Fate / Alternative Records

Capítulo 24, Laberinto de Consecuencias.

Illya terminó de prepararse para partir hacia el Séptimo Laberinto de Alcatraz, Sella, Fillia y Leysritt ya estaban preparadas, no sabía si la ancestro o Sajyou estaban listas; pero tampoco le importaba, de hecho, si no los acompañaban, serían una preocupación menos para ella. Es decir, ya iban a ir a un lugar repleto de enemigos, era mejor no llevar a dos posibles enemigos más.

Con todo listo, Illya tomó un pequeño bolso con todo lo que había preparado, este era un regalo de parte de Sajyou como forma de disculpa por lo que había hecho, ella estuvo tentada a rechazarlo; pero era algo muy útil para ella, además, no quería causarle problemas a Shirou. Era obvio que la situación en la que estaban ponía mucho peso sobre su hermano, y ella no quería formar parte de ese peso, quería ayudarle a cargarlo, algo que, al parecer, las otras dos también parecían querer hacer a su manera. Después de verificar que todo estuviera preparado, ella se precipitó hacia el recibidor del taller, allí se encontraban sus tres damas de compañía, ella esbozó una ligera sonrisa al verlas; pero esta murió rápidamente cuando se dio cuenta que no solo estaban ellas, a unos metros de distancia, se encontraba Sajyou también.

Al notar su presencia, Manaka sonrió y le saludó...

-Buenos días, Lady Einzbern.

Ella frunció el ceñó ligeramente, ya había dejado en claro su posición respecto a cómo se sentía hacia ella y hacia la ancestro; pero parecía que, tanto Manaka como Altrouge, seguían actuando amistosas hacia ella, a pesar de que ella declaró claramente que no le agradaban y prefería que se mantuvieran alejadas de su familia, incluso, cuando no estaban manteniendo la farsa por el bienestar de su hermano.

El ambiente se tornó incomodo alrededor de las cinco.

Con la cordialidad con la que había sido entrenada para mostrarse, ella respondió el saludo de forma fría-. Sajyou, ¿dónde se encuentra Shirou?

Manaka frunció el ceño-. Él se encuentra en su taller, quería enseñarle a la chupasangre su nueva creación. He estado esperando a que ambos vuelvan para darle a Shirou su nuevo código místico; pero se están tardando bastante.

-Ya veo. -Illya se giró hacia Fillia-. Fillia, ¿podías ir a buscarlo?

-¡No sé preocupe, Lady Einzbern! Planeaba ir a buscarlo yo misma -interrumpió la maga.

-Preferiría que vaya Fillia, gracias -respondió Illya de forma cortante.

Manaka respondió con una falsa sonrisa-. No creo que Fillia-san sea capaz de imponerse ante la chupasangre, si queremos partir rápido, es mejor que vaya yo, ¿no lo cree?

Illya hizo una pequeña mueca por unos instantes; pero entendió el razonamiento de la chica. Si algo había aprendido de la ancestro, es que era el tipo de persona que va a su propio ritmo y siempre hace lo que quiere.

Lady Einzbern no pudo evitar suspirar-. Bien... Te lo encargo.

Manaka sonrió-. Déjemelo a mí.

Illya entrecerró sus ojos mientras veía partir a la chica hacia el sótano, realmente, tratar con las dos era una molestia, sería más fácil si la trataran con la misma frialdad con la que ella les trataba; pero no importaba, ella tomó esta decisión y planeaba mantenerla; sin embargo, con el paso del tiempo, Shirou se estaba dando cuenta de que ellas no se estaban comportando de forma normal cuando estaban juntas. Pero ella mantendría la farsa de "buena convivencia", pues no quería agregar más peso a los hombros de su hermano menor, fue lo que decidió después de no poderlo convencer aquel día...

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Illya había salido de la habitación donde Shirou se encontraba descansando, ella se quedó durante unos minutos parada en un mismo lugar con la mirada baja y el rostro mostrando una evidente preocupación; pero, lo que más se podía notar en su mirar, era su disgusto por la situación actual.