El destino nos trajo aquí

Capítulo 37 - ¿Sorpresa? Pt2

Narra Wesley:

- Pier, que alegría volver a verte – le di un fuerte abrazo

- Hola Wesley, digo lo mismo. Que bueno verlos a todos. Señor Stone – se fue a saludar a Bob.

- Ina – también la abrace – extraño tus brownies.

- Hola Wesley, te deje muchos en casa – empezamos a reírnos.

Hace casi una hora que habíamos aterrizado en París, Bob quería que estuviésemos ese fin de semana por el cumpleaños de Sarah, cada vez que lo recordaba mi corazón no paraba de latir con tanta fuerza y rapidez. La extrañaba demasiado. No sabía absolutamente nada de ella hasta que Bob me dijo que me asignaría a París a manejar la empresa de telecomunicaciones. Estaba aterrado, no quería separarme de mi hijo demasiado, pero después de un acuerdo con Queen podría traerlo a vivir conmigo si todo se daba bien.

Había pasado mucho tiempo sin saber lo que era sentir emoción por ver a alguien que es parte de tu vida, a quién amas con locura, no sabía cómo sentirme sabiendo que la vería aún después de todo lo que pasó. Sentía ese nudo en el estómago que no me dejaba si quiera dormir lo suficiente de los nervios, de la emoción, de las expectativas o que se yo. Además de mis emociones le teníamos una sorpresa, todos nos íbamos a Paris, y cuando decía todos, hablaba de París con su hija Sena, Brandon, Haley y su pequeña Hanna. Todos íbamos a celebrar su cumpleaños como una familia.

Una vez en el apartamento el olor de ella me invadió en seguida. Seguía usando ese perfume cítrico que me hacía perder la cabeza, todo estaba un poco cambiado, más espacioso, además tenía muchos toques de ella, como la mesita frente a la televisión con fotos de su familia y de personas que no conocía pero que asumía eran conocidos de la empresa, de hecho, hasta el imbécil de Ian estaba en la foto, no entendía. Primero, ¿Por qué estaría en la foto? Y segundo, ¿Por qué estaba junto a ella con su brazo sobre sus hombros? Algo estaba raro, pero no quería preguntar a Bob.

Entre Brandon y Haley fueron a hacer las compras mientras los padres se encargaban de los niños, por suerte eran tranquilos y después de comer tomaban siestas, el jetlag los había dejado cansados así que aprovechamos eso para terminar de dejar todo presentable para ella. Se suponía que tendría que estar en casa cerca de las 8 de la noche, puesto que Pain le había mentido diciendo que su auto estaba sin reparar aún, pero la verdad era solo para hacerlo mas dramático.

Cerca de las 9 de la noche, Bob quería llamar a Sarah, pero iba a arruinar la sorpresa, quiso llamar a Cecil pero caía el contestador, decidieron mejor esperar a que ella viniera. La comida estaba servida así comimos un poco, tomamos unos tragos, los niños ya se habían despertado y vuelto a dormir. Se hacían un poco más de las 11 de la noche y estábamos preocupados. Le dije a Bob si no llegaba a media noche iríamos a por ella a la empresa y el accedió.

Con un poco de comida en nuestros estómagos, unos tragos demás y las luces apagadas nos quedamos dormidos en la sala. Un ruido me hizo moverme un poco, pero estaba tan cansado que pensé que me lo imaginaba, vi la pequeña luz de la cocina encendida así que me obligué a despertar, cuando oí el vaso romperse desperté por completo y lo que vi no podía creerlo.

Una cosa es que te duela tener que separarte de la persona que amas por las razones que sea, pero peor es el dolor que sientes de ver a la persona que amas en los brazos de otro, tocándola, besándola, desnudándola, viendo cómo se estremece bajo su tacto y que lo disfrutara. Me dolió incluso mucho más verla así, siendo disfrutada por otro, que verla llorar cuando se separó de mí. O como cuando me envió aquel mensaje e ignoro todos los míos. No podía creer como se veía ahí sobre la mesa de la cocina, siendo de otro, y ese otro una persona que no me agradaba para nada.