5. Confidencias.

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-Bien, a Dean le toca lavar los platos.- Dijo Sam sonriendo a su hermano.

-¿De que hablas? Yo los lavé la última vez.- Gruñó Dean frunciendo el ceño. Sam respondió una negativa y pronto los hermanos se encontraron en una pelea de quien lavaría los platos.

-Cállense, los lavaré yo, pero mañana ustedes prepararán el desayuno.- Dijo Bobby levantándose y llevando con él los platos vacíos.- ¡Y nada de comida rápida, Dean!

-¡Maldición Bobby!- Gritó Dean su plan de desayuno se había ido al retrete.

-¿Y ahora?- Preguntó Stiles mirando a los hermanos.

-Puedes prepararte para dormir.- Sugirió Dean.

-No tengo sueño.- Dijo Stiles sacando su teléfono y notando las diecisiete llamadas pérdidas de Scott.

-¿Algo interesante?- Preguntó Sam cuando Stiles comenzó a teclear en su teléfono.

-Scott me llamó. Debe estar preocupado.- Respondió Stiles encogiéndose de hombros.- ¿Porqué no me hablan de ustedes?

-Ustedes hablen, iré a revisar y luego a dormir.- Dijo Sam sonriendo maliciosamente a su hermano y saliendo de la habitación cerrando la puerta.

-¿Y bien?- Habló Stiles sonriendo a Dean.

-¿Qué quieres saber?- Preguntó Dean acercando su silla para sentarse frente a Stiles.

-¿Porqué son solo tu y Sam?- Preguntó Stiles.

-Cuando Sammy tenía unos meses de nacido nuestra madre murió. Fue un demonio.- Explicó Dean.- Desde ahí comenzamos en este mundo, papá comenzó a buscar a ese demonio por cielo, mar y tierra mientras que yo trate de cuidar lo mas que podía a Sam.

-Lo haz hecho bien.- Dijo Stiles poniendo su mano en el hombro de Dean.- Por lo que se ve sigue vivito y coleando.

-Por poco...- Susurró Dean mirando al suelo.- Sin él yo no sabría ni que hacer con mi vida. Literalmente, porque hubo una vez, el demonio que mató a mi madre quería a Sam para que fuera quien guiara a un ejército del infierno para que masacraran al mundo, había otros elegidos para el puesto, uno a uno fueron pereciendo hasta que solo quedaron Sam y un chico. Cuando yo llegué a donde estaban era muy tarde.

-¿Hablas de...?

-Si.- Respondió Dean interrumpiendo a Stiles.- El chico clavo un cuchillo en la espalda de Sam.- Antes de continuar Dean limpió una lágrima que resbalaba por su mejilla.- Un par de días después de que Sam murió, vendí mi alma para traerlo de vuelta.

-¿Fuiste al infierno?- Preguntó Stiles completamente asombrado.

-Un año después de recuperar a Sam, lo normal hubieran sido diez años pero conmigo no hubo un trato común.- Dijo Dean con una sonrisa.- Luego un ángel me sacó del infierno.

-¡Vaya! - Exclamó Stiles.- Eres muy valiente para hacer algo así.
-Él lo haría por mi.- Contesto Dean.- Ahora tu debes contarme algo.

-Ya les conté todo.- Sonrió Stiles.

-Sólo pasaron dos horas, no puede ser todo.- Animó Dean.

-Bueno.- Stiles suspiró.- Cuando era pequeño mi mamá fue a parar a un hospital psiquiátrico, tenía demencia frontotemporal.

-¿Qué es?

-Áreas del cerebro que se encogen.- Respondió Stiles.- Una vez ella y mi padre estaban hablando o eso parecía. Ella le susurraba a él que me alejara de ella por que decía que yo iba a matarla. Un mes después murió frente a mi.

-Lo lamento.- Dijo Dean.- Te contaré algo gracioso porque el ambiente comienza a estar muy tenso.

-De acuerdo.- Sonrió Stiles parpadeando varias veces para ocultar las lágrimas que amenazaban salir.

-Muchas veces, viajando a diferentes lugares por trabajos, Sam y yo acostumbramos hospedarnos en hoteles y eso.- Stiles asintió embelesado con la voz de Dean.- Bueno, la mitad de las veces que lo hemos hecho. Creen que Sam y yo somos pareja.

1... 2... 3... ¡Prack! Stiles rompió en risas escandalosas deleitando a Dean.

-¿Cómo alguien puede creer que Sam es gay?- Preguntó Stiles controlando sus risas.

-¿De que hablas? Su cabello es como de muñeca.- Nuevamente Stiles rió sin parar.

-Hubiera pagado por ver algo así.- Comentó Stiles sujetando su estómago.- Debió ser divertido...

-Lo fue.- Sonrió Dean.- ¿Y... Tu alguna vez has pasado por algo así?

-Una vez.- Comenzó Stiles.- Estaban ocurriendo homicidios en el pueblo, todos eran vírgenes y yo temí por mi seguridad entonces grité que debía tener sexo en ese momento para no morir. Un amigo mío, Danny, se ofreció.

-¡Oh Dios!- Exclamó Dean rompiendo en carcajadas.- Era obvio porque se ofreció.

-¿Si?- Preguntó Stiles no sabiendo si confiar en el criterio de Dean.

-Por supuesto, eres muy guapo, divertido, inteligente y muy sexy.- Confirmó Dean queriendo adoptar su postura de casanova pero aquel comentario salió mas sincero de lo que esperaba.

-G-Gracias.- Respondió Stiles inclinándose hacia Dean.- Tu... También eres muy guapo... y sexy...

-¿Divertido también?- Preguntó Dean llevando su mano a la mejilla de Stiles y acortando mas el espacio entre ambos.

-Un poco, si.- Respondió Stiles con una sonrisa lanzando miradas intensas a los labios de Dean mientras se seguían acercando.

-Oigan sólo quería decir que...- Dijo Sam entrando por la puerta arruinando el momento y haciendo a los otros dos separarse abruptamente.- ¿Interrumpí algo?

































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Aplausos porque hoy es mas largo. Espero les haya gustado. Lamento la tardanza acabo de entrar a clases o eso se supone porque no he tenido y estoy muy falta de inspiración.

Los amo lectores hermosos de mi corazón

Jess 💕

TENEBRIS || STEANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora