Capítulo 9, Chicos y chicas.

4K 272 656
                                    

En medio de un infierno llameante, chico y chica se reunieron.

Shirou se recuperó de su estupefacción, y le preguntó a la chica—. ¿A qué te refieres? Las últimas veces que nos encontramos, me dijiste cosas como: que nos habíamos conocido aquí, o, que habíamos estado juntos durante los últimos 7 años; pero, yo no recuerdo nada de eso...

Manaka sonrió—. Eso lo comprendo, como dije antes, el conmoción debió ser muy grande; pero tranquilo, te ayudaré a recordar, desbloquearé esas memorias...

Por un momento, el paisaje cambió ligeramente.

Súbitamente, él se encontró en la parte más cercana de la zona residencial al epicentro de la tragedia. Y...

—¡Papá! ¡Mamá!

Una versión joven de sí mismo intentó llegar hasta una de las casas; pero era demasiado tarde. Todo había sido envuelto por esa especie de lava negra que lo consumía todo a su paso. Al ver que no podía llegar y que la lava lo devoraba todo a su paso, el chico no pudo hacer otra cosa que correr en la dirección opuesta de la que venía.

—Parece que no estabas en casa en ese momento. O tal vez te sacaron de ahí antes que el barro lo consumiera todo... —dijo Manaka, luego, ella le sonrió al pelirrojo, él se encontraba entre estar incrédulo por lo que estaba viendo y temblando por la impotencia que le traían estos recuerdos—. Por cierto, no servirá de nada que intentes intervenir. Como debes saber, no son más que recuerdos...

Su joven yo corrió con todas sus fuerzas; pero fue inútil, aquel barro, como lo había llamado Manaka, lo consumía todo con absurda rapidez. Pronto, él se vio rodeado, se había subido a uno de los escombros intentando escapar del barro...

—¡P-Papá! ¡Mamá! Alguien, por favor... ¡Alguien por favor que me ayude! —rogó el niño entre sollozos...

Pero nadie respondió a su petición, la cantidad de barro aumentaba cada vez más y, de un momento a otro...

¡Crack!

Los escombros cedieron.

¡AAAhhhh! ¡NOOOO! —gritó tanto su versión más joven, como su versión actual. Él fue consumido por el barro...

Pero entonces ocurrió algo, del lugar donde su versión joven fue absorbida, emanó una gran luz. No podía ser Avalon, el joven chico todavía no se había encontrado con Kiritsugu, pero entonces, ¿qué era?

—¿A-Algún tipo de hechicería de protección? —preguntó el Shirou actual. Él se encontraba realmente preocupado por lo que estaba viendo, Manaka dijo que son sus recuerdos; pero, si es así, ¿significa que él cayó dentro del barro?

Manaka asintió—. Así es, y una muy poderosa para oponerse a todos los males del mundo. Vamos... —Manaka entró dentro del barro—. Estos son solo recuerdos, si quieres saber que pasó después, debemos entrar...

El cuerpo de Shirou retrocedió instintivamente, le temía, no, le aterraba. Un miedo grabado a fuego desde aquel incidente, si era sincero, si no fuera por tener que volver a ver a Fou en su verdadera forma, él preferiría volver a Aylesbury, antes que tocar aquel barro. Pero tenía que saber, tenía que saber porque sobrevivió... Con cuidado y, con mucho miedo, él siguió a la joven.

Oscuro... Muy oscuro, y luego, maldiciones, una cantidad absurda de maldiciones...

El aprendiz de magus observó cómo ese barro intentó devorar a su versión más joven; pero entonces, aquella hechicería se activó. Una hechicería arraigada a la tierra; pero, más aún, arraigada a él. Lo rodeó y evitó que las maldiciones le tocaran; sin embargo, fue solo durante unos instantes, la protección se empezó a desvanecer y, cuando estuvo a punto de desaparecer, súbitamente, brilló con más fuerza que nunca.

Fate / Alternative RecordsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora