You are mine!!!

XXXXI

Touya estaba como loco usando su computadora. No encontraba por ningún lado a su amado, incluso había ido a casa de Aizawa a preguntarle donde diablos estaba el menor.

-¡NADA, NO ENCUENTRO NADA!- Grito Touya tirando la computadora al suelo y patenadola, puro enojo era lo que corria por su cuerpo. Creia fertivamente en que el menor se había escapado de su alcance, que lo había hecho a propósito. Cuando se entere de lo que en verdad esta pasando, quemaría todo Japon si debía para hacer pagar a las personas que le hacen daño.

Recibio un mensaje en su celular y con rapidez lo recogio. Un mensaje de su madre.

"¿Puedes venir un momento a mi casa?" Era simple el mensaje, ven a mi casa y ya. Podria ser una pregunta tan sencilla pero para Touya y sus hermanos era un orden indirecta.

"Ire en un momento" Le contesto Touya con rapidez, para después ponerse su chaqueta y sus zapatos.

"Ten mucho cuidado" Otro mensaje de su madre fue recibido a su celular.

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Touya llegaba a la casa de su madre, la tadricional casa japonesa estaba pocamente iluminada ese dia, cosa que solo significaba una cosa. Su padre estaba en casa.

"¿Para que mama me llamo?" Se pregunto Touya entrando a la casa y quitándose los zapatos.

-¿Qué se supne que estes haciendo aquí?- Pregunto su padre desde la cocina viendo como el mayor de sus 4 hijos iba al patio donde, normalmente estaría su madre trabajando en el patio trasero.

-No es tu problema, Enji- Le contesto el pelinegro en un gruñido abriendo la puerta del patio trasero y cerrándola de golpe, dejando a su padre con la palabra en boca.

-Hijo, yo se que soy mala madre, por hacer esto, pero dada la situación no tengo de otra que entregarte esto. Lo encontré en la oficina de tu padre, no vallas a esta ubicación de inmediato, aguarda algunos días, no quiero que salgas lastimado. No le digas a tu padre de esto, debe ser un secreto entre nosotros dos. ¿Ok?- Dijo Rei agarrando a su hijo por la quijada haciendo que este parado derecho.

-¿Qué yo no me debo enterar de que?- Pregunto Enji entrando al patio de un portazo.

-Nada de lo que te debas preocupar, cariño- Contesto Rei agarrando una de los lirios araña rojos con delicadeza para comenzar a arrancar los petalos uno por uno.

-En resumidas palabras, lárgate que no tiene que ver contigo- Dijo Dabi tirándole los petalos en la cara de Enji. El pelirojo bufo y cruzo los brazos.

-Es mi casa, yo mando aquí, si yo quiero quedarme aquí, me quedo aquí, tu te iras y nos dejaras en paz- Dijo Enji señalando al pelinegro.

-En algo coincidimos, nos veremos luego madre- Dijo Touya abrazando a la albina y saliendo con rapidez.

-No entiendo porque salio asi, si lo criamos tan bien- Gruño Enji sentándose cerca de su esposa.

"Uuy si, como tu eres el mejor padre del mundo" Penso Rei rodando los ojos internamente.

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Habian pasado ya casi 4 dias desde el encuentro de Touya y Rei, el oji celeste no dejaba de pensar en el papel que le había entregado su madre. Era muy simple pero al mismo tiempo complicado, una dirección. No sabia si era una casa, un edificio, un cementerio, nada, no tenia ni una sola idea de que era.

Miro su celular y se decidio en llamar en su hermana menor.

"Fuyumi, ¿me puedes hacer un favor?" Pregunto Touya atraves del celular.

"Claro que si, ¿Qué necesitas que haga?" Pregunto Fuyumi, se podía escuchar el rugir de los motores en la carretera, asi que para Touya eso era un punto a su favor.

"¿Puedes chequear esta dirección. Es xxx" Touya comenzó a dictar la dirección para su hermana menor.

"Voy a ir en cuanto termien en el trabajo" Le dijo Fuyumi.

"Esta bien, ten mucho cuidado en el trabajo" Dijo Touya antes de enganchar la llamada. Ahora solo debía esperar la llamada de su hermana para saber que diablos se suponía que era la dirección.

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Fuyumi decidio decirle que era la dirección cara a cara con Touya. No sabia explicarle lo que había visto. Tampoco sabía como debía decirle que su amado era prostituido.

-¿Y? ¿Qué encontraste?- Pregunto Touya entregándole una taza con te verde a la albina.

-Touya quiero que te sientes y tomes esta noticia con calma- Dijo Fuyumi agarrando la taza, Touya pudo notar que la albina tenia un leve temblar en sus manos.

-¿Qué tan seria es la noticia como para que me tenga que sentar y tu estes temblando?- Pregunto Touya sentándose en uno de los sillones de cuero.

-Son 2 cosas, son 1 mala y 1 buena. La buena, es que la dirección que me diste es donde esta Tomura- Fuyumi noto que los ojos de Touya brillaban mas de lo normal.

-La segunda es, que lo están.......a Tomura lo están....- Fuyumi no encontraba como decirle a su hermano mayor la ultima noticia.

-Ya di de una vez que le pasa a Tomura- Ordeno el ojiceleste dando un golpe en el mueble.

-A TOMURA LO ESTAN PROSITUYENDO- Grito Fuyumi.

-¿Qué?-