Capítulo 1

653 43 3
                                    

9 de octubre del 2019

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

9 de octubre del 2019

Siento como mis delgados dedos chocan contra las frías teclas de mi piano, nunca pierden ese toque. No desperdicio una pequeña oportunidad al día para expresar mis sentimientos mediante la música. Le agradezco a la pequeña Emilie que decidió ser curiosa y preguntar por ese gran y extraño artefacto color marrón con unas lindas teclas rectangulares blancas y negras que le llamaban sin cesar. Este instrumento ha sido mi refugio, mi forma de gritar lo que siento.

Cierro mis ojos cuando escucho la primera melodía brotar a través de el; es increíble cómo puedo llegar a aprenderme canciones en unas horas y tocarlas como si tuvieran toda una vida en mi memoria.

La música que se siente en el ambiente, es mágica. Puedo sentirme en una nube flotando alrededor de las notas musicales. La pasión que brota de mí, me hace ver distinta a lo que aparento ser. Con el piano muestro quien realmente soy, puedo decir que hasta una versión vulnerable de mí se asoma, invadiendo mi propio ser.

Llevo apenas cuatro días desde que llegué al internado The King College. Estoy lejos de mis amigos, de mi mascota, de mi hogar y sí, lejos de mi papá. La verdad sé que me lo merezco, pero no creí que él se cansaría de mí, de todos lo esperaba menos de él.

Escucho un repiqueo contra la puerta del mini departamento que me toca compartir con una compañera, que recién se acaba de irse a la biblioteca. Siento como mi ceño se frunce por haber interrumpido mi canción.

Me acerco a la puerta e inmediatamente dirijo mi mirada hacia el cabello del pelirrojo que tengo en frente. Unas cuantas pegas se riegan por su rostro y me dedica una sonrisa con sus dientes torcidos.

-¿Hola? -confundida me cruzo de brazos.

-Estamos juntos en tres clases -me dice rápido y yo alzo una ceja apurándolo a que hable-. La señorita Swan, me pidió que hiciera equipo contigo -refiriéndose a la profesora de historia-, notó que no te apuntaste a ningún grupo y así te ayudaba a hacer amig...

-¿Es obligatorio estar en un equipo? -lo interrumpo.

-Sí -duda un poco.

-Eso espero, sino te las verás muy mal -ruedo mis ojos-. Dame tu número de teléfono, yo te contacto para que me informes cuando haremos el trabajo y la investigación para el debate.

-Por eso venía -sonríe-, nos vamos a reunir en breve y quería que vinieras conmigo -se pasa la mano por la nuca, nervioso.

Volteo a ver mi piano y suspiro. Parece que My Heart Will Go On tendrá que esperar.

-Dame unos minutos -asiente.

Dejo la puerta entreabierta, recojo el libro de historia que me prestó Ellen junto a mi libreta que descansaban en la mesa de la pequeña sala de estar. Voy hacia mi habitación y meto a mi bolso una cartuchera llena de marcadores de colores, audífonos, teléfono y la tarjeta que funciona como llave para poder abrir la puerta de mi departamento.

Amor entre Telones © (#2) ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora