Prólogo

153 15 7
                                    

Cuidado con las personas, cuando menos lo piensas hay un monstruo entre nosotros. Cada monstruo es diferente, unos se muestran tal y como son, otros temen a que los demás sepan cómo son; y algunos se ocultan entre las personas esperando que apaguen las luces para atacar.

¿Quién va sobrevivir? Aún no se sabe. Solo los capaces de resistir y pelear por su vida tienen posibilidades de vivir. Los débiles mueren primero, y cada uno debe entender que sus miedos solo alimentan los monstruos. No demuestres temor, se fuerte. Ten en cuenta que puedes ser devorado en cualquier momento...

Esas son las palabras que mi padre me decía cada día, hasta que por fin las entendí. Esa maldita noche de luna negra que cambio toda mi vida por completo.

Quiero saber que me paso, yo no era esta cosa horrible. Ni siquiera sé que le sucedió a mi cuerpo. Todo esto es tan extraño.

¿Por qué estoy así?

Pensé mil veces que esto era una pesadilla, pero mi padre estaba ahí, estaba... asustado de... ¿De mí?

Trate de gritar, pero no me salía la voz, cosa que hizo que me frustrara cada vez más, por no poder hacer algo para obtener las respuestas que quiero. Miles de cosas que pasan por mi mente ahora, y no hay quien pueda responderla.

Miro mis manos, pero están llenas de sangre, al igual que mi ropa y mi alrededor. Se me cristalizan los ojos y empiezo a llorar.

No sé qué me está pasando, esto no es algo normal, a ninguna chica le sucede esto, ¿Por qué tiene que ser a mí? Nunca les hice nada malo a las demás, siempre fui amable.

Llegan a mi mente todos esos recuerdos de cosas extrañas que me sucedieron a lo largo del tiempo, las cosas que me pasaron cuando era pequeña y, ahora entiendo el porqué de mi padre tratarme así.

Yo no soy igual a las demás, soy diferente.

Sabía que no era igual a las demás, que yo en el fondo era alguien diferente a las chicas que veía jugar en las calles frente a mi casa, pero nunca pensé que esto es lo que me hace diferente a todas ellas.

Ahora entiendo porque mis padres me mantuvieron encerrada en mi habitación. sabían que algún día esto iba a pasar, sé que trato de protegerme. Pero no lo hizo de la mejor manera, ya que no puedo controlar algo que no se ni que existe.

Vuelvo a mirar a mi alrededor, y solo veo personas sin vida, cuerpos decapitados, algunos con los órganos fuera de su lugar y, sus intestinos esparcidos por todo el lugar; las paredes parecen estar pintadas con la sangre de cada uno de estos cadáveres, dándole un toque más siniestro a la escena.

¿Esto lo hice yo? La verdad no sé. La única persona que veo con vida es a mi padre, de alguna forma eso me alivia. sin embargo, no lo hace por completo; quiero saber que sucedió aquí, pero la voz no sale, no puedo pronunciar nada, por más que intento no sale ningún sonido. Es como si fuera muda y no supiera como hablar aunque intente hacerlo.

- Cálmate, Violet - dice mi padre aún en esa esquina rodeado de cadáveres.

- ¡¿Qué me esta pasando?! - logro gritar al fin, desgarrando mis cuerdas vocales - ¡¿En qué me he convertido?!

Mi padre no dice nada solo me mira aterrado, lo que hace que me asuste más, por no obtener la respuestas que necesito.

Estoy tan aturdida que caigo desplomada. Y no recuerdo nada más de lo que ocurrió aquella noche de luna negra.

 La noche de la luna negraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora