Capítulo 37

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22 de febrero del 2021

Siento que desde que dejé el trabajo en el restaurante, he podido organizarme mejor y ya no me siento a punto de colapsar.

Hoy es el estreno de la obra, estaremos dos semanas presentándola en el teatro de Townsville y si la obra tiene la fama que tanto esperamos, puede extenderse y quizás trasladarse a otras ciudades, cosa que me tiene muy contenta.

Voy camino al teatro, para prepararme. Todas las personas que aprecio, estarán presentes en mi primera obra oficial. Siento que estoy en un sueño, como si nada de esto fuera real.

Coloco música a todo volumen y bailo en mi asiento. Que esta felicidad no se evapore y se mantenga de este modo.

Al llegar, el movimiento en el teatro era gigantesco. Ya la escenografía estaba lista desde hace bastante tiempo. Los actores estaban siendo arreglados y algunas personas que asistirán como público ya rondaban las afueras del lugar.

—¡Emilie, deprisa! —me apresura el encargado de mi maquillaje y mi peinado, en lo que pasó las puertas que dan tras bambalinas. Suelto mis cosas en mi lugar y el comienza a hacer magia con sus manos.

Ya habíamos acordado previamente como se arreglaría cada uno. Eso era muy importante, para que todo quedara acorde con la vestimenta y la escenografía.

Mientras releía mis líneas, que aunque no era necesario repasarlas porque me las sé a la perfección, era un modo de distraerme. Los nervios estaban presentes, pero no era algo que me afectaría. Sino que es la reacción natural de la situación.

Una hora después, me veo al espejo y no me puedo creer de lo que veo. Estoy hermosa y amo la combinación de colores que resaltan mi mirada. Mi cabello parece tal y como de la época victoriana. Tan solo faltaría el vestido y entro en el papel.

—¡Vaya, mira esos ojos! ¡Qué preciosa! —me halaga el estilista.

—Tu has hecho magia.

—Cariño, tienes una belleza que se puede aprovechar demasiado —sonríe—. Rómpete una pierna, chica —me dice y se retira a arreglar a otra.

Me causa risa esa frase y mientras me rio, detallo mi maquillaje. De pronto aparece detrás de mí, el director de la obra y me sonríe al ver mi reflejo en el espejo.

—¿Sabes esa satisfacción al ver materializado aquello por lo que tanto has trabajado? —me pregunta y asiento— Me siento de esa forma en este momento.

—Estoy tan emocionada al ver que ya estamos a nada de presentarnos.

—Acostúmbrate, Emilie —me dedica una mirada con un brillo particular—. Este es tu mundo, bienvenida a tu primera presentación de muchas. Personas como tú, dedicadas y dispuestas a mejorar cada día, es lo que necesitamos —me guiña un ojo y se retira.

Respondo un par de mensajes a mis amigos, quienes me avisan que ya están en sus butacas. Siena me envía una foto del enorme telón rojo frente a ella y me indica que todo mi familia se encuentra presente, hasta mi madre y mi fastidiosa tía.

Calum me manda una foto de él, muy elegante mientras lanza un beso a la cámara. Sonrío y veo a los lados, antes de enviarle una foto igual. Sé que si me ven compartiendo mi apariencia antes de la obra, puedo ganarme un gran regaño.

Me coloco mi vestido y cuando estoy terminando de ajustar mis zapatos, mi teléfono anuncia una llamada.

—¡Hola! —sonrío.

—¡Hola! —se escuchan murmullos cerca.

—¿No te aguantaste que te apresuraste a llamarme?

Amor entre Telones © (#2) ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora