Trigésimo Quinto Capítulo

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Hola París, no cambies, estas son las noticias, tenemos una información de último momento, malas noticias para todas las fanáticas del gran diseñador Gabriel Agreste, está mañana fue visto en el parque central en los brazos de su asistente, al parecer el señor Agreste encontró el amor y no tiene miedo de mostrárselo a todos.

¡Apaga eso!─ bufo Nathalie enojadisima, Patrick apagó la televisión

Después del espectáculo que dieron en el parque, los reporteros empezaron a correrlos para obtener una exclusiva, por suerte el departamento de Nathalie estaba cerca asique pudieron refugiarse allí, aunque la prensa seguía montando guardia en el exterior.

─¿Vieron las noticias?─ se escucho decir a alguien, era Timmy entrando en la sala ─¡¡Si es cierto!!─ grito al ver a ambos adultos ─Tio Gabriel sabía que lo lograrias─ abraza al hombre

─¿Y tu desde cuándo tienes esas ocurrencias?─ cuestionó Nathalie

─Bueno, desde siempre, pero no me iba  entrometer─ sonríe

─Bueno, me gane su apoyo sin saberlo, espero que mí juego de Té sea suficiente para sobornar a Clara─ comento el diseñador

─Aun duerme, y seguro se va a levantar de muy mal humor─ acotó Patrick

─Es verdad, siempre se levanta temprano, si se pasa de esa hora, es casi un demonio─ río Timmy

¡¡Noo!!─ se escucho gritar desde las habitaciones, la susodicha ya estaba despierta

─Preparense─ susurro Patrick

─Esto no es cierto─ unos pasos se sienten, la pequeña aparece desde el pasillo ─¿Donde está el tío Bruce, por qué la tele dice que tu estás con el?─ señala a Gabriel

─Clara Sancoeur, ¿que significa todo esto?─ bufo Estephania apareciendo desde otro cuarto ─Tu no puedes hablarle así a tus mayores

─Pero mama─ se quejo

─Pero nada, tu tía no es una de tus muñecas a la cual vas a controlar y decidir con quién va a estar, si continuas así volvemos esta tarde a Nueva York y te enviaré al internado con doble escolaridad─ fue severa

─Perdon Estephania, no quiero entrometerme, pero no debes tratarla así─ hablo Gabriel, caminado hasta la pequeña y parándose enfrenté, está rápidamente tomo una de sus piernas y se protegió detrás de ella ─Entiendo que Clara este obnubilada con ese cretino, hizo bien su trabajo pero estoy seguro de que cuando me conozca y conozca mí juego de porcelana exclusivo para tomar el Té, se olvidara de Bruce y seré su preferido

─¿Tienes un juego para tomar el Té?─ pregunto la joven soltando su pierna y viéndolo

─Si, y como no tomo Té, puede ser todo tuyo─ fuerza una sonrisa

─Bienvenido tío Gabriel─ lo abraza

─No puedo creer que de verdad la convenciera con un par de tazas─ dijo Nathalie asombrada

─Bueno, suele pasar mucho tiempo sola, y para entretenerla le compramos un juego de Té para que juegue con sus muñecas, es su obsesión desde entonces─ explico Patrick

─Ya veo. . .

─¿Entonces ustedes ahora están juntos?─ se ánimo a preguntar

─Si─ lo mira

─Me alegra que por fin te decidiste─ pone una de sus manos en su espalda

─Cariño─ dijo Gabriel y miro a Nathalie, está siguió conversando con su hermano ─¡Cariño!─ la volvió a llamar un poco más fuerte, está continuaba sin reaccionar ─Nathalie─ bufo, ahora sí llamo su atención

─Si señor─ replicó como en los viejos tiempos

─No tía, no puedes decirle así, el ya no es tu jefe, es el tío Gabriel─ río Clara ─¿Verdad?─ mira al platinado, quien la sostenía en brazos, este asiente

─Perdon, es la costumbre─ desvía la mirada

─Dile a Gorilla que venga por nosotros─ pidió amablemente, ella saco el celular y le envío un texto a su amigo para que se encargue de la prensa y los lleve de regreso a la mansión ─¿Les molesta si los niños vienen con nosotros?─ pregunto viendo a Patrick

─Claro que no─ se acerca a el ─Eres de la familia ya

─¡Patrick!─ bufo su hermana ─No empieces con tus cosas

─¿Mí hija le puede decir tío y yo no le puedo decir que es de la familia?─ se quejo

Nathalie estuvo a punto de responder pero recibió un mensaje de Gorilla, el mismo con el auto hauyento a toda la prensa, la entrada estaba libre, asique los dos tórtolos junto con los niños, se despidieron y corrieron al vehículo, lo abordaron y este partió a gran velocidad hacia la mansión Agreste.

─Activare el sistema de seguridad─ mencionó Nathalie, bajando del auto dentro del predio de la mansión ─Hay camarógrafos escalando el muro lateral─ comento yendo hasta su escritorio

─Padre volviste─ hablo el modelo bajando las escaleras, fingiendo que no sabía nada

¡Primo Adrien!─ gritaron los dos niños y corrieron a abrazarlo, este correspondio

─Volvi hijo, y gracias a ti ahora soy un hombre nuevo─ este baja junto a los menores y se acerca a el ─Jamas me hubiera animado, sin tus gritos─ lo abraza, los niños se suman y hacen un abrazo grupal

─Espero no sonar celosa, ¿pero que hay de mí?─ se quejo la ejecutiva, los cuatro dejaron de abrazarse y la miraron, luego se acercaron a ella y la encerraron entre sus cuerpos

Una vez se separaron, todos fueron al comedor, Gabriel y Clara dejaron al restó ya que este iría en compañía de la niña a buscar el preciado juego de porcelana que el diseñador una vez compro y que jamas uso ya que no le gusta tomar Té.

─¿Entonces ustedes?─ pregunto Adrien viendo el rostro de la contraria, la cual vigilaba el exterior desde su tableta

─¿Nosotros?─ replicó sin verlo

─¿Están juntos?─ le daba vergüenza preguntar eso

─Si─ lo mira ─¿Te agrada eso o prefieres a alguien más?

─No, jamás podría pensar en otra persona─ sonríe ─Desde siempre pensé que ustedes. . .

─¿Que pensaste?.

─Que estaban juntos. . .tu eres la única a la que papá le hace caso, y de niño creía que eran novios pero con el tiempo me di cuenta que no─ desvía la mirada

─Ahora lo somos. . .

─¿Por eso te fuiste en la mañana?.

─Algo así─ ríe ─Sin saberlo tuvimos nuestra primera discusión─ apaga la tablet ─Ahora que hablamos de esto, cómo fui ascendida, tengo la autoridad para regañarte más de la cuenta, hablemos de tus modales, ¿desde cuándo maldices?

─Fue un impulso lo juro─ rasca su nuca

─Eso esperó.

─Si, jamás volverá a suceder─ la interrumpió

─Deberia castigarte, pero ya no estamos en aquellos tiempos, ahora tengo otro tipo de autoridad asique en vez de hacer eso, voy a sacar algunas cosas de tu agenda─ el chico sonríe ─Siempre y cuando primeras no volver a maldecir

─Lo prometo, eres la mejor─ soltó feliz

─Lo se.

En ese momento Gabriel y Clara regresaron con el juego de Té y la tetera lista para servir, pusieron las tazas, acomodaron los dulces y se sentaron a disfrutar de la infusión.

Miraculous: Aventura en New YorkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora