31. Muerte.

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Ángeles, Hombres Lobo y Cazadores entraron corriendo. Todos los presentes habían ido con la clara idea de salvar a Stiles Stilinski... Ojalá hubieran llegado antes.

-¡Stiles!- Gritó Dean tomando entre sus brazos el cuerpo del castaño.

Los demás se quedaron petrificados ante la imagen, el querido Stiles, el miembro más importante de la manda, luchaba por su vida en aquella cabaña abandonada en medio de un enorme charco de sangre, no llevaba su típica camisa de cuadros o sudadera lo que dejaba ver todas las mordidas que había recibido tanto en su torso como en sus brazos, los signos de batalla eran evidentes y eso hacía sentir peor a todos.

-D-Dean...- Jadeó Stiles al verse por fin entre los brazos del rubio.

-Shhhh... tranquilo, no hables.- Decía el mayor Winchester notando de pronto que la sangre en el suelo no eran restos de batalla, sino que provenía de una herida en el costado de Stiles, habían perforado su torso y se desangraba con rapidez.- ¡Cas!- El ángel mencionado se acercó rápido y puso su mano sobre la herida.

-Dean... No puedo curarlo.- Dijo el de gabardina con pesar.- No sé que ocurre.

-¿De qué rayos hablas?- Inquirió molesto el rubio pero los jadeos de Stiles le hicieron volver a centrar su atención a él.

-Y-yo... Me defen... defendí.- Aseguró el castaño comenzando a temblar.- Como... me enseñas-te...

Dean no fue consciente de que lloraba hasta que la mano de Stiles limpió una lágrima en su mejilla.

-Stiles, hermano. Puedo morderte.- Ofreció Scott acercándose y absorbiendo el dolor se su amigo.- No es el fin aún...

Stiles sonrió y negó.

-No... servirá. Magia.- La voz del castaño era más pausada de lo que jamás alguno le hubiera escuchado hablar, respiraba con demasiada dificultad y el dolor ya había desaparecido.- Chuck...

-Lo llamamos pero...- Interrumpió Dean pero Stiles volvió a negar.

-Él... aquí... estuvo aquí.

-¿Qué?- Dijeron todos.

-Chuck malo...- Terminó por decir el castaño mientras su boca se llenaba de sangre. Stiles reunió sus últimas fuerzas, acarició por última vez el rostro de Dean y miró por última vez sus hermosos ojos, aquellos que ese día, a causa de las lágrimas, estaban más brillantes que nunca.- T-Te amo Dean...

-Y yo a ti Stiles.- Respondió el cazador aferrándose al delgado cuerpo del chico gritando de dolor cuando la mano de este se deslizó hasta caer al suelo.

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Escasos minutos después, el sheriff Stilinski y el resto de la manada ha llegado a la escena, nadie sabe como contarles lo sucedido.

-¿Cómo está Theo?- Inquiere Scott a penas ve a Liam, se nota que ha estado llorando a causa de sus ojos rojos, el beta niega mientras suelta un sollozo y solo eso necesita el alfa para saber que ese día a perdido dos miembros de su manada.

-¿Qué es lo que sucede?- Pregunta finalmente el sheriff cuando nadie parece querer hablar, se imagina que tal vez su hijo y Dean huyeron para casarse porque no los ve en ninguna parte.- ¿Sucede algo con Stiles?- Vuelve a preguntar ahora con un toque cómico porque parece que en realidad todo gira en torno a su hijito.

-En realidad si, y no sé como decírselo.- Habla Sam, ningún otro presente se siente capaz de decir la verdad.- Estábamos en un caso sobre Vampiros.

-Si, lo sé, algo de eso me dijo Stiles.- Asiente el sheriff temiendo que ahora su hijo sea un Vampiro, faltaría mucho a la escuela ahora.

-Si bueno, algo salió mal... Muy mal, y cuando Theo Raeken y Stiles estaban en el bunker fueron atacados.- Sigue hablando Sam sintiendo que el nudo de su garganta se hace cada vez mas grande y que las lagrimas lo van a delatar antes de que pueda decir la noticia con el mayor tacto posible.- Stiles escapó hasta aquí, pero los vampiros lograron atraparlo y...- Sam se quiebra y no puede seguir hablando.

TENEBRIS || STEANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora