Un año en otro mundo

XII

Nada más llegar,lograron ver un gran grupo de personas, que en su mayoría eran renovados mientras que un pequeño grupo eran habitantes del pueblo los cuales solo venían a ver.

—Antes de comenzar queremos que todo el mundo muestre su maná –Hablo por lo alto uno de los tantos magos evaluadores.

Algunos no comprendían el porque se les pedía eso pero aún así lo hicieron. Al parecer eran pocos los que tenían un control estable sobre su propio maná. Estuvieron así por unos minutos mientras los magos los miraban hasta que les dijeron que parasen.

Los magos de alejaron un poco de los renovados y comenzaron a tener una especie de discusión, volvieron con ellos y los fueron dividiendo en grupos dependiendo su control de maná, formando así 3 grupos.

Nuestro trio se encontraba en el grupo neutro, ni muy buenos ni muy malos.

Poco después explicaron cómo se les evaluaría, consistía de 2 etapas:
1. Un mago evaluador revisaría la o las afinidades sobre la magia.
Y 2. Usarian su hechizo más fuerte.

Mientras eran evaluados se podía notar como estaban más atentos ante los usuarios de fuego.

<Esta claro que solo es una excusa para ver quién puedo hecho lo de ayer>

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—Por fin se terminó –Farx se notaba fastidiado

—Pero si tú no hiciste nada, ni siquiera usaste un hechizo –Le regaño Junko, llegando con el dúo.

—¡Eso no es cierto!, use mi reforzamiento de defensa –Refuto orgulloso.

—¡Eso no es un hechizo!

—Bueno... Estrictamente hablando si lo es –.Se unió Shicle apoyando a Farx –. —Ademas no especificaron que tenía que ser un hechizo ofensivo...

—mira quién lo dice... –Junko casi susurraba al decir esas palabras.

Junko y Farx seguían discutiendo si su hechizo contaba como uno mientras que Shicle solo los ignoraba.

<Vaya par de amigo que me tuve que conseguir, ¿no crees Noah?>

—Tengo entendido que una amistad es mejor cuando las personas que la conformas son diferentes, de esa manera ambas partes aprenden cosas del otro

<Viendo lo así tiene sentido>

—Hey –Junko se encontraba enfrente de él, tronando sus dedos para captar de atención.

—¡Ah!, ¿Qué pasa? ¿me hablaron?

—Si, ¿en qué pensabas colores? –Farx se acercó a ellos.

—jeje nada importante, solo en como podría obtener afinidad al viento –Aun que no solía mentir a menudo, el decir una se le hacía algo natural.

—¿Seguro? –Pero aparentemente cierta Genko podía llegar a intuir que podría estar mintiendo

—¡Lo juro por la garita! –Alzo un poco su voz mientras que hacía la forma de una gara con su mellique izquierdo.

—¡Si lo jura por la garita debe de ser verdad! –Farx hizo la misma forma con su mellique.

—Aaah, son un par de tontos.

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Shicle se encontraba leyendo sobre la magia de viento mientras que le decía sus dudas a Noah

<¿Entonces puedo aumentar la magia de fuego con magia de viento>

—Exactamente, también hay más combinaciones como el agua y el rayo, tierra y fuego, etc. Pero también existen combinaciones que en vez de potenciar  lo debilitan

<Interesante... Muy interesante...>

—Shicle, ¿puedo preguntarte algo? –Hablo Junko entre miles de cobijas que la cubrían.

—Dime —Respondio sin apartar su vista de su lectura.

—¿Crees que esto sea real? –Fue tanta la sorpresa de su pregunta que apartó su vista del libro para mirarla.

—¿A qué te refieres exactamente? —Su color levemente verdoso cambio a un morado opacado.

—Bueno que tal si solo estoy en un sueño y me estoy imaginando todo esto o incluso que esté en coma o algo así –Sabia que estaba asustada sin siquiera poder verla por completo por culpa de toda esa montaña de cobijas.

—En ese caso yo no sería real... Ni Farx ni nadie que hayas visto aquí —Su voz no era para nada igual a como solía oírse, era sumamente fría–. —Pero nada igual si creemls que es o no un sueño, si no lo que realmente es...

Se mantuvo un silencio que rivalizaba con un funeral tradicional.

—Bueno... ahora me toca a mí —Su color verdoso volvió junto con su voz de toda la vida.

—¿C-Cómo?  –Se sorprendió por el cambio del ambiente, pensaba cómo es que podía cambiar tan drásticamente en momentos.

—Ya que tú me hiciste una pregunta, es normal que yo te haga una, ¿No?

—Si s-supongo... ¿cuál es la pregunta?

—Dejame pensarlo... –Decia mientras se acariciaba la barbilla–. —¡Lo tengo!, ¿cómo es que puede cambiar de tu forma humanoide a la de un zorro normal?

Aunque Shicle no lo pudo notar la pregunta que le hizo provocó que el rostro de Junko se colorara un poco.

—Es algo e-especial de los Kitsunes, c-cómo tus cambios de color por ser un camaleón, suelo cambiar mi forma para estará más cómoda

—Ya veo, bueno creo que es hora de dormir –Se estiró un poco–. —Nos vemos mañana

—Si, buenas noches.