Violet
Abro los ojos escupiendo toda el agua que trague dentro de la piscina y lo primero que ven mis ojos es... A ¿Ethan?
Sí, es Ethan. Su cabello y ojos azules los reconocería en cualquier lugar.
Su rostro es tan hermoso, nunca había visto un ser tan hermoso como este chico, su cabello azul todo mojado al dejar las gotas de agua recorrer su rostro como si quisiera conocer cada parte de este. Y... Esos ojos... Me miran con tanta intensidad que creo que si antes no podía respirar por causa del agua, ahora es porque he olvidado como se respira.
¿Que era respirar?
Siento como alguien a mi lado me toma del rostro, pero ni siquiera giro el rostro para ver de quién se trata ya que creo tener una pequeña guerra de miradas con este chico.
- ¿Estas bien Violet? - escucho que pregunta Eloísa. Sin embargo no le prestó la mínima atención por estar pendiente al chico que no a querido ni siquiera quitarse de enfrente de mí.
- Tengo que irme - dice Ethan sin dejar de mirarme -. Creo que ella está mejor, ¿Cierto?
- Eh... Si, si. Estoy bien - respondo rápidamente.
- Gracias por ayudarla Ethan. No nos habíamos dado cuenta de que se estaba ahogando - le agradece Eloísa -. No te vayas aún iré por unas toallas.
- Creo que se ha mojado mi uniforme - le digo a Eloísa. Y todos me dirigen una mirada de "¿en serio?" - Lo siento.
Dylan me ayuda a levantarme, mientras que Eloísa va por unas toallas para mí y para él chico de cabello azul.
Nos sentamos en las tumbonas, entonces me dispongo a quitarme la chaqueta del uniforme. Todavía no entiendo cómo se me pudo ocurrir entrar en una piscina sin saber nadar y con el uniforme puesto. Creo que es la locura más grande que he hecho y mi padre estará muy enojado por eso. Sin embargo no me importa, fue divertido, aunque casi muero.
Eloísa aparece en mi campo de visión entregándome una toalla, y todos empiezan a reír a carcajadas, incluyendo a Ethan, quien es el primero en reírse.
- ¿De que se ríen todos? - pregunto confusa por sus risas.
- Es que... - Dylan intenta decir algo, solo que la risa no lo deja hablar y cae al piso sosteniendo su estómago.
- ¿Como rayos se te ocurre entrar a la piscina sin saber nadar? - pregunta Eloísa entre risas -. Además, te quedas viendo a Ethan como si fuese un ángel al que hubieses visto.
Siento como mis mejillas arden de la vergüenza, de seguro estoy roja como un tomate. No puedo creer que todos hayan notado que me he quedado embobada ante la belleza del chico de cabello azul.
- ¡Eso no es cierto! - digo a la defensiva cubriendo mi rostro con mis manos, para que nadie pueda ver lo rojo que se ha tornado.
- Oh, créeme todos lo han notado - habla Ethan por segunda vez, con esa voz tan sexy que lo caracteriza.
Sin antes estaba roja ahora he de estar peor, la vergüenza ha llegado al extremo. Y es cierto todos tiene razón ¿Como se me ocurre tirarme a una piscina sin saber nadar?
Todos se están riendo de como me he quedado viendo a Ethan. Y tengo que admitir que esto es lo más vergonzoso que me ha pasado en toda mi vida. Solo que no me arrepiento de haberlo hecho, ver alguien tan hermoso como ha sido ver a Ethan detalladamente, es algo de lo que jamás me arrepentiré.
- Podrían dejar de reírse de mi, por favor - pido incómoda y avergonzada.
Todos hacen un raro intento de calmar sus carcajadas, y cuando digo raro me refiero a que; Eloísa se cubre la cara con las manos - como si eso bastará para que no note que se ríe de mí -. Dylan oculta su cara detrás de Eloísa, mientras que Ethan muerde sus labios para contener las carcajadas, lo que hace que me quedé nuevamente embelesada mirando sus rojos labios...
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La noche de la luna negra
ParanormalViolet es una chica que nunca ha salido de su habitación, y tiene muchos deseos de salir de dicho lugar. Pero, ¿En realidad es lo que necesita? ¿Quiere saber el por qué de estar encerrada? O quizás nada sea lo que parezca.