Luego de desayunar y prepararse como si fueran a salir, Drina, Judy y Daisy se sentaron en la sala con Hugh, Lucifer y Héctor; Drina hizo la primera llamada, avisando a Desmond de que querían hablar en aquel momento con él y con sus padres. Desmond entonces les pidió que les dieran unos minutos para llegar a la casa, ya que habían salido.
Prometiéndoles que las llamarían en solo 15 minutos, las tres hermanas tomaron la laptop como Desmond se los había pedido para realizar una videollamada en vez de una simple llamada telefónica. Judy había sido la única que comprendía la razón por la que su hermano había pedido aquello y lo sabía porque eso era algo que harían ella, Desmond o su propia madre; después de todo, una de las razones que los hacía chocar constantemente a este trío era porque eran muy parecidos.
Por un segundo, le asalto el miedo de que ninguno de sus padres quisiera hablar con ellas (especialmente, con Judy) o que Desmond solo quisiera una oportunidad para hacerle daño, pero entonces Héctor se le acercó para sentarse en su regazo y Judy inspiro hondo, alejando sus pensamientos negativos de su mente.
_ Mononoke, ¿Cómo se llaman los abuelos? -pregunto, mientras recargaba su cabeza sobre el pecho de Judy.
_ Gloria y Dyami.
_ ¿Qué significa Dayme?
Judy se río de la mala pronunciación de Héctor y se puso a jugar con el cabello del niño mientras replicaba con un tono alegre:
_ Se dice Dayami y significa águila -cuando el niño se quedó en silencio, reflexionando la respuesta en su mente, Judy ladeo la cabeza para mirar el perfil de su sobrino-. ¿Sabías que tu madre te puso tu segundo nombre en honor de tu abuelo?
_ ¿En serio?
Judy asintió con la cabeza mientras sonreía.
_ Claro, pero primero tenían que ponerte un nombre en español para que tu abuela no renegara de ti en un futuro...
_ Judy -advirtió Drina, con un tono medio amenazante-medio bromista. Volviendo su atención hacía Héctor, Drina agregó con una sonrisa-. La abuela es igual a la tía Judy, solo que un poco más malhablada.
_ ¿Y su mamá no la regaña por decir malas palabras? -pregunto Héctor y todos se echaron a reír, ya que aquella pregunta era tan inocente a la vez que divertida.
_ Mi Tati dejó de regañarla cuando mi mamá y yo nos fuimos de la casa de mis abuelos, justo cuando yo tenía 2 años -dándole un beso en el cabello, Drina agregó con tranquilidad-. Y recuerda que mi Tati murió hace un año, cariño.
_ Oh, es cierto -murmuró Héctor y giró entonces sus ojos hacía su madre-. ¿Cuántos años tenía Tati, mamá?
_ Tenía 92 años cuando murió.
Héctor amplió sus ojos, mostrándose sorprendido.
_ ¿Tantos?
_ Es que se cuidaba mucho -retirándole un mechón de cabello que caía sobre sus ojos, Drina replico con un tono reflexivo-. ¿No te acuerdas que te decía que debías comer muchas verduras y frutas para que vivieras tantos años como ella?
Héctor sonrió.
_ No entendía mucho de lo que me decía en español.
Mientras que Daisy y Judy sonrieron mientras negaban con la cabeza, Lucifer y Hugh se rieron con fuerza por su hermano menor, quien solo sonrió con vergüenza al tiempo que veía como su madre alcanzaba su teléfono de la mesita de la sala y se daba cuenta de que Desmond acababa de mandar un mensaje.
_ Bien, ¿Están listos? -inquirió Drina, ingresando en la página de Skype para conectarse finalmente con su hermano-. Desmond dice que ellos ya lo están.
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Quédate conmigo
Chick-LitTrabajar para Theron Degorian no es algo sencillo, sobre todo si contamos con que tiene un sentido del humor muy negro y gusta de gastar bromas pesadas en los peores momentos. Pero Judy (o Jude, como la ha bautizado su jefe) sabe que Theron es un ho...