-Capitulo veinticinco-

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El timbre resonó en todo el establecimiento, dando hora del almuerzo, se levantó de su asiento con flojera y cuando ya estaba afuera camino hacia la Biblioteca.

---¡Hey Jimin!.---Volteo encontrándose con Hoseok.---Salí antes y te vine a buscar para ir a comer, aunque tú no comes pero estas ahí y eso es lo importante.

Le gustaba el, era jovial y siempre estaba alegre, sus ojos siempre tenían un lindo brillo y se veía que él no fingía con las personas, lo notaba por el brillo en sus ojos y el brillo de su piel.

---No puedo, tengo cosas que hacer.---Le dijo acomodando su abrigo.

---¿Puedo acompañarte? Para que no lo hagas solo.

El le sonrio sinceramente, un calorcito se formo en su pecho.

---Alguien me va a enseñar matemáticas, tengo examen el miércoles y tengo que estudiar mucho para poder aprobar.

Hoseok comprendió.---¿Quién te va a enseñar?.

El pelirrojo es muy curioso, pero a él no le molestaba, aun así él no quería decirle a nadie que ese "alguien" no era nada más y nada menos que Min Yoongi.

---Por favor no me obligues a decirte.

Este lo miro varios segundos, para el Jimin era un misterio, siempre estaba triste, aunque riera siempre estaba apagado, antes no tan así.

Ahora lo veía como un cuerpo sin alma, que en cualquier momento se rompería. Y eso a él le dolía, aunque estén empezando hablar hace poco.

---Está bien, pero por favor como aunque sea solo un poco.---Este sonrió roto, como todas las veces que lo hace y sabía que el rubio no se percataba de eso, busco en su mochila y saco mini sándwich con jamón y queso, siempre tiene uno en la mochila ya que le daba mucha hambre a esa hora de las doce.---Ten, más te vale que te lo comas todo.

El asintió y Hoseok le revolvió el cabello en forma cariñosa.---Nos vemos Jiminie.---Dijo para irse.

El rubio solo se despidió de la mano para ir hacia la biblioteca, tenían una hora justa hoy, así que dio marcha rápida a ella.

Lo vio a diferencia de la otra vez, se encontraba e mirando a un punto fijo, el solo se sentó a su lado y empezó a sacar sus cosas.

---Hola.---Lo saludo Jimin, dejando sus cosas en la mesa.

---Hola.---Se lo devolvió con la voz ronca y siguiendo mirando ese punto.

El rubio lo miro, sus labios igual de rosados que siempre.---¿Estas bien?.

El asintió aun ido.---Todo perfecto.

No iba a entrometerse en algo que no era de su incumbencia, ya no más, así que le dijo "Empecemos" y ambos se sumergieron en guías y apuntes. Hasta que en un punto Yoongi dejo de hablar, y Jimin centro su vista en algo que había evitado en este rato sin querer.

---¿Hoseok y tú, son muy cercanos?.

Jimin dejo de ver sus labios para mirar sus ojos. Yoongi después de pasar un rato con el rubio le empezó a dar lo mismo que este se quedara pegado mirando sus labios.

---Lo considero mi amigo, así que creo que sí.

Sus hombros se tensaron, y se mordió el labio, en sus ojos y rostro se podía ver impotencia ¿Por qué? Él no lo sabe, y si era sincero con el mismo, aunque sea una vez en la vida. Sí, siempre le daba curiosidad que es lo que pasase en la cabeza sabia de Yoongi.

---¿Me odia?.

Esa pregunta lo tomo de sorpresa, se mordió el labio tratándose de que decir, la situación de Hoseok con el pelinegro es algo delicado, no solo para el sino también para muchas otras personas. Y es que lo que paso años atrás fue el tema de hablar durante muchos meses, incluso ahora.

happiness is a butterfly [ym]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora