3. Dentro del Mar.

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[Peter]

Al señor Stark no le gustaba dormir, o quizá no podía hacerlo. Los días que había pasado en casa, siempre, en la noche, se internaba en el balcón mirando hacia el agua. No lo culpaba. Mirar el agua fría y oscura por las noches era divertido e incluso relajante. Pero sentía algo distinto en él, un aura extraña que me hacía querer levantarme y preguntarle si todo estaba bien. Sentía como si la estuviese pasando mal.

A veces solo quieres estar solo y pensar, divisar, digerir y racionalizar sobre todo. Te preguntas mil cosas y no encuentras respuesta a ninguna. Pero, otras veces quieres apoyo, puedas admitirlo o no. Quieres a alguien que alivie tu miserable existencia, quieres compresión, porque no hay nada más horrible en el universo que sentirse solo incluso estando rodeado de millones de personas. Era un estado se ánimo horrible, incluso peligroso. Lo sabía muy bien.

Y siendo sincero, a la tercera noche sentí que el señor Stark me estaba llamando mientras imaginaba que miraba con los ojos repletos de melancolía por el balcón.
Aún tenía miedo, no habíamos hablado mucho desde nuestra primera salida y no sabía si aún le agradaba o si alguna vez lo hice.

Quería salir y ayudarlo en lo que sea que estaba pasando pero no era tan fácil, no tenía su confianza para preguntarle cómo estaba, sería como pedirle explicaciones o entrometerme en algo que no me incumbía en lo mínimo. Pero quería saber que le pasaba para tratar de aliviarlo.
No hice nada, me quedé en mi cama y no salí. Mi cuerpo inerte se quedó adherido a mi cama y no pude hacer algo para levantarme.
Quería hacerlo, pero no lo hice.

Tomé mi móvil y vi el mensaje de MJ.

Mj: ¿Cómo estás? ¿Todo bien con tu hombre?

Sonrío y me ruborizo instantánea al leer el "tu hombre." ¿Por qué piensa que me gusta?

Peter: Es un poco extraño, está afuera, creo que no puede dormir y quiero salir pero no quiero quedar como un tonto.

Envío el mensaje y ya puedo imaginar la respuesta de mi amiga. ¿Por qué no negué?

Mj: Anda ve. Sal y hazle compañía, no todos tienen esa oportunidad en sus vidas. Quizá y hasta te lleve a su habitación. Jaja.

Río otra vez, al igual que vuelvo a sentirme nervioso y ruborizado.

Peter: Cállate. No voy a salir, es tarde y tengo sueño. Además mañana tenemos clases con los niños.

Envié el mensaje y me puse de puntillas en mi cama y miré desde la ventana alta de mi habitación otra vez, estaba sentado en una silla, solo lograba verle la ancha espalda desde lo alto de mi ventana y también pude notar que tenía un vaso con una sustancia casi del mismo color de sus ojos. Imaginé a mamá y papá comprando Whisky solo para él y eso me hizo sonreír. Cuando volví a caer a la cama noté que mi amiga había respondido.

Mj: Bien. Descansa, pero solo piénsalo Peter. Tienes una oportunidad única, si yo estuviese sola en mi casa (porque tu casa es enorme y básicamente lo estás) con Natasha Romanoff no dejaría ir una oportunidad así. Descansa, aguafiestas.

One Month. (Starker)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora