25. T.. asm.. mo Liam.

1.9K 187 17
                                    

-Lleven a Theo con Deaton.- Ordenó Derek a penas llegaron. Liam se subió a su coche con Theo y Hayden, y se marchó sin decir nada.

-Creo que todos deberían irse a casa.- Dijo Stiles, aun siendo sostenido por Dean.- Hablaremos mañana.

Uno a uno, la manada se fue yendo a sus respectivas casas, sólo quedaban Stiles, los Winchester y Derek.

-¿Tu estás bien?- Preguntó el lobo gruñón.

-Yo estoy perfecto.- Afirmó Stiles abrazándose a Dean.- Vete a casa Derek.

El lobo se marchó con aire derrotado, pero aún le faltaba por jugar un par de cartas.

-Supongo que no podré conducir de vuelta.- Comentó Stiles.

-Supones bien.- Rió Dean lanzandole las llaves del auto a Sam.- Hora de irse.

Los tres subieron al Impala y en el corto trayecto, Stiles, relató su aventura vampírica mientras trataba de recuperar sus fuerzas.

-Veinte Vampiros tu solo, estoy orgulloso.- Festejó Dean con una sonrisa.- Me alegra que eso se solucionara rápido.

-Imagino que tendré que decirle a Bobby que regrese a Sioux Falls.- Mencionó Sam estacionando en la casa de Stiles.

-¿Qué? No.- Replicó el castaño.- Quiero verlo, Debes dejar que venga. Podemos enseñarle el búnker y haremos una cena especial...

Los hermanos asintieron con una sonrisa.

-Que así sea entonces.- Respondió el rubio girándose a su pareja.- ¿Puedes caminar o prefieres que te cargue?

Stiles casi respondía a favor de ser tomado entre los fuertes brazos de su novio. Casi. Pero tenía algo mas en mente.

-No, yo puedo. Sólo tómame del brazo, aún me siento mareado.- En silencio bajaron  del auto y entraron a la casa. Tan pronto como cruzaron el umbral de la puerta Sam se proclamó infinitamente cansado y corrió al cuarto de invitados.

Por otro lado, Dean ayudó a Stiles a subir a su cuarto. Sosteniéndolo de la mano para darle fuerza, tomándolo de la cadera para que no cayera, pegándolo a su cuerpo para que no se tambaleara. Todo eso porque Stiles aún estaba muuuy mareado, lo suficiente para necesitar de la cercanía de Dean, y sus cuidados, pero no tanto como para necesitar eso de alguien más.

-Bien, descansa.- Dijo el mayor en cuanto el castaño estuvo sentado en su cama.

-Espera.- Llamó Stiles, tomándole de la mano.- Necesito que me ayudes a ponerme la pijama.

Dean no había alcanzado a responder cuando Stiles ya hacia el intento de quitarse la camisa, dejándola atorada en su cabeza y poniendo a escrutinio total su torso desnudo. El cazador pasó saliva con dificultad y finalmente ayudó al mas joven a sacarse por completo la prenda; con el movimiento el cabello de Stiles quedó todo despeinado. Dean tuvo que apartar la mirada a otro lado y pensar en todas las criaturas que había cazado en su vida para evitar que la erótica imagen que su cerebro estaba maquinando de Stiles, despeinado, jadeando y desnudo, comenzara a afectarle.

El rubio se giró por completo cuando su pareja comenzó a sacarse los pantalones.

-¿D-Dónde esta tu pijama?- Inquirió el Winchester, nervioso sin saber de qué.

-Yo no uso pijama, al menos, No cuando hace calor.

-Está haciendo un poco de frío si me lo preguntas.- Dijo Dean buscando lo mas parecido a un pijama entre las ropas del piso cercano a la cama.

-Tal vez tengas razón.- Murmuró Sgiles colocándose frente a Dean con nada mas que su ropa interior, un apretado bóxer.- Deberías quedarte conmigo para que ninguno pase frío.

TENEBRIS || STEANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora