Capítulo Cuatro

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Podía ver la mirada de Killua recorriendo su cuerpo desnudo, esos ojos azules que siempre miraban con tristeza ahora eran poseídos por la lujuria. Gon levantó la mano para tomar la mejilla de Killua pero antes de poder tocar la pálida piel, despertó.

El calor inundaba su cuerpo y aunque no lo viera sabía que su rostro estaba rojo, antes eran pensamientos, ahora se habían convertido en sueños tan realistas que podría jurar que en verdad sucedieron. Gon tocó sus labios con la yema de los dedos, en el sueño estaban tan cerca de besarse que le pareció algo frustrante despertar. Suspiró y cubrió sus ojos con su brazo.

«Todo está bien, solo fue un sueño. A mí... no me gustan los hombres»

Se levantó de su cama, fue a su armario. Tomó una camisa blanca, un chaleco café al igual que un pantalón del mismo color y por último un abrigo verde con pequeños toques de rojo en partes específicas.

Fue directo al trabajo.

Llegó de manera silenciosa y se encerró en su oficina, al sentarse en su escritorio releyó los documentos pero era la tercera vez que leía el mismo párrafo y no podía prestar atención. golpeó su cabeza con el escritorio.

Gon estaba molesto.

De nuevo quería evitar a toda costa al albino pero la verdad era que quería que killua lo buscara, ¿Cómo killua iba a buscarlo si ni siquiera se caían bien?

Golpeó su cabeza contra el escritorio varias veces hasta que alguien lo interrumpió.

-¿que tratas de hacer? ¿Matar las pocas neuronas que te quedan? -, Gon levantó su mirada, sus mejillas se colorearon de rojo al ver a killua en el marco de la puerta. ignoró por completo el insulto.

-No te di la autorización de entrar -reclamó el moreno. Killua fingió leer los documentos en su manos para evadir la queja.

-Netero organizó otro debate para la tarde y como aún piensa que hay algo entre nosotros me envió a darte el recado.

-Genial, otro debate.

Gon no estaba en las mejores condiciones para participar en un debate, tenía muchas cosas en la cabeza como para agregar nuevas.

-no tienes que sonar tan entusiasmado.

Gon hizo una mueca y al ver a killua con más detenimiento su cerebro reaccionó;

Tenía a killua frente a él... ¿Qué quería decirle?

Tal vez le diría que lo escuchó en el baño con alguien para reprocharle por ser tan poco prudente... pero eso sonaría como una madre, tampoco podía opinar al respecto porque a ellos dos los encontraron en la oficina de Netero además de que siendo sincero consigo mismo eso no era lo que quería decirle.

Entonces tal vez quería preguntar si había algo más entre él y su amigo... no, no debía meterse en la vida personal del mayor aún más sabiendo la relación que ellos dos llevaban; Ninguna.

-bueno eso es todo.

¡no! ¡No podía irse aún!, Gon aún no encontraba las palabras para decir lo que quería.
abrió sus ojos al darse cuenta de algo, No necesitaba palabras para expresar lo que quería, solo acciones.

Corrió a la puerta y jaló el brazo de killua para llevarlo dentro de la habitación, después cerró la puerta con seguro.

-¡¿qué se supone que haces?! -Killua se alteró, pensó que de un momento a otro Gon intentaría matarlo, pero se mostró muy sorpresivo al ver como se acercaba a él, se paraba de puntillas para simular su estatura y lo besaba.

Tal vez Gon nunca lo aceptaría ni lo diría en voz alta pero quería tener a killua de la misma manera que esa vez. Lo seguía besando era un beso cargado de necesidad por parte de Gon y cuando se separó de killua éste lo miró de manera arrogante.

Solo un Fallo ~KilluGon~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora