Capítulo 20 - Un candado más.

59 2 0
                                    

- Esa noche tenía muchas cosas en la cabeza; me preguntaba ¿Qué le ocurre? ¿Porqué cree que soy así? ¿Cree que voy a disculparlo así nada más? Oh. Dios mio... quería matarte - Wes tenía un buen rato riéndose de mí mientras le contaba todo lo que había sentido el día de mi cumpleaños.

- Oye, no quería que las cosas resultaran como resultaron. Solo no pensé como hacerlo. Solo lo hice - se defendió él.

- Zahc cenó en mi casa ese día - me miró - Quería que mi Mamá y Brandon lo conocieran. Les encantó...

- ¿Y a ti? ¿te encantaba? - me lo pensé unos segundos ¿Qué era lo que sentía por Zahc? Negué con la cabeza.

- No me encantaba, pero tenía cosas, muchas cosas que de verdad me gustaban, incluso me encantaban.

- ¿Cómo cuáles? - ¿Porqué estaba tan interesado en saber?

- No necesitas saber... - abrió los ojos como platos - Todo lo que necesito está frente a mí ahora - sonrió

- No me gustó que te gritara esa vez por teléfono - miró a otro lugar - Yo le hubiese partido la boca de un puñetazo.

- ¡Ehh! - toqué su brazo - Olvídalo... a mi tampoco me gusto, pero asumo que aún no conocía su verdadero carácter.

- Es un idiota...

- Amo a los idiotas...

- ¿Qué dices? ¿Qué lo amas? - se estaba alarmando demasiado. Empecé a reír

- Te amo a ti porque eres un idiota - hizo una mueca rara con los labios - Deja de jugar con tus labios porque me los quiero comer - me sonrió.

- No me provoques Sarah... - suspiro con fuerza por mi comentario.

- No lo hago - mordí mi labio inferior y le guiñé un ojo.

- ¡Uff! Basta - se levantó del suelo y caminó a la cocina. Yo empecé a reír a carcajadas.

- ¡Aburrido! - grité mirándolo. Su rostro cambió de inmediato. Como si hubiese dicho algo malo - ¿Pasa algo? - me levanté y caminé hacia él.

- No te va a gustar...

- ¿Qué ocurre? - suspiró

- Queen solía decirme eso cuándo no quería tener sexo con ella - desapareció todo rastro de empatía, de bromas.

- ¿Queen fue más que sexo para ti? - él se tenso de inmediato y entonces lo supe.

- Cuándo pasas mucho tiempo con una persona te acostumbras a ella; la aprecias, le das más de ti que solo sexo - empecé a ponerme nerviosa. Una parte de mí quería saber mas y la otra lo rechazaba totalmente.

- ¿La amas? - pregunté en un susurro, un poco desanimada.

- Ella me ayudo a llegar lejos. Compartíamos muchas cosas... - hizo una pausa - la amo - mi corazón dolió un poco - y el significado de amar es distinto de acuerdo a la persona con la que estas - le miré - la amo porque fue una persona maravillosa mientras estaba conmigo - puso una mano sobre mi mejilla - pero no la amo como te amo a ti. Mi amor por ti es inexplicable, es de esos que te dejan sin aliento con solo una muestra de afecto, es querer pasar el día junto a ti porque no puedo estar sin ti - sonreí un poco - la amo como alguien que es importante para mí, incluso por agradecimiento porque me ayudó mucho 

- Cuándo volvamos debes hablar con ella... ahora que estamos juntos me va a odiar mas - mordí la uña de mi dedo pulgar algo nerviosa.

- Ella es mi amiga a pesar de todo. Debería entenderlo... igual, ella fue quién me engaño mucho antes de que estuviera contigo. Seré yo quién la evada de cualquier modo de quererme explicar.

El destino nos trajo aquíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora