Capítulo 7

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25 de octubre del 2019

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25 de octubre del 2019

Ellen y yo caminamos juntas mientras bajamos de nuestra residencia hasta la puerta principal. Llevo entre mis brazos unos libros y vamos platicando sobre el tema del examen de historia.

—Emilie —me llaman y me detengo bruscamente.

—¿Qué? —volteo a mi derecha y Logan me está esperando con su uniforme impecable.

—Hablemos antes de ir a clase, por favor —ruega.

Ellen nota el ambiente incómodo y se despide de mí, dejándome a solas con él. Sabía que este momento llegaría, de hecho había intentado hablar con él, pero parecía no querer hacerlo y me rendí.

—Perdóname, desde aquel día en que me rechazaste, me he sentido molesto y herido. Quería hablar contigo al día siguiente hasta que te vi con Stuart ¡Y demonios! Cuánto me molesté. Para nadie es un secreto que tú le gustas y su mero intento de hablar contigo, me descoloca por completo. Simplemente perdí la razón.

—Sí, has sido un completo idiota. Logan, tienes que respetar mis límites. Si digo no, debes entenderlo. No todos estaremos dispuestos a hacer todo lo que “el rey” —hago comillas con una de mis manos— desea.

»Y en cuanto a lo de Stuart —niego—, él es mi amigo. Y de una vez te digo que si me vas a prohibir hablar con alguien o ser amigo de algún compañero, vamos en mal camino.

Detengo la caminata para encararlo, él tiene el ceño fruncido.

—Lo sé, no quise ser así. Perdóname —me toma de la mano libre y me besa el dorso—. ¿Estamos bien?

—¿Por qué me ignorabas?

—No me sentía listo para hablar.

—Bien —resoplo.

—¿Si estamos bien?

—Sí, Logan.

Me abraza y me alza, suelto un pequeño grito y me roba una sonrisa.

—Vamos —entrelaza nuestras manos y caminamos en dirección a la cafetería.

[*]

Camino deprisa para mi clase de deporte, he atrasé mientras comía y creo ser la última que falta por llegar. Me cambio con rapidez en los vestidores y tomo mi toalla. Mi cabello es tapado con el gorro especial y al abrir la puerta, todos voltean a verme.
Me coloco al lado de Siena y Jenny, evitando la mirada llena de reproche del profesor.

—Bien, primero hay que calentar —hace sonar su silbato y comenzamos a correr alrededor de la piscina.

Luego uno de los deportistas nos guían en el estiramiento, hasta que el profesor indica que debemos hacer una fila para comenzar con la natación. Mi traje de baño es completo, de color negro y llevo unos lentes acuáticos en blanco.

Amor entre Telones © (#2) ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora