happiness is a butterfly [ym]

-Capitulo veinte-

La hora en el reloj de pared marcaba ya las diez de la mañana, miro a su lado izquierdo, justo detrás de una pared de madera, había una mesa rectangular de madera, con tazas y café, su boca se hizo agua ante el olor que había en la clínica, ya que una señora se había preparado uno.

---Si quieres tú también puedes prepararte uno, y con el también puedes entrar a la consulta.---Dijo la recepcionista al ver al chico mirar hacia ese lugar

El la miro y asintió, musito un pequeño gracias a la mujer, un café no le vendría mal, más para poder despertar y estar con un poco más de energía durante el día. Se levantó y fue al mesón donde estaban las cosas. Vio el hervidor eléctrico con un poco de agua caliente, y se preparó su café.

---¿Park Jimin?.

Se volteo y vio a una mujer de aproximadamente treinta años o menos parada mirándolo.

---¡Oh! Bien, te espero adentro.---Dijo en un tono jovial, entrando a la habitación y dejando la puerta entreabierta.

Se preparó su café de manera más rápido y entro a la habitación. El la observo mientras se iba adentrando, era pequeña y tenía un sillón plomo de aproximadamente dos metros, y delate de él había un escritorio donde se encontraba ella.

---Siéntese Jimin.---Le dijo mientras tenía un cuaderno en su mano y sacaba un bolígrafo.

El hizo caso y acomodo su café entre sus manos.

---Bien.---Dijo ella ahora mirándolo.---Me presento, soy la psicóloga chungha y antes de comenzar quiero decirte que todo lo que hablaremos en esta sesión se queda en estas cuatro paredes, solo me veré obligada a meter a terceros si veo que tu vida está en peligro, ¿Bien?.

Jimin asintió varias veces.

---Cuénteme Jimin ¿Qué es lo que te trae por aquí?.

¿Qué es lo que le traía por aquí? Si bien sabe que necesita ayuda psicológica urgente, la idea se veía mucho más atractiva hace dos días, cuando estaba empezando a tener ataques de pánico hace ya meses, o donde se encontraba en su habitación aterrado de que le pasase algo, viendo sombras a través de la habitación haciendo que el miedo que tenía produjera que ni siquiera pudiese respirar bien. Pero..., ahora se sentía tonto por estar allí.

El la miro y no supo que decir.

Ella lo miro y anoto algo en su cuaderno, para mirarlo y decir;

---¿Cuántos años tienes Jimin?.---Le pregunto ella, con una voz tranquila y suave, lo miro incitándolo a hablar.

---Estoy por cumplir veintiuno.

Ella asintió.

---¿Y estudias?.

---Estudio psicología en la Universidad Krynn.

Ella elevo sus cejas y se formó una diminuta sonrisa de labios en su rostro.

---Seremos colegas en un futuro no muy lejano.---Vio al rubio asentir y beber de su café, ella sonrió y prosiguió.---¿Con quién vives Jimin?.

---Con mi madre y mi padrastro.

---¿Y su relación es buena?.

Jimin miro hacia un lado y se encogió en su asiento.

---No muy buena.---Musito, audible para ella.

La vio escribir en su libreta y pregunto.---¿Por qué "no muy buena?.---Ella espero unos segundos una respuesta, pero el silencio y la mirada del chico que no iba dirigida a ella, le hizo saber que él no hablaría.---Está bien, y ¿Cómo se llaman ellos Jimin?.