en seco.
-No.... Es hora, te he observado, luces demasiado miserable –gruñó Snape, con algo de culpabilidad en sus venas, mientras le daba otro sorbo a su copa-. Estás sobre analizando la situación... Haciéndote preguntas innecesarias y lamentándote por mí en los rincones. No necesito tu compasión, Swan... Yo anhelo la muerte -su voz era siseante y peligrosa.
