Capítulo 16: No hay lugar como el hogar.

4 1 0
                                    

Theron sabía que algo extraño había pasado con Judy en el transcurso que ella se había ido de su vista en el hotel. No solo era por su actitud de indiferencia hacía él sino también por ese brillo en sus ojos, esas mejillas sonrojadas, esa sonrisa boba que de repente se veía en sus labios y justo esos labios que tenían un aspecto más jugoso, más rojo, más deseable.

Algo dentro de él picaba porque ya sabía la razón detrás de aquel cambio, pero estaba decidido a quedarse callado para que ambos tuvieran un buen viaje; aunque estaba claro que lo estaba volviendo loco el simple pensamiento de que Judy se hubiera dejado besar por el gilipolla que Ryker y Jairo vieron que la invitaba a un restaurante bonito y caro.

Sentía un maldito dolor que le carcomía las entrañas, que lo hacía desear buscar a aquel maldito idiota y romperle la boca... pero se detenía porque hasta él mismo creía que estaba siendo demasiado de su parte tomarse aquella libertad con su representante. Lie tuvo razón al decir que Judy tenía otras personas en las que preocuparse y uno de ellos era justo ese idiota.

_ Maldito cabrón suertudo... -gruño Theron, mientras se acomodaba en su asiento del avión. A su lado, Ferg se volvió hacía él y sonrió, seguro de lo que había escuchado y la razón por la que estuviera de esa manera.

_ Deja ya de atormentarte por eso. –le aconsejo Ferg, mientras sacudía las hojas del periódico que había comprado antes de abordar el avión y veía la sección de entretenimiento, donde habían colocado un artículo de la pelea de Theron contra Gordon.

_ ¿Qué quieres decir? –murmuro Theron, mirando a Ferg con los ojos entrecerrados. Dejando el periódico sobre su regazo, Ferg murmuro con voz baja y en un tono tranquilo solo para no poner a la defensiva a Theron con el siguiente tema.

_ Es claro que Jude te gusta, pero a ella no le interesas. Al menos, no ahora –agrego Ferg, haciendo reír a Theron mientras echaba la cabeza hacía atrás, pegado con el respaldo del sillón-. Si en verdad te interesa, deberías deja de hacer boberías para atraer su atención.

_ Algunas no son boberías.

Ante la réplica de Theron, Ferg sonrió mientras se acariciaba la ceja derecha con la yema de un solo dedo.

_ Pero debes estar de acuerdo conmigo en que estás actuando como un niño inexperto frente a ella –Theron hizo una mueca al mismo tiempo que Ferg sonreía ampliamente-. Te conozco desde hace más de 10 años, Theron, y puedo garantizarte que estás haciendo el papel de payaso frente a Jude. Puedo también asegurarte que podrías conquistarla si dejas que conozca cada una de tus facetas.

_ ¿Quieres decir que debo actuar como un hombre maduro? –no hubo ninguna replica por parte de Ferg más que una simple sonrisa sabionda. Theron respondió a aquello al llevarse las manos al rostro-. ¡Joder, que fastidio es eso!

Ferg se río, mirando como Theron veía enfurruñado hacia los asientos de adelante, donde Judy estaba acompañada del entrenador Lie y de Ryker; en los asientos detrás de Theron y Ferg estaba sentado Jairo, bastante callado y centrado en su tarea de leer un libro de bolsillo popular. Soltando un suspiro profundo, Theron se desabrocho el cinturón y fue directo hacia los asientos que Lie, Ryker y Judy ocupaban.

_ Señor, tiene que sentarse. –le dijo una azafata, en su camino hacia los asientos y él le hizo una señal para señalar al resto de su equipo.

_ Sí, en eso estoy.

La azafata asintió levemente con la cabeza y continuo su camino hacia su propio asiento mientras Theron llegaba al lado de Lie y le daba una palmada leve en el robusto hombro, llamando la atención no solo del entrenador sino también de Judy y de Ryker.

Quédate conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora