43.El camino triunfal de las rosas II

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Fuego, humo, escombros y cadáveres describían el primer piso de la Mansión Halliwell de Chicago. Las tropas de James buscaron venganza, y en multitud, consiguieron hacer lo que la Fuente de Todo Mal no pudo, acabar con la mayoría de los hijos de las Embrujadas. James se despertó con un gran dolor físico, tumbado en los escalones, y se percató de que en la espalda, su camisa estaba íntegramente quemada en forma de una bola. Y se acordó de todo, intentó salvar, sin éxito, a su mujer de una bola de plasma.

JARED: ¡¡Oh, no!! ¡Mierda, mierda, mierda!

Él se levantó, nervioso y buscó entre los escombros a su mujer, por suerte, Melinda se hallaba cerca de él. Con lágrimas en los ojos, trató de despertarla, la besó con todas sus ganas, la acarició e incluso la abofeteó para que despertara, pero sin éxito. Estaba muerta. Aunque le costó tomar la iniciativa, dejó el frío cuerpo de su mujer en el suelo, donde estaba antes, y fue a buscar al resto de su familia. Sólo una persona de las que buscaba técnicamente estaba muerta pero podría ayudarle, Owen, el luz blanca de la familia. En su búsqueda por el desastroso primer piso, encontró los cuerpos sin vida de Eleanor, Chris y Patricia.

JARED: ¡¡Owen, Owen!!

Entre unas sillas y más escombros, el brujo por fin descubrio a Owen, quien estaba siendo abrazado por su novia Phoebe. Jared intentó despertar a Phoebe, que como el resto, estaba muerta. Su decisión era la de despertar a Owen, inconsciente, y tras varios puñetazos y bofetadas, consiguió despertarse, tosiendo con mucha fuerza.

OWEN: ¿Qué...? (Dijo con un aspecto demacrado, lleno de quemaduras)
JARED: Mejor no preguntes. ¿Cómo puede ser que perdieras el conocimiento, si después de todo, estás muerto?
OWEN: Mejor tampoco preguntes... (vio a Phoebe) ¡Oh, no! (se entristeció)
JARED: Está muerta... no pretendas sanarla, todos los intentos serán en vano.
OWEN: ¿Cómo es posible que tú... estés vivo? ¿Cómo has podido sobrevivir? ¿Acaso eres inmortal? (dijo irónico, y Jared, serio, asintió). ¿No es coña?
JARED: No hay tiempo para explicártelo todo. No ahora, no es el momento. ¡Escucha, ayúdame a encontrar El Libro de Las Sombras!
OWEN: ¿Pretendes viajar al pasado y arreglar esto?
JARED: ¡Claro, no me pienso quedar de brazos cruzados!
OWEN: Recuerdo que Chris lo orbitó a sus brazos. No andará muy lejos.
JARED: ¡Con lo bien que nos vendría ahora la telekinesis orbitacional para llamar al libro!

Los dos se acercaron al cadáver de Chris, quien fue el último en tener el tan ansiado libro, y a partir de allí, los dos no pararon en la búsqueda.

JARED: ¡¡Oh, se está oscureciendo, así es imposible encontrarlo!!
OWEN: Los luces blancas tenemos soluciones para todo (alzó sus manos, accionando su poder de fotokinesis, capacidad de manipular las luces, y levitaron, encima de ellos dos, unos potentes destellos azules)
JARED: Muchas gracias. Debemos darnos prisa antes de que algún mortal se entere. El infierno se desataría si descubrieran el secreto de la familia Halliwell...
OWEN: ¡Jared, Jared, lo he encontrado! (con sus manos apartó unos pequeños escombros) ¡Maldito libro, cuánto pesa! (se acercó a la portada y sopló, estaba lleno de cenizas)
JARED: ¡¡Bien, bien!! (dijo acercándose) Antes en la Escuela de Magia he visto cómo hay una página para viajar al pasado, nos vendría muy bien.

Jared cogió el libro y lo dejó en una silla que no había sido destrozada por los brutales demonios. Él empezó a mirar las hojas, pero no encontraba nada

OWEN: ¿Y bien?
JARED: Nada, parece como si el libro se hubiera olvidado de nosotros... (pasó una hoja, se quedó pensativo) ¡¡Juraría que aquí se encontraba el hechizo de "Para viajar al pasado"!!
OWEN: Si no estoy equivocado, el libro fue escrito por brujas menos poderosas que la familia Halliwell actual ¿no?
JARED: Sí. ¿Qué quieres decir con todo esto?
OWEN: Quizás no sea elemental ni prioritario viajar unos minutos atrás en el pasado para arreglar esto.
JARED: No... ¿Entonces cómo se va a arreglar esto? ¡No hay poder suficiente para resucitarlos a todos! (comenzó a perder los nervios) ¡¡Sabía que esto era una locura!!
OWEN: Me quieren decir algo... (miró al cielo mientras en su cabeza sonaban campanadas, después asintió)... ¿Jared?...
JARED: Díme (se encontraba algo frustrado) ¿Has encontrado una manera?
OWEN: ¿Tú no eres poseedor de conceder deseos y crear ilusiones?
JARED: Sí... (dijo algo dolido), pero no quiero usarlo. Siempre que lo uso es peor el remedio que la enfermedad... ¿Por qué te crees que aún no tengo en mis brazos a Bianca? Sería muy fácil que quisiera "tener a mi hija conmigo", pero las represalias luego serían peores.

Tres veces tres. - EncantadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora